capitulo 1

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El día había amanecido muy resplandeciente, sin una sola nube en el cielo y el sol golpeando directamente la ciudad costera de Galama. El sonido de las olas y el ruido de la gente animada hicieron despertar a Natalia, una joven pelirroja de ojos marrones y piel pálida.

-Natalia el desayuno está en la mesa ya, o bajas o te vas sin desayunar - dijo la madre de Natalia abriendo la puerta de la habitación de golpe
-Ya voy mamá, me estoy vistiendo - dijo Natalia molesta por la interrupción
-Pues venga, yendo a la cocina rapidito - dijo la madre saliendo de la habitación
-Joder tía, que pesada mi madre, te veo ahora en clase - dijo Natalia colgando el móvil

Natalia fue directa a la cocina para desayunar e irse a su último día de clase. Pronto empezarían las vacaciones y tenía un viaje organizado con su familia al centro del país.

-Recodar que hoy a las cinco es la graduación, no faltéis ¿vale? - dijo Natalia dándole un bocado a la tostada
-No te preocupes, me he cogido el día para ir a verte hoy y tu padre sale de trabajar a las dos, asique estaremos todo allí - dijo la madre de Natalia sonriendo
-Eso espero, porque si no, me escapo de casa - dijo Natalia con una sonrisa burlona
-No irías muy lejos - dijo la madre mientras fregaba los platos

Natalia terminó de desayunar y volvió a su habitación para recoger la mochila y el móvil. Pero por unos segundos se quedó mirando la ventana y como el agua golpeaba las rocas del paseo marítimo.

-Hoy es día de playa, no de clase - dijo molesta - Espero que pase rápido el día

Natalia se recogió el pelo en una coleta y bajó a la calle para ir a su último día de clase.
Durante el camino iba pensando en sus cosas y no se dio cuenta del coche que venía derecha a ella.

-Cuidado - dijo alguien tirando de su brazo

Con el corazón a mil por hora se giró para ver quien había sido quien la salvó del camión y resulto ser su amiga Cristina

-Menos mal que he bajado antes hoy, que si no estás echa puré en la carretera - dijo Cristina molesta
-Gracias Cris, no me había dado cuenta iba pensando en otras cosas - dijo Natalia avergonzada
-¿Otra vez? No me digas que sigues pensando en aquel chico - dijo Cristina alterada
-Bueno...solo un poquito - dijo Natalia colorada
-Nati, hace ya más de cinco meses de eso, tienes que olvidarlo - dijo Cristina más clamada
-No es fácil, fue todo muy intenso y me cuesta estar sin sus brazos rodeándome - dijo abrazándose ella misma
-Eres demasiado apasionada Nati, deberías ser algo más...fría - dijo Cristina separando los brazos de Natalia
-Lo siento soy así y no puedo evitarlo - dijo Natalia sonriendo

Con la conversación las dos chicas no se habían dado cuenta de que habían llegado a clase y de que iban algo tarde.
A primera hora les darían una pequeña charla sobre lo que tendrían que hacer está tarde en la graduación y de cómo comportarse ya que era la primera vez que hacían algo así en el instituto y no podían hacerlo mal. Las demás horas eran sobre como caminar o como saludar al público sin parecer unos adolescentes alocados y avergonzados. Aunque el verdadero miedo estaba en cómo comportarse como adultos cuando aún no saben que harán con sus vidas, aunque el destino tiene escrito pequeños fragmentos para Natalia.
Ya casi eran las cinco de la tarde y los padres comenzaban a venir. Los graduados estaban cambiándose de ropa y poniéndose todo lo elegantes que podían antes de la graduación.

-Madre mía Nati, te queda genial el vestido negro - dijo Cristina con la boca abierta
-¿No es algo atrevido? - dijo Natalia mirándose en el espejo

Se había puesto un vestido negro con una falda que llegaba a la altura de las rodillas, con un pequeño escote y la espalda descubierta. Todo ello decorado con su pelo rojizo que resaltaba más con el negro del vestido.

-Así todos los chicos querrá acercarse a ti - dijo Cristina sonriendo
-No me interesan ahora los chicos - dijo Natalia sonriendo - Quiero pasármelo bien hoy
-Pues terminemos de arreglarnos y vamos a ver qué tal sale todo - dijo Cristina cogiendo a Natalia del brazo

Todos los padres habían llegado incluso los de Natalia que estaban en primera fila.

-¿Nerviosa? - dijo Cristina blanca como la leche
-Creo que menos que tú - dijo Natalia sonriendo
-SI fuera la chica más sexy ahora mismo del escenario no estaría tan nerviosa - dijo Cristina temblando
-Tranquila, pasará rápido - dijo Natalia poniéndose en la fila

Los alumnos se habían colocado por orden alfabético para ir recogiendo los títulos y poder sacarse fotos con la familia. Cristina y Natalia estaban de las últimas de la fila

-Prefería ser la primera así me lo quito y ya no pasó tanta vergüenza - dijo Natalia sonriendo

Cuando le tocó a Natalia salió lo más erguida posible, como si fuera otra persona diferente a la que está mañana era cuando salió y es que aunque ella no lo sepa, es así.
Natalia recogió el diploma y se sacó varias fotos con su familia y con sus amigos. Por fin había terminado el tan esperado curso y por fin podría relajarse este verano.
Después de la entrega de los premios había un pequeño banquete y una fiesta para los alumnos y los padres y claro esta Natalia no podía faltar a ella.
Todo era risa y diversión, bailando todos juntos y celebrando que empezaban una nueva etapa en la vida. Pero por casualidades del destino un enchufe comenzó a arder en medio del escenario.
La gente comenzó a gritar y a correr hacía todas las salidas

-¡Natalia vamos! - gritó su madre mientras tiraba de ella
-Tengo que buscar a Cris, estaba en el baño - dijo Natalia soltándose de su madre - Salid vosotros - dijo mientras iba directa al baño.
-¡Cris! Tenemos que salir - gritó Natalia por los pasillos
-No puedo moverme - dijo una voz al final del pasillo
-¡Cris! - dijo Natalia mientras corría hacía ella - ¿Estás bien? - dijo cogiéndola de los brazos
-ME torcí el tobillo al escapar de las llamas, todo está ardiendo - dijo Cristina llorando
-Tranquila, saldremos de aquí - dijo Natalia andando con Cristina lentamente

Las llamas pronto comenzaron a extenderse a todas direcciones y Cristina y Natalia pronto estuvieron rodeadas por el fuego

-No hay salida - dijo Cristina tosiendo por el humo
-Aguanta un poco - dijo Natalia dejando a cristina en el suelo para que cogiera el poco aire que quedaba - Piensa Nati, piensa algo - dijo en voz baja.

Y sin saber cómo las llamas comenzaron a recorrer el cuerpo de Natalia envolviéndola en fuego y humo. Un grito ahogado por el fuego y unas lagrimas evaporadas hicieron que el fuego terminara por extinguirse y el cuerpo de Natalia se quedase en el suelo sin una sola quemadura.

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