『Séis』

1.8K 302 56
                                    

Capítulo 6
En una noche oscura

HyeLin se sirvió otro trago en el pequeño vaso bebiéndolo en un instante. Luego de haber pasado parte del día con HanNa había comenzado a beber de las botellas de Soju que compró en una tienda con productos coreanos. Su cabeza estaba doliendo un poco, se sentía ligeramente mareada aunque todavía era consciente de lo que hacía. Quería emborracharse esa noche, perderse un momento. Miró el mar como muchas veces hacía, la manta debajo de su cuerpo mantenía la arena fuera de las botellas y los dos vasos pequeños, tenía algunos pastelillos de fresa como compañía.

—¿Estás bebiendo?—la voz de JungKook le hizo mirar al chico. Éste tomó asiento a su lado, fue cuando vio su mano vendada.

—¿Qué te pasó?—con cuidado la tomó mostrando preocupación.

—No es nada, tuve un accidente en clase. ¿Desde cuándo estás bebiendo?

—¿Por qué no me dijiste de ese accidente?

—Estoy bien, Hye.

Ella hizo una mueca decidiendo creerle. No tenía ganas de discutir, el alcohol en sus venas no se lo permitía. Le sirvió un trago a JungKook y éste lo aceptó sintiendo aquel líquido caer por su garganta.

—Iba a salir con YouJin por la mañana, pero tuvo un ataque de ansiedad así que salí con HanNa—se sirvió un trago para ella acabando por preferir la botella—Estuvimos hablando.

El pelinegro de tatuajes pensó en detenerla, no lo hizo porque de vez en cuando hacía falta beber por un rato. En su lugar, tomó otra botella de Soju abriéndola, dio un trago a ella sintiendo aquel sabor. No recordaba la última vez que se había emborrachado, tal vez en una de esas cenas que solía hacer con sus trabajadores.

—¿De qué hablaron?

—Ella y NamJoon tuvieron una relación como nosotros. Ya sabes, amigos con beneficios—hizo una pausa para beber—La diferencia es que se separaron cuando los sentimientos intentaban joder todo—sonrió con cierta amargura—¿Te imaginas si nos hubiéramos confesado cuando adolescentes? La yo de hace ocho años habría salido huyendo.

—El JungKook de hace ocho años no se hubiera confesado, no era tan valiente como ahora.

—¿Te consideras valiente?—lo miró apoyando su mano en la manta. Parte de su cabello castaño se movía por el viento de la noche, a JungKook le gustó como se veía esa imagen de ella.

—Un poco, sí.

La observó beber hasta la última gota en pequeños tragos. Estuvieron callados disfrutando ese silencio, escucharon algunas risas infantiles venir de unos niños que jugaban con un perro atrapando un disco, lo siguiente salió natural de Hye:

—No quiero hijos en el futuro—su voz fue más lenta. Era evidente que el alcohol empezaba a hacer efecto—No me veo como madre.

—Coincidimos en algo.

—¿Tampoco me ves como madre?

—No eso—sonrió un poco sintiéndose mareado. Miró la hora en su teléfono, el tiempo volaba cuando estaban juntos—Hablo de que tampoco me veo teniendo hijos en el futuro, hace ocho años le dije a mis padres que no quería hijos, mi madre dijo que era muy joven para saberlo—Hye lo miró con atención mientras éste veía a los niños—Ahora tengo veintisiete años y pienso igual.

—Adoptaremos un perro para que sea nuestro hijo—bromeó.

—Estás ebria, Hye—señaló.

—Claro que no. Sé lo que digo—recostó su cabeza en su hombro abrazando su brazo—¿JungKook?

—¿Mmm?

—¿Qué pasaría si me voy de vuelta a casa?—eso le preocupó. Respiró profundo esperando que eso no ocurriera—No puedo relacionarme con alguien sin tener miedo a que descubra quienes somos—añadió—Iré a Seúl, asesinaré a JaeWang yo misma.

—Hye...

—Shh—cubrió su boca con su mano—No discutamos esta noche, mi cabeza explotará si discutimos—colocó un dedo en sus labios—No estoy diciendo que me iré.

—Deberíamos descansar por hoy.

—No quiero—se recostó en aquella manta colocando un brazo sobre sus ojos—Déjame un rato más.

JungKook optó por recostarse también mirando al cielo oscuro, esa noche no había estrella alguna, cerró sus ojos enfocándose en el sonido de las olas, en el olor a sal de ese lugar, en el viento suave que soplaba esa noche, su respiración fue calmándose al punto de hacerle sentir sueño. Volteó su cabeza para ver a HyeLin y supo que estaba dormida por como respiraba, con cuidado quitó su brazo de sus ojos acariciando su mejilla con su mano buena, apartó algunos mechones de su rostro depositando un beso en su frente. Para él, lo único que importaba era esa castaña de ojos grandes, cuando los que creía conocer le dieron la espalda ella era lo único que le quedaba.

Se colocó de costado brindando suaves caricias a su mejilla.

—¿Hye?—susurró.

—Me siento...tan agotada—murmuró muy bajo. Estaba despierta con sus ojos cerrados—Lo siento.

—¿Por qué?

—No lo sé—eso le dolió. La abrazó con cuidado subiendo y bajando su mano por su espalda—¿Puedes decirme esa palabra que no quise escuchar cuando me dijiste lo que sentías por mí?

—¿Oh?

—Ya sabes, la palabra con T.

El chico sonrió débilmente entendiendo. Acercó sus labios al oído de ella susurrando tan suave que fue una caricia.

—Te amo, Shin HyeLin.

—Te amo, Shin HyeLin

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Capítulo doble por hoy

Entre Ellos Y Nosotros +18 • JJK (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora