No es parte del libreto I

223 46 35
                                    

Va a tener un dolor de cabeza. 

Lo siente, puede saborearlo, pero sostiene una cara de piedra mientras la reunión no hace otra cosa que hundirse en incertidumbre... en la cabecera de esa gran mesa, Dumbledore no sabe que ha ocurrido... uno de sus profesores no aparece, no lo han encontrado en ninguna parte de Hogwarts y el familiar que se supone fue invocado para cuidarle, esta igualmente desaparecido. 

Ya es el atardecer de un largo día.

Han cubierto las clases de la profesora Burdage, han fingido que no pasa nada malo aun cuando los estudiantes no dejaron de preguntar... la popularidad de la profesora es bastante buena... en otras ocasiones seria cuestión de burla, una plática más en la sala de profesores, pero no ahora, no cuando se están quedando sin mentiras y apenas es el primer día. 

Albus tiene demasiado entre sus manos, el ministerio desea su presencia constante... los padres de familia han enviado cartas cuestionando su postura ante el despido discreto de un funcionario del ministro... hay tantos rumores circulando, tantos deberes flotando en el aire figurativo... sin mencionar a Voldemort... Hogwarts debería ser el menor de sus problemas. 

La desaparición de Charity Burdage no debería ser algo para preocuparles, tiende a estar por su cuenta en todo momento... en su salón de clases... vagando... pero su ausencia fue notable para los más cercanos que empezaron a moverse buscándole. 

No la encontraron.

Entonces falto a su primera clase.  

- ¿Albus? - Minerva pide rompiendo el mutismo, dándole ese vistazo esperanzador.

Duele que todos le sigan la corriente, el anciano en ocasiones siente una gran responsabilidad... un peso indescriptible... el haberse convertido en lo suficientemente confiable como para que todos dependan de sus decisiones, tal vez, por eso le agrada Burdage, es la única que no lo ve de esa manera... tampoco lo trata como si supiera todo en el mundo... suspira, no tiene tiempo para pensar en eso cuando están esperando.

-No levantaremos la alarma fuera de Hogwarts-

-¡Director!- Bill es quien levanta la voz incrédulo. 

Pero el anciano levanta la mano silenciándolo, tomando un aliento para entrelazar sus dedos con cuidado de elegir sus siguientes palabras... dando un vistazo a todo el personal reunido, uno que, aunque no todos sean tan cercanos, han sido afectados por el cambio de personalidad del desaparecido -Entiendo que es preocupante, que la profesora Burdage nunca se marcharía sin avisar a nadie...- lentamente dice -Pero no vamos a levantar alarmas, no ahora, no por esto y en tan poco tiempo de ausencia-  

Minerva se ve contrariada, pero baja la cabeza obediente. 

El resto de los docentes creen fervientemente en su orden de calma.

Albus se enfoca en el mayor de los Weasley, el único que mantiene el fuego y la resistencia de aceptar con tan pocas palabras -No podemos anunciar la ausencia de la única creadora tan a la ligera...- enumera aun cuando siente que se ha quedado corto, que hay demasiadas cosas que considerar antes de entrar en pánico -Hay que confirmarlo, buscar en los alrededores de Hogwarts, buscar a su familiar... hay que gastar todas nuestras probabilidades antes de que salga del propio colegio-

- ¿No puede estar hablando en serio? - pide el pelirrojo con el ceño fruncido.

- ¡Señor Weasley!- Minerva es quien castiga, pero es ignorada.

Ambos varones se miran con detenimiento - Es demasiado pronto para hacer de esto un escándalo mayor- insiste con fuerza el anciano. 

Chasqueando los dientes, Bill se endereza arrastrando la silla en un ruido que retumba en la sala... ignora las llamadas de atención de la leona al ponerse de pie para salir sin mirar atrás, dando un portazo con innecesaria fuerza. 

La maldición de la muerte futuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora