La Isla Fel

Capítulo 43: Ham-Hafas

Compañeros íntimos.

–¿Athan Zeev? –preguntó la enfermera entrando al cuarto de Athan.

–¿Sí? – Dijo él. Estaba sentado en la cama, con su psiquiatra al lado.

–Tu novia te mandó esto. –Le mostró la mochila.

–¿Mi novia? –Preguntó a la defensiva.

El pulso de Athan se disparó, como si sintiera miedo, al observarlo en la máquina el doctor lo anotó rápidamente.

–Sí, una chica de pelo negro, muy tierna y atenta. –El pulso de Athan se calmó. – Parece que llamó a tus padres y estuvo pendiente de ti hasta hace un momento que vinieron por ella.

–¿Luary está aquí? ¿Puedo verla?

–No, no, eso no sería bueno. –Dijo el doctor sin perder apuntes del comportamiento de Athan.

–Nosotros ya le informamos que no podías tener visitas. –dijo la enfermera. –Por eso te mandó esto, y dijo que vendría mañana a recoger el traje con el que viniste.

Athan pareció decepcionado de no poder verla, la enfermera se dio cuenta y le acercó la mochila.

–¿Por qué no revisas qué te trajo?

–Es una buena idea. –dijo el doctor. –Te dejamos a solas. Y.... luego preguntaré por qué tu novia es pelinegra y no rubia como me acabas de contar.

Athan sonrió con inocencia esperó a que salieran para comenzar a sacar las cosas de la mochila, lo primero que encontró al abrirla fue un libro. Lo abrió con cuidado era "La historia del loco" de John Katzenbach, rio luego de leer la contratapa.

«¿Quién le da a un enfermo mental un libro de asesinatos en un psiquiátrico?»

Del libro cayó una hoja de papel, parecía una nota. Athan la levantó curioso y sonrió al instante.

"Hola puerkicornio, ¿la cama es cómoda? ¿hay ventana en tu habitación? ¿Estás mejor? Perdón por las preguntas, no me dejarán verte, así que, me toca hacértelas por papel. Caray, ni a los prisioneros les impiden ver a sus visitas..."

Luary pasó a explicar todo el contenido de la mochila, Athan se rio y se sonrojó al tiempo que revisaba todo lo que ella le puso. Había priorizado más la comodidad que el glamour y eso le saco una sonrisa aún más brillante.

"Eso sería todo, bueno, más o menos. Había muchas cosas que quería decirte luego del musical, al parecer también tendré que hacerlas por esta nota...
Perdón, nuevamente provoqué que nos alejáramos. No me arrepiento de haberlo hecho, pero tampoco considero que haya sido de mis mejores ideas. Espero poder reunir coraje suficiente para explicártelo algún día...

No te sientas culpable por lo que pasó hoy. Probablemente pensaste que nunca vas a mejorar, pero te aseguro que no es así, te estás esforzando y yo sé que algún día lo superarás. Cuando lo hagas, vayamos a la playa a acampar.
Con cariño, Lu.

Pd.
Te puse el libro de la historia del loco, porque me pareció que sería el equivalente a leer El Conde de Montecristo en la cárcel, espero que te guste."

Athan metió la carta en el libro y lo abrazó. Él también la extrañaba. Esa noche Athan comprendió, que estaba total y completamente jodido, tal vez, mucho más que antes.

Los padres de Athan llegaron al día siguiente. Luary y los maestros Evander y Svajone los esperaban en la cafetería del hospital. Fue el director, el primero en ver a la pareja entrando a la cafetería, los siguieron sus acompañantes. El padre de Athan sonrió al ver a su amigo, el abrazo entre ellos no pudo esperar.