AMADO ENEMIGO - BELOVED ENEMY

CAPÍTULO 87

Cuando llegó a la empresa al día siguiente, antes incluso de desayunar, Wang Jin lo llamó a la oficina.

Gu Qing Pei esperaba lo que Wang Jin le diría, por lo que estaba preparado para asumir la responsabilidad.

Wang Jin sonrió levemente y señaló el sofá, —Siéntate—.

Gu Qing Pei se sentó, —Wang Ge, ¿Qué pasa?—

—Lo pensé anoche y creo que aún deberías administrar el proyecto de licitación—. Wang Jin sonrió —En primer lugar, eres la persona más familiarizada y conocedora de esto. Tu prepara todo el documento de licitación. El equipo también fue dirigido por ti. Incluso si solo has venido a esta empresa por un corto período de tiempo, todos están completamente convencidos de ti. A decir verdad, cambiar un nuevo protagonista en medio de esto, realmente no tengo una persona adecuada—.

Gu Qing Pei quería abrir la boca para decir algo, pero Wang Jin intervino —En segundo lugar, después de todo, tú y Yuan Yang tenían una relación personal, por lo que ciertamente es más conveniente para ti tratar con él ya que lo entiendes—.

Gu Qing Pei mantuvo la compostura, —Wang Ge, es porque tengo una relación personal con él por lo que no soy adecuado—. Wang Jin en realidad iría tan lejos como para dejarlo tratar con Yuan Yang. Esto no era solo para mostrar su fuerza o para lanzar los planes de Yuan Yang al caos, sino que lo más importante era obligar a Gu Qing Pei a afirmar su lealtad.

Si estaba de acuerdo, tendría que enfrentarse sin ayuda a la ira de Yuan Yang y sus comportamientos irracionales. Si no estaba de acuerdo, Wang Jin ya no volvería a confiar en él.

No, tal vez nunca había confiado en él.

Este movimiento por parte de Wang Jin era realmente despiadado.

—¿Qué no es adecuado? Eres un empleado de mi empresa. Qing Pei, creo que puedes diferenciar entre asuntos públicos y personales. Aunque puede ser incómodo para ti en esta situación, también puedes usar tu relación anterior con Yuan Yang. Esto no está mal, ¿no lo crees?— La actitud agradable y sincera de Wang Jin no se parecía en nada a una que tendría un esquema tan vicioso.

Gu Qing Pei respondió resueltamente —Wang Ge, si realmente dirijo el frente para reunirme con Yuan Yang, solo arruinará las cosas. Nunca logrará el efecto que desea, Wang Ge no confiar en mí es mi culpa. Dado que este es el caso, renunciaré para que no tengas este nudo en tu corazón. Si renuncio en este momento, todavía podemos ser amigos—. Gu Qing Pei se puso de pie y caminó hacia la puerta.

Detrás de él, una ráfaga de viento se levantó de los pasos apresurados, el hombro de Gu Qing Pei fue repentinamente agarrado por la fuerza. Antes de que pudiera reaccionar, fue empujado contra la pared con labios ardientes rozándolo, un ataque algo brutal en sus labios.

Gu Qing Pei apretó el puño, pero finalmente no golpeó. En cambio, ejerció fuerza para alejar a Wang Jin. Dijo con frialdad —Presidente Wang, cálmese un poco—.

Wang Jin agarró sus hombros y bajó la cabeza, jadeando. Pasó un rato antes de que levantara la cabeza con los ojos inyectados en sangre. Dijo con voz ronca —Qing Pei, realmente me gustas, pero me decepcionas una y otra vez—.

Gu Qing Pei sintió una punzada de culpa, —Wang Ge, lo siento, pero lo juro. Absolutamente no conspiré con Yuan Yang para engañarte. Realmente no tenía idea de que él es el socio de Zhong Xian. No hice nada que fuera perjudicial para la empresa. Es solo que, por mi culpa, la compañía ha experimentado pérdidas. No puedo absolverme de esta culpa—.

Los ojos de Wang Jin miraron fijamente la cara de Gu Qing Pei durante mucho tiempo. Él dijo —Está bien, te creo, pero no quiero que tengas ningún sentimiento persistente por Yuan Yang—.