Capítulo 11

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XI

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Los días habían transcurrido lentos, habían pasado seis días desde aquel incidente con Lando, ni siquiera puedo cruzar media palabra con él. Cómo te sentirías si la única persona que te ha visto crecer durante años se le ocurre besarte intentando mostrar los sentimientos ocultos que quizás nunca se atrevió a decir, el alcohol es el principal causante de confesar hasta tus secretos más profundos. Mis pensamientos vagaban mientras mis días eran la monotonía de siempre, seis días desde que he ignorado a Lando y el simplemente muestra ser comprensivo pensando que todo es culpa de los entrenamientos, definitivamente no recuerda lo qué hizo esa noche. Y dejando ese pensamiento de lado, entrenaba día y noche para mostrar algo digno ante las regionales, quería que Wyatt y yo llegáramos lejos.

Los mensajes con Joe no habían parado, seguíamos chateando como dos adolescentes que quieren seguir conociéndose. Hace tres días fue su partido pero no pude ir, Wyatt decidió que tomaremos el día completo para ensayar nuevos giros con saltos combinados, a Joe no le molestó en lo absoluto solo que vernos nuevamente costaría incluso meses ya qué él tendría que ir a la ciudad de Kansas.

Lando se iría mañana, está semana iniciaba la temporada de f1 y viajaría hasta Bahréin, me había propuesto ir con él para despejarme de todo esto y sí, estaba incluido despejarme de mi compañero que solo busca la victoria ignorando nuestra condición mental. Ahora mismo me encontraba con él, con Lando observando como metía sus cosas necesarias en la maleta.

— ¿Enserio debes irte? — Hago una mueca mientras me encontraba acostada boca arriba en la cama.

— Todavía puedes pensarlo y venir, Carlos envío un mensaje ayer anhelando a qué pudiera verte por el paddock — Ríe levemente dejando de lado su maleta para acostarse a mi lado —. Me preguntas si debo irme pero me ignoraste durante días, empiezo a odiar tus entrenamientos aunque sospecho que es algo más por el que me dejaste de hablar, ¿fue por Burrow?

— Tonterías — Una pequeña risa sale de mis labios, me ponía nerviosa regresar al tema del beso porqué aunque él no lo recuerda... yo recuerdo cada movimiento que hizo ese día —. Quizás la idea de ir contigo no es tan mala, no quiero estar con Shelby mientras tú estas fuera

— Anda ya, mañana pasaremos por tú maleta — Se voltea Lando para mirarme fijamente —. Serás mi invitada estrella, serás como una novia más del paddock, apartada por Sainz pero lo serás

Tragó saliva ante lo que había dicho, no puede jugar con esos comentarios... claro que sí hubiera sido antes lo hubiera tomado con humor pero ahora no encuentro la forma de que los nervios no  aparezcan cada que él habla de la cercanía que tenemos.

— Nada de novia, seré la amiga del piloto mas joven de la parrilla y claro, estaré casi encantada de poderme encontrar con Carlos... — Esbozo una sonrisa.

— Gracias por acompañarme en esta travesía que recién empieza... — Sonríe ampliamente mientras sus brazos rodean mi cintura acercándome a él, si sintieran ahora mismo verían que mi corazón podría salirse de mi pecho en algún segundo, pero por alivio solo me da un abrazo mientras oculta su cara en mi pecho —. ¿Puedo contarte algo, pequeña? — Susurra sin apartarse de mí.

— Sueltalo — Digo sin más y como impulso empiezo a acariciar su cabello, algo tenía o de lo contrario no estaría ocultando su rostro sobre mi pecho.

— Hablé con Zak el sábado, ese día fue cuando más llamadas te hice intentando localizarte y poder desahogarme contigo pero simplemente nunca tomaste la llamada, bueno, él me habló acerca de las consecuencias que podrían haber si no gano puntos para el equipo en esta temporada... — Me mira directamente a los ojos y un pequeño suspiro sale de sus labios —. No sabes la cantidad de cosas que dijo haciéndome sentir mal, quería huir y jamás haber firmado ese contrato pero aquí estamos, tú eres mi amuleto de la suerte que me hará conseguir puntos para el equipo — Besa mi mejilla y noto que una lágrima cae por encima de su mejilla.

— Lando, todo está bien. Creó en ti y se qué lograrás incluso ganar la carrera, no te sientas mal o de lo contrario simplemente Zak notará que uno de sus pilotos es débil, estaré en Bahréin y en todas las carreras a las que quieras que vaya — Con mi pulgar limpio su mejilla —. Te daré un gran golpe si vuelves a sentirte mal, ahora vayamos a comer que muero de hambre

— Vamos, te llevaré a comer comida china en gran sitio cerca de aquí — Deposita un beso sobre mi frente para después levantarse.

— Gracias por ese directo del fin de semana, ahora es menor la cantidad de hate que me tiran — Sonrió levantandome de la cama —. Joe vendrá a verme en las regionales, espero que tú también hagas un poco de tiempo para ir a verme

Simplemente estaba mintiendo con lo de Joe, solo quería que Lando fuera a verme patinar por primera vez en una gran competencia como esta.

— Lo haré — Se escucha la voz molesta de Lando mientras se ponía una chaqueta de color marrón.

— Anda, iremos combinados — Sonrió al ver qué yo traía una sudadera del mismo color. Un segundo, ¿combinados?, ¿Lando celoso de Joe?, el viaje a Bahréin será demasiado largo con este tipo de actitudes por parte de Lando.

— Vámonos — Sale de la habitación sin siquiera mirarme por última vez.

— He notado que tus cosas están en cajas, ¿de qué me perdí? — Alzó una ceja mientras salía de la habitación observando que la mayor parte de sus cosas estaban dentro de cajas de cartón.

— Me cambiaré de departamento, Zak mencionó que no era conveniente vivir en un lugar donde cualquier persona podía notarme. Después de la carrera, mi nombre será totalmente oficial — Sonríe abriendo la puerta dejándome salir primero.

— Buen punto, yo así sea una patinadora reconocida creó que jamás saldré del basurero de casa de dónde estoy — Río levemente saliendo.

— Te he dicho cómo diez veces que podemos vivir juntos, por mi no hay problema — Sale detrás de mí cerrando la puerta.

Caminamos hacía la salida del edificio del departamento y empezamos a caminar hacia el lado derecho de la calle, miró extrañada a Lando ya qué por lo particular a todos lados vamos en su auto. Nuestro silencio era incómodo, pero se sentía bien, se sentía bien estar con la persona que he visto crecer durante años.

— Lando... viajaremos juntos a Bahréin por tú primera carrera — Susurró en un tono un tanto emocionado.

— Lo haremos pequeña — Aprieta mi mano ligeramente mientras seguimos caminando.

Mi corazón se acelera con un solo toque de él, está claro que son simples emociones que tengo después de aquel beso que me dió. No dejemos que este tipo de comportamientos nos pongan nerviosa o de lo contrario empezará a sospechar algo y de alguna manera tendré que contarle que fue lo que ocurrió esa noche, la noche en qué me dió ese beso que jamás creí obtener.

𝐋𝐢𝐦𝐢𝐭𝐞𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐝𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐨| 𝐋𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐍𝐨𝐫𝐫𝐢𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora