Inevitable | TaeTen [Omegaverse]

Jodido Cumpleaños

[⚠️Advertencia: capítulo largo/+4700 palabras.]

—¿cuántas veces me fui a dormir tranquila mientras tú estabas con tu amiguito haciendo dios sabe qué? Vamos, dime.

A TaeYong no le salían las palabras por más que no mentía— ya te respondí Nayeon, ahora estás algo confundida, salgamos a tomar aire.— ofreció, intentando tomarla de la mano para ir afuera.

—¡¿cuántas?!— gritó alejando su mano de un golpe, ocasionando que el teléfono de TaeYong se caiga al suelo, trizando su pantalla. En ese preciso momento la música se detuvo, por lo que aquella escena que de por sí llamaba la atención, ahora lo hacía aún más, ocasionando que todos volteen y miren hacia esa dirección, mientras algunos murmuraban.

Se preguntarán cómo fue que llegaron a esta situación, pues... el cumpleaños de TaeYong finalmente había llegado, comencemos desde que comenzó el dichoso cumpleaños.

Veintiséis horas atrás...

El 01 de Julio había llegado, trayendo consigo numerosos saludos de muchos conocidos.

Aunque por supuesto TaeYong tomó más en cuenta los de sus allegados.

Como el entretenido saludo de Ten, quien por cierto; fue el primero.

Éste justamente se había quedado una noche previa a su cumpleaños a jugar juegos de mesa con TaeYong, dejando que pase el tiempo hasta entrada la noche, aprovechando que al día siguiente sería sábado.

Ten, con la excusa de que iría al baño, fue a sacar de la nevera el pastel en tamaño miniatura que compró para esa ocasión, le colocó una pequeña vela y esperó en el pasillo un minuto, viendo el reloj que colgaba en la pared, hasta que dieron las doce de la noche y cambió la fecha a primero de Julio.

Ahí fue cuando Ten abrió la puerta mientras cantaba el feliz cumpleaños para TaeYong, éste se sorprendió pero al recordar que era su cumpleaños rió divertido por el gesto de su mejor amigo.

—¿de qué te ríes? Vamos, soplalo rápido que está pesado.— bromeó ya que el pastel en realidad era muy pequeño.

—me da gracia porque es muy pequeño, queda mejor contigo que conmigo.— dijo riendo y Ten lo empujó con su mano libre.

TaeYong cerró los ojos, pidiendo un deseo y seguidamente los abrió, y mirando fijamente a Ten, sopló la pequeña vela.

—¿Qué pediste?— preguntó el omega.

—no puedo decirlo, si lo digo no se hará realidad.— respondió.

Ten dejó el mini pastel en la mesa de luz y seguidamente saltó arriba de TaeYong abrazándolo efusivamente— ¡feliz cumpleaños idiota, ya tienes veintitrés años! ¿en qué momento creciste tanto?— exclamó despeinándolo.

TaeYong rió mientras lo abrazaba por igual— lo mismo me pregunto por ti, mírate, ya no eres más ese tierno niño que tartamudeaba por todo y tenía ese marcado acento a tailandés.— dijo mirándolo— ahora eres un joven omega muy bello y resplandeciente.— mencionó.

Ten sonrió algo avergonzado— bueno, pero sigo siendo tierno ¿cierto?— bromeó.

—de eso no cabe duda.— respondió y ambos rieron. TaeYong volvió a traerlo en un abrazo, sorprendiendo al tailandes— muchas gracias Tennie.

Mientras tanto el teléfono de TaeYong vibraba en silencio bajo la almohada.

Pues el alfa veía venir que Ten haría algo así, así que decidió ponerlo en silencio para que los llamados y notificaciones de las demás personas que querían felicitarlo no interrumpan su momento.