AMADO ENEMIGO - BELOVED ENEMY

CAPÍTULO 71

Yuan Yang fingió sentarse casualmente mientras se ponía sus pantalones frente a Gu Qing Pei y le decía —Un viejo amigo que no le gustaba a mi papá—.

Gu Qing Pei se dio la vuelta y también se sentó en la cama, mirando en silencio a Yuan Yang.

No sabía por qué, pero sentía que una vez que Yuan Yang saliera por esta puerta, nunca volverían a ser como eran.

Este tipo de premonición hizo que su corazón se contrajera. Abrió la boca, pero no pudo decir nada al final.

Yuan Yang volvió la cabeza hacia atrás y le dedicó una amplia sonrisa, dejando al descubierto su hilera de dientes blancos.

Gu Qing Pei sonrió con fuerza, —Date prisa y vete. Tu familia te está esperando para comer con ellos—.

Yuan Yang se adelantó para darle un beso, —Comeré un poco y volveré. ¿Me esperas para comer cangrejo?—

—Bueno.— Gu Qing Pei lo agarró del cuello y lo besó intensamente, —Ve—.

—Espérame. Regresaré rápidamente.— Yuan Yang se vistió y le dio un par de besos más a Gu Qing Pei. La neblina persistente en su corazón lo hizo sentir incómodo. Yuan Yang podía imaginar a lo que se enfrentaría cuando regresara a la casa de su familia, por lo que no quería dejar esta casa.

Gu Qing Pei sonrió levemente mirándolo, su expresión parecía normal para darle tranquilidad a Yuan Yang.

Después de que Yuan Yang se fue rápidamente, Gu Qing Pei también se vistió y fue a la cocina. Al ver el cangrejo que estaba a medio cocinar, aún debía terminar de cocinarlo. No necesitaba desperdiciar comida a pesar de que sabía que Yuan Yang no volvería a comer hoy.

Gu Qing Pei presionó una mano sobre la mesa, otra mano cubriendo sus ojos.

.........

En el momento en que Yuan Yang entró en la casa de su familia, sintió una atmósfera depresiva.

Su hermano menor y su hermana estaban sentados en la sala de estar, aparentemente esperándolo. Las expresiones de ambos niños eran sombrías.

Yuan Ying dijo tímidamente —Hermano mayor, papá y mamá discutieron, papá dice que te está esperando en el estudio—.

—Oahhh—, Yuan Yang se frotó la cabeza, —No tengas miedo, esto no tiene nada que ver con ustedes dos. Yuan Geng, llévala de regreso a su habitación—.

Yuan Geng asintió y se puso de pie, pero no caminó hacia su hermana. En cambio, caminó hacia adelante para pararse junto a Yuan Yang, bajando la voz, —Hay algo que mamá no sabe, Papá se niega a decírselo, así que empezaron a discutir. Supongo que esto tiene algo que ver contigo. Entonces... tampoco le digas a mamá.—

Yuan Yang sonrió a regañadientes, —Lo sé... vuelve a tu habitación—.

Después de que los dos niños regresaron a sus habitaciones, Yuan Yang subió las escaleras. Tomando una respiración profunda, llamó a la puerta del estudio.

—Adelante—, sonó la voz sombría del presidente Yuan al otro lado de la puerta.

Yuan Yang empujó la puerta y entró, —Papá—.

Yuan Li Jiang estaba de pie frente a la ventana. Lentamente se dio la vuelta y lo miró, —Estos últimos días, ¿te quedaste con Gu Qing Pei?—

Yuan Yang asintió, —Sí—.

—Bastardo, hiciste oídos sordos a las palabras que digo—.

Yuan Yang levantó la cabeza para mirar directamente a su padre, —Papá, me gusta, no tengo la intención de separarme de él—.