Los Cuatro Elementos

capítulo 32

Mark volvió a denegar la oferta de coger un arma, en cambio Carolina no se lo pensó y eligió su espada.
Mark estaba más nervioso que la primera vez, pues no quería hacer daño a Carolina, aunque temía él más por su vida.

-¿Listo Mark? - dijo Carolina sonriendo
-Por supuesto - dijo colocándose

Carolina salió corriendo hacia Mark con la espada sujeta con las dos manos, frenó delante de Mark y movió la espada de lado para golpearle en un costado, pero en ese momento la espada atravesó una nube de humo negro.
Carolina no sabía lo que era y se quedó algo confusa.

-Que susto, casi no me da tiempo - dijo Mark golpeando a Carolina en la cara

Carolina cayó en el suelo, pero se levantó con una sonrisa.

-Eso ha estado bien, pero no te confíes - dijo Carolina sonriendo
-Igualemos las cosas - dijo Mark sonriendo

Sus brazos comenzaron a cubrirse de humo negro y acumulándose todo en su mano. Poco a poco de esa nube negra aparecieron dos espadas de un negro brillante.

-¿Lista? - dijo Mark
-Claro - sonrió Carolina

Mark y Carolina avanzaron a la vez el uno a por el otro y comenzaron a intercambiar golpes que acababan siempre en el aire. LA agilidad de Carolina era perfecta para ese momento y el poder e Mark lo protegía de los golpes de Carolina.
En la sala no se escuchaba nada, solo el ruido del metal chocando entre si y la cara de asombro de los monjes.
A más tiempo pasaban cambiando golpes más rápido se movían y con más fuerza se golpeaban.
Mark estaba bastante cansado, pero Carolina seguía con el mismo ritmo que cuando empezaron a pelear. Estaba claro que su nivel era mucho mayor que el de Mark.

-No pienso dejar que ganes hoy - dijo Mark sonriendo
-Y yo no pienso perder este combate - dijo Carolina sonriendo

Los golpes se sucedían con más fuerza y un humo negro comenzaba a salir de las espadas de Mark.

-Mierda - dijo Mark saltando hacía atrás y clavando la rodilla en el suelo

Las espadas desaparecieron de las manos de Mark y su respiración estaba agitada.
Carolina se acercó andando hacia Mark con la espada sujeta con fuerza. Agarró a Mark del cuello de la camiseta y lo acercó hacía su cara.

-Está vez gano yo - dijo Carolina susurrándole en el oído con una sonrisa y un disimulado beso en la mejilla

Mark se quedó en el suelo con una sonrisa viendo como Carolina bajaba del tatami con la elegancia que le caracterizaba.

-Muy bien Mark, ha sido un buen combate, por el uso de tu poder veo que has mejorado bastante y además has podido mantener el ritmo de Carolina un tiempo - dijo el maestro sonriendo
-Gracias, pero aún me falta bastante - dijo Mark levantándose del suelo

La gente comenzó a aplaudir a Carolina por su combate y poco a poco fueron abandonando la sala.

-Ya que estamos aquí, seguiremos la reunión aquí - dijo el maestro sacando unos papeles de su mochila de cuero marrón

Los demás se sentaron alrededor de él para poder ver la documentación que tenía.

-Como sabéis la noche anterior sufrimos un ataque del ejército del aire y aunque no ocurrió nada grave, costó bastante ya que nunca habíais peleado con un enemigo de verdad - dijo el maestro mostrando las fotos de las criaturas - Parece ser que el espíritu del aire puede invocar el poder de otros guardianes y crear un pequeño ejército bastante poderoso - dijo el maestro suspirando
-Una pregunta - dijo Johan mirando las hojas - Si usted es el más fuerte de todos, ¿cómo es que salió herido y además le costó tanto? - dijo mirando la hoja de daños
-Johan sube al tatami - dijo el maestro sin mirarle a la cara
-Vale - dijo Johan con una sonrisa

Mark, Carolina y Natalia no sabían que decir, se quedaron bastante sorprendidos ante esa respuesta del maestro.

-No quiero hacerle daño - dijo Johan sonriendo
-Si me das una sola vez no volveré a decirte nada ante tus inoportunos comentarios - dijo el maestro quitándose la chaqueta

Ninguno de los elementos había visto al maestro sin camiseta ni nada, y por primera vez vieron su cuerpo musculado y lleno de cicatrices de todas las batallas que ha tenido que luchar.

-Está muy musculado para su edad - dijo Natalia con cara de asombro
-Va a matar a Johan - dijo Mark seriamente

Johan se lanzó directo a por el maestro y antes de golpearle se convirtió en agua y apareció a su espalda. El maestro se apartó ágilmente de su golpe y con una pequeña mueca se acercó rápidamente a Johan y le dio un puñetazo en el estómago que lo envió a la pared de enfrente dejándolo clavado en ella.
Johan tosió algo de sangre y cayó al suelo dolorido

-Espero que me respetes más la próxima vez - dijo el maestro poniéndose la chaqueta de nuevo

Los demás no sabían que decir, el maestro nunca había dado muestras de poder y ver la figura de Johan en la pared les había dejado bastante sorprendidos.

-Hacía tiempo que no te veía pelear Maestro - dijo Carolina sonriendo
-Lo sé, la última vez peleé contigo, pero duraste mucho más - dijo el Maestro con una sonrisa

El maestro les siguió mostrando los informes y explicándoles cómo deben actuar en batalla mientras Johan seguía en el suelo con el puño del maestro marcado en su abdomen.