KAEZE
No esperaba que Denzel tuviese amigos tan agradables, ni tampoco que conociera a uno de sus compañeros de jidang. Resultaron todos ser muy amables, y aunque no acostumbraba a estar rodeado de varias personas, se sintió cómodo. Era algo irónico para un artista del jidang como él.
La mayoría se interesó cuando dijo que escribía poemas, había recuperado la esperanza de encontrar personas en el mundo con la misma sensibilidad artística que él.
—¿Escribes poemas? Vaya eso es genial, siempre suelo cargar poemas que me inspiren cuando me decae el ánimo. Aquí tengo uno.
Mitsue enseñó un pequeño papel con algunos hanjis escritos.
Hanae se arrimó a él para poder leer mejor.
—Esa caligrafía está horrible ¿quién te lo vendió?
—La hizo June. —Mitsue sonrió.
—¡Está hermosa!
June se acercó y le desordenó el cabello riendo.
—Eres un mentiroso.
Al parecer todos se llevaban bien entre sí. Le hacía preguntarse a sí mismo ¿por qué él no podía tener eso que todos ellos sí? Siempre estuvo solo y jamás eso fue un problema, le gustaba su soledad. Pero al ver la calidez que ellos compartían, lo hizo cuestionarse por un momento qué era lo que lo separaba del resto. ¿Había sido Hasui?
Kaeze era intuitivo, notó que quien lideraba el grupo era el de cabello rosa, Hanae, por muy disperso que pareciera, luego estaba June. Él decía algo y los demás obedecían, era como la voz. Nunca pensó compartir con él, en los ensayos era un tipo muy introvertido y algo misterioso, pero cuando lo vio con los demás, era totalmente distinto. ¿Era una máscara o así era su verdadero yo? De todas formas, le agradaba de las dos maneras.
June sugirió jugar Karuna, y la invitación le vino de perlas. Tenía memorizados todos los poemas, los había releído más de cien veces y a lo largo de toda su vida, estaba confiadísimo. Se enfrentó a Mitsue y le ganó sin problemas. Denzel había estado observando toda la partida sin decir nada. Fue entonces que dio un paso adelante y se arrodilló frente a él antes de que fuera el turno de June.
—Yo también jugaré.
Lo miró sorprendido. Sabía que su oponente no le interesaba en absoluto el arte y estaba compitiendo por mero compromiso.
Las cartas estaban ya ordenadas y Hanae se encargaría de recitar, como siempre. Comenzaban los quince minutos de memorización. Conque recordara el primer verso de cada carta era suficiente, podría quitarla con tan solo oír la primera palabra. Miró a Denzel, tenía la misma cara de indiferencia que siempre, esa que tanto lo sacaba de quicio. Intentó no pensar demasiado en eso y se acomodó mejor en su posición.
Hanae sacó la primera carta.
—Tras la colina roja...
La carta salió volando y cayó varios metros más allá.
Kaeze se quedó con la mano estirada, sin haber podido siquiera tocarla. No podía creerlo, Denzel había mandado a volar la carta correcta por los aires.
«Solo ha sido suerte de principiante», pensaba para sus adentros. No soportaba la idea de que el xegiyu le ganara sin siquiera conocer los cien poemas. ¡Ni siquiera se interesaba en la poesía ni el arte, era ridículo!
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Jidang de las máscaras [COMPLETA]
Misterio / SuspensoUna novela BL de misterio y fantasía. La pintura más icónica del templo Maji fue robada y su autor se ve en la obligación de contratar a un equipo que descubra dónde está. Es así como llega hasta Denzel Ming y su asistente. Denzel debe reunir las p...