Fluyendo

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Era una zona poco transitada en el lado este del castillo, al entrar a la oficina... que seguramente está conectada a una habitación privada... Charity no evita detenerse a admirar el tipo de mobiliario de gusto antiguo... luego los cuadros de paisajes, ninguno de retratos... los libros acumulados en los libreros... cayendo a la ventana pañosa que sabe, puede ordenar limpiar a un elfo -Le falta luz a esto, ¿Es algo de Slytherin? - dice abiertamente al mirar al dueño del lugar.

Siempre tan elegante, como una pintura antigua que encaja en la perfecta rutina de hogwarts sin muchas preguntas, Salazar le da uno de esos gestos en blanco lleno de exasperación madura... obviamente... su comentario no será contestado al señalarle la silla de invitados sin amabilidad.

La docente que no evita mirar la hora al entrar se sienta con un suspiro por la falta de amabilidad a la que debería estar acostumbrada, le dedica un gesto poco impresionado -Este lugar se siente asfixiante- levanta su dedo con seriedad -Podrías enfermar- indica no muy versada en un ambiente saludable, pero está segura, un poco de luz vendría bien a cualquiera. 

-Ahórrate tus comentarios ingeniosos, moza- advierte el antiguo fundador ahora, un profesor de apoyo.

Decidiendo si deseaba luchar contra ese título, Charity arruga su nariz cuando las tazas aparecen en un chasquido... los elfos están bien entrenados para no mostrar su cara durante todo el proceso encima del escritorio limpio... baja sus hombros rendida -Solo estoy tratando de romper el silencio, es espeluznante- asegura.

-En casa lograbas mantenerte callada- le recuerda casual el resucitado.

Ignorando el escalofrió que provoca que llame ese lugar como algo compartido, Burdage toma la taza ya servida y considera su respuesta cortos segundos -En casa...- repite sin titubear -Hay un jardín abierto para ver ¿Aquí? Solo una araña en el rincón...- se detiene, observa largamente porque no es exagerado señalar la existencia de ese insecto encima de uno de los libreros - ¿Qué especie es? - no evita cuestionar distrayéndose por completo del punto.

Un destierro sin pronunciar, la araña se desaparece junto con la telaraña.

-Y ahí va mi distracción- murmura secamente Charity al enfocarse en su anfitrión.

Salazar, guardando su varita signo de que es el culpable, toma un aliento infeliz.

La docente gira los ojos indignada, observa el juego de té - ¿Te lo trajiste? - pide incrédula.

- ¿Crees que tengo ganas de discutir cualquier cosa contigo? - una elegante ceja se levanta en ese esculpido rostro, la reliquia que ha encajado muy bien en esa época niega cual anciano a un joven idiota -Esto es obligación, moza- 

-Dios, eres el alma de cualquier fiesta-

-Siempre ha sido de esa manera

Parpadea sin tensarse, Charity busca alrededor hasta encontrar un retrato bien oculto entre libros... levanta la varita lista para limpiar, poder ver lo que adivina, es una variable de cuadro donde seguramente esta uno de los fundadores... levanta ambas cejas asombradas para mirar al que asumía, no deseaba nada de sus compañeros. 

Pero el elegante hombre esta inmutable bebiendo su té.

-Salazar, deja de fingir que no existimos - asegura el que, sin duda, es Gryffindor. 

Burdage parpadea de nuevo en dirección del inmutable anfitrión. 

Slytherin, ahora Ollivander, suelta uno de esos largos suspiros exasperados al soltar su taza en un tintineo que parece sobresalir entre las quejas infantiles a las que se ha reducido el retrato escondido detrás de ese mueble polvoriento... sacando su varita... la agita haciendo que se silencie sin palabras, toma de nuevo su taza y bebe sin mirarle en ningún momento. 

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⏰ Última actualización: Oct 06 ⏰

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La maldición de la muerte futuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora