Capítulo 25

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XXV

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Sentada sobre la cama de Carlos, miraba cómo él simplemente se encontraba hablando por teléfono con no se quién, estaba tenso y ni siquiera me hablaba desde que le dije que me quedaría con Lando, no entiendo la razón de su enojo si ahora mismo con quién estoy es con él.

Carlos había colgado su llamada, me regala una mirada rápida y enseguida se mete al baño sin siquiera decirme nada, un suspiro cansado sale de mis labios y caminó hacia el balcón, sentía la brisa sobre mi rostro pero mi mirada no podía dejar de mirar hacía el horizonte dónde algunos yates se encontraban en marcha. Siento una presencia a mi lado pero no me muevo, mi mirada se queda fija en lo mismo.

- Es lindo, ¿cierto? - Me pregunta Carlos quién se abraza así mismo ya qué él aire era demasiado fresco.

- Sí, lo es - Sonrió ampliamente.

- Arreglate, te llevaré a uno - Me abraza por los hombros acercándome a él -. No permitiré qué mi chica se quede con las ganas de estar en un yate

- Estoy cansada cariño, preferiría que nos quedaramos por hoy en la habitación - Me pongo frente a él para besar sus labios.

- Bien, entonces mañana vayamos después de la carrera - Sonríe ampliamente -. Quizás quedé de último por el estúpido de Norris pero por lo menos mañana al final del día estaré junto a la chica más hermosa dando un paseo en yate mientras cenamos

Mis ojos se abren en par, ¿ahora qué?, había quedado también con Lando en que fuéramos a cenar pero tengo que hacer una elección ya que se vería demasiado mal ir a cenar con uno y enseguida con otro, mañana hablaré con Lando y le explicaré el porqué se tendrá que posponer nuestra cena.

- Me parece una idea estupenda, después tendré qué volver a Inglaterra... mis entrenamientos inician el lunes temprano y Liam, mi entrenador, no me dará un día más de descanso - Hago una mueca.

- No pasa nada, ya habrá tiempo para nosotros... incluso aún no he olvidado que en dos semanas serán tus regionales de patinaje que por nada del mundo podría perderme un día tan importante para mí chica - Aprieta mis mejillas ligeramente y me da un beso corto pero se sentía la ternura con la que me lo había dado.

Ambos entramos y cerramos el ventanal ya qué hacía demasiado frío, nos quedamos mirando fijamente y él nega varias veces, en la mañana no quiso y ahora tampoco. Asiento comprensivamente y me cambio de ropa colocandome algo más cómodo para dormir, para mí suerte deje mi ropa para dormir en la habitación de Lando. Me acuesto en la cama y segundos después siento a Carlos también acostarse mientras me abraza pegándome a su cuerpo, está es la primera vez que me sentía protegida mientras dormía.

Claro, también he dormido con Lando en una misma cama cuando íbamos de paseo a alguna ciudad pero no era lo mismo con él qué ahora con Carlos.

- Buenas noches ma belle, mañana debemos levantarnos temprano. Quiero qué todos nos vean llegar juntos y seamos la portada de todos los medios, mañana será el momento de aclarar todo - Me da un pequeño beso sobre mi cabello.

- De acuerdo, qué descanses Sainz - Acarició sus manos que se encontraban abrazándome y sin previo aviso me quedo dormida.

Mis ojos se abrían lentamente, notaba qué la habitación estaba completamente iluminada eso quería decir que ya era otro día, al intentar moverme los brazos de Carlos aún se encontraban en mi cintura, a este paso me acostumbraré a despertar con Sainz a mi lado. Me volteó para quedar frente a él y me sorprendía el hecho de que fuera tan fuerte, ni siquiera podía soltarme de su agarre.

𝐋𝐢𝐦𝐢𝐭𝐞𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐝𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐨| 𝐋𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐍𝐨𝐫𝐫𝐢𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora