CAPÍTULO 18

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A la mañana siguiente, Yuan Yang fue el primero en despertarse.

En el momento en que Yuan Yang recuperó la conciencia, inmediatamente sintió un dolor punzante que recorría sus músculos cansados.

Yuan Yang podía sentir el entorno acogedor y agradable a su alrededor y parecía estar abrazando algo cálido. Cuando se volvió para mirarlo, vio una cabeza esponjosa debajo de él. De repente, la cara de Gu Qing Pei apareció de repente frente a sus ojos. Los ojos de Gu Qing Pei estaban bien cerrados y su respiración era bastante lenta. Se podía ver fácilmente que se sentía terriblemente incómodo.

Yuan Yang se sintió repentinamente abrumado por el entumecimiento.

Recordó lo que había hecho la noche anterior.

Yuan Yang se había cogido a Gu Qing Pei. No sabía cuántas veces se lo había comido. Yuan Yang incluso olvidó la hora exacta en que se quedó dormido debido al agotamiento. Todo lo que sabía era que quizás Gu Qing Pei había perdido el conocimiento durante ese tiempo.

Yuan Yang inclinó ligeramente la cabeza hacia el otro lado. Miró el montón de condones usados. Esos condones estaban llenos de todo tipo de fluidos corporales obscenos que harían que la gente se sintiera incómoda al verlos.

Entonces, en realidad había sucedido... se había cogido a Gu Qing Pei.

La situación se había vuelto algo complicada. ¿Cómo puede la relación entre ellos convertirse en este tipo de relación? Ambos estaban uno contra el otro desde el principio, pero ahora.......

Cuando Yuan Yang trató de mover su cuerpo, todavía se sentía bastante cansado. Era terriblemente raro que perdiera por completo el control al hacer el amor. Ninguna mujer lo había vuelto tan loco antes. Tal vez, fue porque la droga había afectado el cuerpo de Gu Qing Pei para que se volviera tan caliente y sensible, lo que provocó que las personas se ahogaran en éxtasis. Con ese tipo de calor... ese tipo de...

—¿Eh?— Yuan Yang se sorprendió de repente. El hombre que yacía en sus brazos se sentía demasiado caliente.

Yuan Yang extendió su mano para tocar la piel de Gu Qing Pei y se sintió demasiado caliente para tocarlo. Esta no era una temperatura normal en absoluto.

Gu Qing Pei tenía fiebre.

Yuan Yang se sentó. Abrió los párpados de Gu Qing Pei y lo examinó. Parecía que Gu Qing Pei se había desmayado debido a la fiebre.

Yuan Yang acaba de descubrir que ninguno de los dos se cubrió el cuerpo con la manta anoche. Mientras tanto, Gu Qing Pei fue drogado, penetrado durante toda la noche e incluso terminó durmiendo desnudo hasta la mañana. No era raro que se hubiera enfermado.

Yuan Yang miró a Gu Qing Pei, que estaba luchando y murmurando mientras dormía debido a la fiebre alta. Cuando sus ojos se dirigieron a las espantosas mordidas de amor esparcidas por el cuerpo de Gu Qing Pei, Yuan Yang se quedó sin palabras.

Parecía que realmente se había pasado de la raya...

Yuan Yang llamó a la recepción del hotel y les dijo que enviaran un nuevo juego de ropa de cama a la habitación. Después de eso, llamó a Peng Fang para que llamara a un médico.

Peng Fang todavía estaba medio dormido cuando contestó el teléfono, —¿Eh? ¿Por qué necesitas llamar a un médico? ¿Te estás muriendo?— Peng Fang todavía guardaba rencor por el fiasco de ayer.

—No digas demasiadas tonterías. Solo consígueme un médico aquí. Encuentra uno que sea muy discreto—.

Una vez que Peng Fang recordó que Gu Qing Pei había sido drogado por un MB y tal vez había surgido algún problema por eso, también se preocupó. Interrogó a Yuan Yang mientras vestía su ropa, —¿Qué diablos ha pasado? Regresé al hotel solo. ¿Pasó algo después de eso? Y maldito bastardo, ¿por qué no me dijiste antes?—

AMADO ENEMIGO - BELOVED ENEMYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora