NARRA RODRIGO.
estoy llegando a casa, después de entrenar.
Abro la puerta y como hace un mes, me cae como un balde de agua fría mi realidad.
Entro y tiro el bolso sin importarme un carajo lo que se pueda romper.
Paso directo al sillón y mi mirada se enfoca rápidamente en la foto de mis hijos.
Llevo un puto mes tratando de acostumbrarme, pero es como si cada vez costara el doble.
Separarme fue una de las cosas que más me dolió, mi relación no venía bien. Pero no me animaba a dar el paso.
Ame mucho a Camila, fueron casi 12 años a su lado.
Éramos felices siendo solo dos, y cuando se agrando la familia lo fuimos aun más. Francesca y bautista son la luz de mis ojos.
Estaba tan acostumbrado a llegar a casa y que el abrazo de Fran sea mi bienvenida, Bauti en su corralito y Camila terminando de poner la mesa.
Ahora todo eso me parece tan lejano, mi casa se siente un lugar tan frío y grande.
Mi vida se ha vuelto tan monótona que la rutina me tiene cansado.
Pongo mucha fuerza para levantarme y ver que voy a comer, la posta es que podría haber comido en el club, pero no tengo ganas de estar rodeado de gente.
Me fijo en la heladera que tengo, veo un par de milanesas y decido que esa será mi comida junto a una ensalada.
Sirvo la comida en un plato y me siento a comer.
Hasta comer se ha vuelto insoportable, me hace falta las historias de Fran contándome su día en el jardín, y su baile nuevo después de almorzar.
Prendo la tele y voy a poner un canal de deporte, pero decido dejarlo donde está. No le prestó atención pero escuchar otras voces me distrae.
Una vez que termino lavo el plato y llamo a Camila para hablar con Fran.
Como hace un mes atrás mi llamada no es atendida, ¡quiero romper todo! Intento una vez más y me responde.
Lo que no me imagino es que lo primero que aparezca en pantalla sea la carita de Fran, la extraño tanto que si pudiese romper esta pantalla de mierda lo haría.
—Hola papi.
—Hola amor, ¿Cómo estás? Te extraño mucho princesa.
—Yo también te estraño papi, y toy bien. Recién llego del jardín.
—qué bueno mi amor, ¿y cómo te fue en el cole? ¿Bauti cómo está? —la miro y me contengo mucho para no llorar— mamá ¿Dónde está?.
—Bau ta bien, mamá se fue a compar. Y no me guta mucho el cole.
Me siento el peor padre del mundo, daría lo que sea porque mis bebes estén bien.
—pa, ¿Cuándo vas a venir? Mamá dice que vo no veni porque tene muchas cosas que hacer.
Trato de que mi expresión no cambie, hace un mes que le vengo pidiendo los nenes. Y su respuesta es que son chiquitos para que viajen tanto.
—ah si, hija. Estoy trabajando mucho, pero te prometo que te voy a ir a visitar.
—¿la abu te dio mi regalo? Cuando vengas, vamos a ir a comprar cosas nuevas para tu cuarto.
—siiii, paaa, me re gustooo gracias, te amo.
Tengo un nudo que no me deja responder, es mi vida y la amo con lo que soy , y lo que tengo.
—de nada princesa, te amo más, pero contame cosas de vos.
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Beso en las rocas. Rodrigo De Paul
Fiksi Penggemarella una artista internacional, y el un futbolista profesional. te amo y te quiero conmigo Tini, vos solo decime que sí y que los envidiosos se vayan Pal carajo!.