CAPÍTULO XIX

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Mientras Jungkook y Jin intercambiaban miradas el abogado Jung Hoseok pinchaba su comida sin probar bocado. –Hobi te juro que no importa cuanto le piques a los camarones, no van a saltar mágicamente a tu boca. Por favor come o habla me estás desesperando– dijo Jin mientras sostenía la mano de su amigo. Jungkook por su parte los miraba sin opinar, Hobi levantó su rostro con el ceño fruncido –Ese bastardo infeliz, no sabía que seguía viendo a Eun. Hace unos meses atrás me presentó a un omega petulante y odioso llamado Thomas, te juro Jin que si ese estúpido beta está jugando con nuestro amigo le voy a patear en las bolas– soltó el omega con el rostro completamente rojo. Kook por su parte le sirvió un vaso de jugo de arándano que habían pedido para acompañar su comida -Hobi tranquilo, de seguro habrá una explicación para lo que acabamos de ver– le dijo Jungkook mientras Jin asentía. -Así es Hoseok, debemos darles tiempo para que ellos nos cuenten en confianza. Si vas ahora a amenazar a tu primo seguramente Eun se va a molestar con nosotros– le decía Jin mientras masticaba un pedazo de su osobuco.
Una vez terminada su comida decidieron que esperarían un poco para ver que pasaba con los dos betas, así que dentro del auto de Jungkook, dos omegas y un alfa sofocados esperaban ver salir al médico y el otro abogado.
-Ahí están- dijo Hobi mientras hacía maniobras para esconderse en el asiento trasero sin estropear la maqueta de Jungkook. Vieron como Jiho salía tomando a Eunwoo por la cintura hasta llegar al coche donde le abrió la puerta, una vez que Eun estuvo sentado rodeó el auto, ocupó el puesto del conductor y se marcharon. Ok, eso explicaba por qué Eun no llegaba a dormir algunas noches o desaparecía los fines de semana que no tenía guardia.
-Kookie, amor quiero yogurt helado. Esto de ser espías en verano me sofocó demasiado- dijo Jin mientras se acercaba al rostro del alfa y le daba besitos en la barbilla.
-Espera Jin, dijimos que iríamos a ver los trajes. La boda está demasiado cerca y el tiempo se nos pasará como un suspiro- habló Hobi mientras volvía a acomodarse en la parte de atrás del auto después de rebotar y terminar de trasero entre el espacio de los asientos delanteros. Jungkook sentía que a veces transportaba bebés en lugar de omegas adultos y profesionales, puso en marcha el auto se dirigió camino a Barneys, aunque en el camino hizo la parada necesaria para conseguir yogurt helado con fruta, Jin no le dejaría tocarlo esa noche si dejaba un antojo sin cumplir.  Llegaron a casa por la noche, Eunwoo estaba en la cocina preparando la cena para todos, el delicioso aroma de ajo, mantequilla y orégano inundaba el ambiente en penthouse. -¿De dónde vienen?- les preguntó Eun mientras terminaba de cortar tomates y los incorporaba al bowl de ensalada que estaba en la encimera del desayunador.
-Mmm fuimos a ver los trajes para la boda, encontré tres modelos que me gustaron así que Jimin, Jin y yo iremos el lunes a revisarlos y definir cuál queremos y ¿Tú Eun, dónde has estado?- le explicó Hobi, aunque a Eun no se le pasó por alto el tono mordaz con el que habló Hoseok y ese era su momento.
-Salí a comer con Jiho y pasamos la tarde en su departamento Hobi-  soltó sin filtro el beta dejando a Hobi en shock. -¡Y lo admites!- chilló indignado el omega mientras lo señala con su índice acusatoriamente, Jin y Jungkook de pie en la puerta veían el intercambio de palabras que se estaba dando en su cocina
-Calma Hobi, Jiho dijo que esto te molestaría pero no sabía hasta que punto- le tranquilizó Eunwoo, después de todo aunque tuviera una actitud irritante era su amigo y estaba embarazado, sabía que esto sólo se debía a la hormonas fluyendo locas en el cuerpo del omega.

Mi Hobi hormonal es un encanto aunque sea un histérico de primera🤭

Nos leemos mañana

NO TODO SE QUEDA EN LAS VEGAS [KOOKJIN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora