"Vamos a mostrarles lo que somos capaces de hacer"
Jeon JungKook y Shin HyeLin huyeron a Los Ángeles con la esperanza de poder salir adelante después de que los malos se salieran con la suya. Las cosas siguen tensas en Seúl, HyeLin sigue estando en...
Burlar la cerradura de la puerta fue sencillo, tres hombres entraron a la casa encontrando mucho silencio en la misma, sabían que Yoo YoungOk estaba allí, la misión era simple, asesinar a la mujer e irse rápidamente de la escena. Los tres dejaron a la vista sus armas con un silenciador puesto para que los vecinos no escucharan nada, subieron las escaleras confiándose demasiado en la situación. El que iba primero levantó su pistola al acercarse a la puerta de la habitación, giró el pomo con cuidado sabiendo que la chica debía estar dormida en la cama. La ventana del cuarto estaba abierta dejando entrar la suave brisa, allí en la cama había un bulto cubierto por las sábanas, el que iba primero no dudó en disparar cuatro veces a la cama sin remordimiento alguno, apartó las sábanas con su mano descubriendo que el cuerpo de YoungOk no estaba, en su lugar sólo un montón de almohadas habían recibido las balas.
—¿Qué carajos...?—el tercero de ellos cayó al suelo con una bala en la cabeza. El segundo no alcanzó a disparar pues una bala se introdujo en su hombro causándole dolor, el líder que había disparado a la cama no pudo ver que del armario otra persona aparecía dándole en la nuca asesinándolo en el acto.
Todo esto en silencio gracias al silenciador en las armas.
El hombre del armario se acercó al tipo que se apoyaba de la pared sosteniéndose el hombro.
—Tu jefe no debió enviarlos—chasqueó la lengua—Vas a llevarle un mensaje de parte de Agust D, ¿Escuchaste?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El teléfono vibrando en la mesa de noche despertó al detective por la mañana, MinSoo somnoliento extendió su brazo al móvil alcanzándolo, al ver el nombre en pantalla bostezó, lo colocó en su oreja respondiendo con voz lenta:
—¿Diga?
—Necesito que me encuentres a la puta de YoungOk—JaeWang estaba furioso. Era más que evidente.
—¿Qué?—MinSoo se incorporó en la cama restregando sus ojos—Dijiste que te encargarías de ella...
—¡Consíguela y tráela antes de que acabe el día!—ordenó antes de colgar. Una sonrisa divertida se dibujó en los labios del detective, JaeWang había caído perfectamente en la trampa, sabía que intentaría asesinar a YoungOk, intentaría eliminarla para que evitara darle detalles a Agust D sobre sus trampas para quitarle algunos negocios al manipular la policía.
Entró a la opción de mensaje buscando el número de JungKook.
MinSoo: JaeWang cayó en la trampa, es posible que no le quede mucho tiempo, atento a lo que pueda avisarte por este medio.
Cuando pensaba llamar a YoungOk, tuvo un mensaje nuevo.
JungKook: HyeLin está enferma, desde anoche tiene fiebre y no puedo llevarla a un hospital.
