-Me gustas-
Mis manos están sudorosas y estoy demasiado nerviosa. Después de la pareja que actualmente expone nos corresponde a nosotros. Volteo hacia atrás para encontrar la mirada de Thomas, pero él está concentrado en lo que dicen nuestros compañeros. Pasan los minutos y ellos terminan.El profesor hace algunas correcciones sobre lo que dijeron, y les da sus porcentajes en nota. A todos hoy los ha calificado muy bajo, creo que es porque las hipótesis no estaban terminadas. Thomas y yo hicimos una sobre las pruebas de la existencia, a él le corresponde decir el concepto principal y a mi explicarla. Solo espero que todo salga bien.
—Smith y Stewart, adelante—Dice el profesor. Me levanto del asiento, pero me sorprende que cuando Thomas pasa por mi lado aprieta mi mano, como si fuese un breve “Tranquila”
Al pararnos en frente de más de una docena de rostros el corazón se acelera debido al nerviosismo. Cierro los ojos por unos segundos y recuerdo lo me dé dijo él antes de entrar al aula: “Imagina que no hay nadie. Solo somos tu y yo. Como si estuviésemos teniendo una conversación sobre una de nuestras teorías rotundamente locas”. Respiro y abro los ojos. Hago lo que me dijo. No hay nadie en el aula, no hay nadie.
—…nuestra hipótesis está muy conectada a la espiritualidad y ahora mi compañera Evangeline se las explicará—Termina su parte.
Por primera vez siento seguridad de lo que voy a decir, gracias a él.
—¿Cómo podemos comprobar la existencia? Tal vez, ¿midiéndola?... Hasta el día de hoy las personas basan sus teorías de la existencia en su singularidad, pero hoy venimos a desmentir esto. Nos definimos como seres únicos y auténticos cuando realmente no es así. Desde jardín de niños los maestros nos enseñan que 3+3 es igual a 6, pero 3+3 jamás es igual a 6. Lo mismo hacemos con los idiomas, clases sociales, colores, y el tiempo. Aquí es donde quería llegar; el tiempo una medida. Tratamos de comprobar nuestra existencia con el tiempo creando un ciclo de vida: Nacemos, crecemos, nos reproducimos y morimos. Pero como sabemos que existimos, si el tiempo también ha sido creado por nosotros. La verdad, es que nada, ni nadie existe, ya que no existen números, no existen letras, no existe el tiempo. Solo cosas codificadas para adaptarnos y con ello llegamos a la conclusión de que absolutamente nada existe, porque nada puede comprobar su existencia. Sí, somos seres humanos, tenemos sentidos, pero esos sentidos nos engañan. Estamos dentro de una ilusión que nos hace creer que existimos.
Al terminar vuelvo a la normalidad. Todos mis compañeros están ahí con caras raras de que no entendieron nada. Pero el profesor nos observa con una sonrisa reluciente en su rostro y se pone los lentes. Siempre hace eso cuando va a hacer preguntas.
—¿Cómo se les ocurrió esta hipótesis?—indaga.
Thomas me anima con la mirada a que le responda. Ambos tuvimos la idea, y no sé porque quiere que lo haga yo. Y lo que me pone nerviosa otra vez, es que somos el primer grupo al que le hacen preguntas. Suspiro. Bien, lo haré.—Creo que nos pasó algo parecido a lo de Newton, solo que no nos cayó la manzana en la cabeza—El profesor sonríe ante la ocurrencia—Estábamos viendo una carrera de autos en la biblioteca mientras hacíamos tareas y pensamos que si aceleramos el auto demasiado desaparecería y nada podría comprobar que existe. Esa fue la idea principal, luego investigamos un poco y surgió todo lo demás.
—Magnifico—El profesor levanta de su asiento y aplaude. Thomas y yo nos miramos extrañados. Pero nuestros compañeros aplauden también, algunos nos miran con cara de espanto, mientras tanto otros al parecer si entendieron. Después el profesor nos hace acercarnos y me sorprendo, al ver que, en nuestro porcentaje de nota, nos puso 100%.
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Brilla como las estrellas [YA EN FÍSICO]✔️
Novela Juvenil"𝐄𝐬𝐭𝐞 𝐥𝐢𝐛𝐫𝐨 𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐚 𝐥𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐝𝐞 𝐝𝐨𝐬 𝐞𝐬𝐭𝐫𝐞𝐥𝐥𝐚𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐯𝐚𝐠𝐚𝐧 𝐩𝐨𝐫 𝐞𝐥 𝐮𝐧𝐢𝐯𝐞𝐫𝐬𝐨 𝐬𝐢𝐧 𝐮𝐧 𝐩𝐮𝐧𝐭𝐨 𝐟𝐢𝐣𝐨, 𝐡𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐪𝐮𝐞, 𝐬𝐢𝐧 𝐬𝐚𝐛𝐞𝐫 𝐥𝐚 𝐫𝐚𝐳ó𝐧, 𝐨𝐜𝐮𝐫𝐫𝐞 𝐥𝐚 𝐥𝐞𝐲 𝐝𝐞...