Experimentar un sentimiento profundamente contento y satisfecho que surge de una conciencia de bienestar.
Athan y TJ estuvieron dispersos el resto del día, ninguno habló de lo que había pasado con el productor. Cuando llegaron a casa TJ propuso jugar Smash Bros mientras cenaban.
–¿Te arrepientes? –Le preguntó Athan luego de haber estado jugando un rato. –De rechazar a Big Hit.
–No lo sé, creo que no. No sé si quiero volver, soy feliz aquí, ¿sabes? Tengo una vida. –hizo una pausa para pensar en la situación de su amigo. –¿Y tú?
–No sé si tengo una vida aquí, pero sé que quiero debutar contigo... En unos meses, se hará realidad, nos iremos, ¿verdad?
TJ guardó silencio.
–No pareces emocionado. –Comentó el pelirrojo.
–Estaba pensando en Lu, quiero estar con ella... Pero me iré.
–Yo también pensaba en Takashi. No puedo permitirme romper con él.
–Puedes no hacerlo.
–Lo sé, pero eso no quiere decir que no tendré una relación a distancia con él. ¿Tú... le dirás a Luary lo que sientes?
–No. No puedo, es mejor ser amigos.
–¿Y vivir pensando en qué hubiera pasado si...?
–No sé qué es peor, vivir preguntándome eso, o tener algo lindo con ella sabiendo que llegará el día en el que terminemos.
–Todas las parejas terminan, Athan.
Guardaron silencio, esa frase también aplicaba a TJ y Takashi.
–Luary me dijo que probablemente no vaya al viaje.
–¿Por?
–Andraste le dijo que no podía ir porque no participó en el musical... tiene que dar un examen.
–¡Mierda! –Exclamó al ser asesinado en el juego, suspiró resignado mientras Athan continuaba el juego. –Lo hará bien, es Lu.
–Es Andraste, para ella, Lu nunca hace las cosas bien.
Continuaron jugando hasta que sus ojos comenzaron a sentirse pesados, de no ser por eso, ambos se habrían quedado pensando en lo que pasó ese día.
La maestra Andraste le tomó un examen a Luary cada día, de cada una de las canciones del musical, su reacción era siempre la misma, una negativa de cabeza seguida de un largo suspiro y un asfixiante silencio.
Durante esos días TJ buscó la forma de comentarle a Takashi lo del contrato. No quería hacerlo, no estaba 100% seguro de que le volverían a ofrecer otro contrato, pero la posibilidad estaba ahí, nunca lo había creído posible, pero así era. Su corazón quería creer que era posible volver a Corea para debutar, aún si eso significaba estar lejos de Takashi.
–¿No te cansas de venir? –Le preguntó Takashi mientras trabajaba.
–Para nada, verte me renueva las energías.
Takashi se sonrojó, pero no dejó de trabajar en lo que hacía, TJ lo abrasó por la espalda y respiró su perfume.
–Tengo que decirte algo... –Takashi se preocupó y dejó los alfileres.
–¿Pasa algo malo?
–No... ¿Te parece si tenemos una cita y te lo cuento todo? Salgamos el sábado. Déjame llevarte a comer a un lugar lindo, tal vez... pasar la noche juntos después.
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La Isla Fel
RomanceAthan Zeev tenía poco más de 20 años cuando su familia lo envió a La Isla Fel para continuar con un tratamiento para sus ataques de pánico, tras una serie de éstos antes de su debut en Corea del Sur. Es en el momento más oscuro de su vida cuando re...