❪ 𝟒𝟏 ❫

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CAPÍTULO CUARENTA Y UNO | MI MUNDO !




EMMA




Hoy no era un buen día en lo absoluto.

Como principal, mi período había llegado con más dolores que nunca y estoy cerca de matar a alguien en cualquier momento si se atreven a decirme algo que pueda generar una mínima molestia en mí. Creo que jamás había estado con un peor humor que hoy así que el que se cruzara conmigo que comience a rezar. Pero eso no era todo, sino que encima estaba con un resfriado que mejor ni te cuento. Se me vino todo juntito y entre los cólicos y los estornudos repentinos no sé que era peor.

Es por eso que vino Alexa al rescate.

Trajo sus provisiones y por provisiones me refiero a helado y chocolates, lo cual me parece perfecto porque si voy a ser infeliz un par de días que por lo menos sea comiendo, ¿no?

Nos pasamos todo el día como Dios manda, es decir, viendo la saga de Scream y tragando helado hasta estar a punto de explotar. Yo de verdad no sé que haría sin Alexa.

Posiblemente en días así morir o matar a alguien.

Por cuestiones legales esto, obviamente, es una broma.

Mi padre y Anna estuvieron fuera por sus respectivos trabajos por lo que hacía ya unas horas no había rastros de ellos, pero no faltaba mucho para que volvieran tampoco.

— ¿Sabes algo de los chicos? —en el medio de la tercer película, Lexi parecía haberse hartado un poco pero no se atrevía a decírmelo y la única forma que encontró para que no la odiara fue hacer una inocente pregunta con esa cara angelical que suele poner ella.

— Deben estar ensayando aún —contesté sorbiendo mi nariz con un clínex de una forma bastante ruidosa, para luego tirarlo en el cesto que md traje al lado de la cama y acomodar la enorme manta sobre mí. Observé la hora en el teléfono—. Luego tenían una entrevista, pero no recuerdo el canal donde lo pasan.

— Le preguntaré a Bill —propuso la rubia, alcanzándome la caja de clínex sabiendo que uno no me sería suficiente y le agradecí con la mirada. Ya me dolía hasta las fosas nasales de la cantidad de veces que me limpié, sentía los ojos ardiendo y mi cabeza en cualquier momento estallaría por lo que en ese momento supe que quizás hacer una maratón en este estado no había sido una decisión muy sensata para ser honesta.

¿Me importa? No realmente.

Mi teléfono vibró un par de veces sobre mi estómago ya que lo había dejado apoyado ahí, y con un gruñido adolorido volví a agarrarlo.

Que ganas de morir ahora mismo.

Oh, mejor no. Es Tom. Las ganas de morir se fueron al instante.

Tomsito :)
Hola mi amor
¿Qué tal sigues?
¿Te hace falta algo?
¿Necesitas que te lleve al médico?
Quiero ir a verte

Emms :)
Hola, cariño
Estoy mejor, no te preocupes
Anna antes de irse a trabajar
me dijo que podía tomar y estoy
haciendo reposo😄
¿Tú qué tal?

Tomsito :)
¿Segura estás bien?
No puedo creer que estés enferma y yo aquí

Emms :)
Estás en un ensayo, Tom
Es tu trabajo
Aparte Lexi me está cuidando,
no te preocupes

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⏰ Última actualización: Apr 24 ⏰

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