Niñero

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⚠️advertencia: este capítulo contiene abuso sexual explícito, leer con discreción.

Unos pasos elegantes, acompañado de una bella figura, una brillante piel y una fuerte presencia era todo lo que llamaba la atención en aquel lujoso restaurante.

Como acostumbraba a hacer en sus tiempos libres, Kim JungWoo había ido a un restaurante a cenar en compañía de él mismo.

No era nada novedoso, disfrutaba más su propia compañía que la de unos mediocres alfas dominantes que lo invitaban constantemente.

Aún no comprendía qué tenían de interesante, iugh.

Los únicos alfas dominantes que apreciaba y se llevaban su respeto eran su hermano JongIn y su amigo, Lee TaeYong.

Luego de que terminó de degustar el postre, pidió la cuenta y tomó sus cosas para dirigirse con tranquilidad al estacionamiento.

Se subió a su automóvil, pero antes de siquiera encender el motor del auto, lo sorprendió y lo aterró instantáneamente unas manos ajenas que vinieron del compartimiento trasero del automóvil, cubriéndole la boca e inyectándole algo en el cuello con brusquedad.

JungWoo intentó sazarse desesperado pero otras manos tiraron de su asiento hacia atrás y lo ayudó a inmovilizarlo, intentó en un método desesperado liberar sus feromonas bruscamente, pero éstas estaban cada vez más débiles.

Le habían dado una droga de alto nivel de inhibición de feromonas.

—cobardes hijos de puta, no se atreven a enfrentarme sin inhibirme.— soltó, pero estaba cada vez más mareado y débil.

—shh, ese lenguaje no es digno de un Omega dominante de tan buen porte.— pronunció una voz a sus espaldas.

JungWoo conocía esa voz y reconocía esas feromonas.

Eras dos alfas dominantes, hermanos y miembros de uno de los clanes líderes de las grandes familias, los Kang. Ciertamente ambos fueron rechazados por el dichoso omega dominante que se encontraba en apuros.

—bastardos... ¿Qué me dieron?— preguntó, abriendo y cerrando sus ojos, intentando enfocar su vista.

Uno de ellos rió— te ves tan tierno ahora mismo, y que siempre te ves tan prolijo, con ese porte de egocéntrico, como si... el mundo fuera tuyo.— habló— ahora mírate cuan patético te ves.— pronunció el rubio con un deje de gracia, JungWoo lo había reconocido, su nombre era Kang SeungSik.

—hijos de perra...— habló— los Kim los van a hundir...

Los dos rieron— y todavía tiene ánimos para estar de arrogante con su puto clan de oro.— comentó el pelinegro, éste era quien JungWoo reconoció como el primogénito del clan, Kang SeungYoon.

—a este le hace falta que le bajen los sumos.— agregó el rubio con una sonrisa que provocaría miedo a quien sea.

A través de todo aquel aturdimiento, JungWoo sabía que la dichosa confusión que tenía no se debía sólo a la droga de precedencia desconocida y peligrosa que se encontraba circulando en su sistema e inhibiendo cada vez más sus feromonas y energía. Sino que simplemente no cabía el porqué ellos dos estarían haciendo eso, siendo que hace ya casi dos años cortó toda relación con ese desagradable clan.

¿Qué estaba ocurriendo realmente?

—opino lo mismo.— dijo el pelinegro— dejarlo hecho un desastre, sintiéndose la peor mierda para que no vuelva a creer ni jugando que es la gran cosa.

—¿Qué dices? Si ya cayó lo suficientemente bajo al meterse con los recesivos y betas.— comentó SeungSik— quién diría que tenemos servido en bandeja de plata al omega que todos los alfas de las grandes familias quieren tener en su cama— comentó acariciando su rostro— pero cómo le gusta hacerse el difícil a la princesa, eh.— dijo mientras acariciaba su cuello y bajaba a su pecho— ¿cómo crees que se sienta tomar a la criatura más aclamada del país?— se cuestionó comenzando a desabrochar su blusa.

Inevitable | TaeTen [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora