180 DÍAS PARA ENAMORARME [+18] [LIBRO 1][TERMINADA]

💸 13. PUNTO DÉBIL 💸

TRAVIS

– No sirve de nada que me sigas evitando – se planta Camille frente a mi.

– No te estoy evitando. Simplemente no quiero hablar más del tema. Total, ya has decidido, ¿no?

– Si, he decidido. Eso no quita que no tengamos que hablar.

Se sienta en la silla libre frente a mi escritorio y la miro con una ceja enarcada.

– Tu dirás.

– ¿Has hablado con Irina?

– ¿Por qué debería hacerlo?

– No sé, tal vez porque la última vez que habló contigo, se fue de esta casa y no ha vuelto.

– Es su problema, no el mío.

– Es necesario que esté aquí. La necesitamos para empezar a prepararla ya.

– Mala suerte.

– Travis – gruñe sin dejar de perder su dureza – No es ninguna broma. La necesitamos y lo sabes. Te guste más o te guste menos.

– Entonces, búscala.

– ¡Deja de ser así! - se pasa la mano por el pelo exasperada.

– Estoy siendo normal – me encojo de hombros.

– Esa chica se ha ido por tu culpa. Soluciona lo que hayas hecho y pídele que vuelva. Tampoco creo que te haga gracia no tener trabajadora. Tienes la casa
hecha un asco.

– Es de mala educación fijarse en eso.

– Travis – se levanta y rodea el escritorio hasta estar a mi lado – Somos socios, eres mi jefe, pero antes de todo eso, eres mi amigo. Somos una puñetera familia. Y a mi si me vas a permitir decirte todas las cosas que me plazca. No soy nadie para callarme. No sé que es lo que te pasa con Irina, ni por qué le tienes tanta tirria y asco, pero trágate un poco tu orgullo y pídele que vuelva. Es la mejor que has tenido en tu casa y lo sabes. También es la mejor candidata para el premio.

– No puedes obligarme.

– Lo único que te digo es que si Irina no trabaja con nosotros, yo tampoco lo haré. Te quedarás sin modelo y no presentarás tu Marca.

– ¿Me estás amenazando? - me levanto también.

– Solo te estoy diciendo lo que va a pasar como no busques a Irina ya mismo. Y sabes que todo lo que digo, lo cumplo.

– A ver si te enteras, Camille – la encaro – Irina se fue por decisión propia. No la eché. No tengo porqué buscar a alguien que no quiere estar aquí.

– Es que sí quiere estar aquí, solo que tú y tu mujer sois el problema. Si la hubierais tratado de forma neutral, no se habría ido. Los desprecios de Aurora me los puedo esperar, porque esa mujer es puro veneno, ¿pero tú? - me mira dolida – Te conozco, y sé que debajo de toda esta frialdad, guardas un corazón. No sé que problema tienes con ella, pero cambia tu actitud de una vez. Ella es buena persona. Incluso te hizo un regalo que cualquiera hubiéramos aceptado. Es humilde, educada y trabajadora. No la pierdas.

– Tú no la conoces igual que yo – gruño.

– Demuestra ser el hombre que dices ser.

Me da la espalda y sale del despacho de mala manera.

No quiero ir a buscarla. Sería perder la dignidad una vez más. Además, sé que va a volver. Tiene todas sus cosas en su habitación desde hace cuatro días. No es tan inútil como para dejar todo lo que tiene en mi poder.