Inevitable | TaeTen [Omegaverse]

Distancia

—¿y esta bella sorpresa?— preguntó TaeYong en un tono entretenido cuando salió de su casa para guardar la maleta en la cajuela del auto.

—como salimos a desayunar juntos, aprovechamos para pasar por aquí a despedirnos.— explicó Sicheng con una sonrisa.

—si, espero que no te estemos atrasando.— habló JungWoo.

—no, despreocuprnse.— aseguró y seguidamente miró a la tercera persona presente que hasta el momento estuvo en silencio.

—créeme, fue idea de ellos.— aclaró Ten al notar la mirada de TaeYong en él.

—dije que estaba bien, despreocúpate.— aseguró dedicándole una sonrisa.

—Johnny, Jaehyun y Yuta no pudieron venir, pero te dejan saludos.— le hizo saber Ten.

—de acuerdo, no debieron molestarse de todas formas ustedes.— dijo y en ese momento Nayeon salió de la casa de los Lee mientras iba hablando por teléfono. Se dirigió directamente al auto, ignorado olímpicamente a los presentes.

—¿cómo no lo haríamos? Nuestro TaeYongie se irá a Europa por primera vez solo.— habló JungWoo en un tono tierno.

—no iré solo, Nayeonie está conmigo.

—bueno, ella ni cuenta, seguro tú te encargarás de ser quién los guíe en su estadía en Milán.— dijo, restándole importancia.

—bueno, en parte es cierto.— concordó riendo.

—okay, era solo para despedirnos, espero que la pases bien TaeYong hyung, a la vuelta debes contarnos cómo te fue ¿si?— dijo Sicheng despidiéndose con un breve abrazo.

—gracias Winwinie, y claro que les contaré, dale mis saludos a Yuta, ¿si?— se despidió con una sonrisa.

—TaeYongie, dime si necesitas algo ¿si? Puedes llamar cuando quieras.— habló JungWoo.

—estaré bien Woo, gracias.— dijo con una sonrisa.

—aún así, estaré atento a mi teléfono, y si te sientes incómodo, puedes volver antes, ¿de acuerdo?— habló el omega— cuídate mucho.— se despidió con un abrazo.

—te preocupas como una madre, te dije que estaré bien.— dijo divertido— tú también cuídate mucho, ¿si?— el menor asintió, antes de dirigirse a su automóvil, llevándose a Sicheng en el proceso, ambos dándole un notorio espacio a Ten, quien los maldijo en su mente.

TaeYong sonrió al ver el claro rostro de molestia de Ten, seguido a un suspiro resignado— ¿llevas todo? Se veía algo ligero tu equipaje.

—así es, iremos en el mes más caliente del año.— le recordó.

—cierto, ¿llevas protector solar? ¿Gorra?— preguntó.

—si, el protector solar lo compraré allí.— respondió.

—de acuerdo, pasaporte, tarjeta, documentos, ¿todo?— preguntó para estar seguro.

—ya dije que sí, idiota, ¿que no piensas despedirte bien?— se quejó, atrayéndolo en un abrazo. Ten quedó estático en el lugar, sin saber porqué titubeaba— si te sientes mal, inquieto o lo que sea, por favor no dudes en avisar ¿si?— habló en un tono bajo, cerca de su oído— siento cada cosa de ti, pero aún así no lo sé todo, promete que me lo dirás.

—ya te dije que lo haré TaeYong, puedes estar tranquilo, puedo vivir sin tí dos semanas.— dijo divertido.

—lo sé, pero aún así, hazme el favor de decirme si te pasa algo o sientes mucha inquietud por la distancia ¿bien? Prometo tomar el primer avión rumbo a Corea.— aseguró abrazándolo más cerca de su cuerpo y solo ahí Ten correspondió al abrazo mientras sentía ese familiar calor plantarse en sus mejillas.