A la mañana siguiente África se vistió con un sujetador deportivo azul, un pantalón cargo rosa de camuflaje y deportivas blancas, había pasado toda la noche en un estado de duerme vela constante, llevaba el mismo peinado del día anterior pero con las trenzas un poco despeinadas, cogió las cosas de aseo y se dirigió al baño para continuar preparándose, al llegar estaba Robin que llevaba una sudadera crop top morada, unos pantalones grises con tiras amarillo pastel a los lados y unas deportivas blancas, se estaba peinando, al ver a África se le ilumino la cara.
- ¿Qué pasa preciosa? – Le dijo África acercándose a ella.
Sin pensárselo dos veces Robin dejó todo lo que estaba haciendo, envolvió la cara de África entre sus manos y le dio un dulce beso.
-Veo que empiezas fuerte la mañana. – Respondió África acariciándole la mejilla.
- Áfri llevo toda la noche pensando y necesito decirte lo que me pasa, yo pensaba que solo me atraían los chicos y de repente apareciste tú y ya no se nada, ni lo que me gusta ni lo que no, pero si se que siento algo por ti y no es amistad y me encantaría que tú también lo sintieses y poder empezar algo, ¿Qué me dices?
África se apartó de Robin antes de contestar.
- Ufff, verás Robin, voy a serte sincera, no eres la única persona que hay ahora mismo en mi vida romántica, si, siento algo por ti, pero también por la otra persona y no quiero comenzar nada serio con ninguno de los dos sin saber seguro si quiero hacerlo, o si esa persona me gusta más que la otra, con esto no te estoy diciendo ni si ni no, solo que no lo sé, necesito tiempo para pensar, lo que siento por los dos es muy fuerte.
Los ojos de Robin se llenaron de lágrimas, ella que esperaba un si seguro se llevo un tal vez que no se resolvería pronto, las ganas de llorar la comían por dentro pero no era el momento, las puertas del baño se abrieron y más gente entró, Robin se secó las lagrimas y cada una siguió haciendo sus cosas, pero Robin sin dejar de sentir esas ganas de huir de ese momento y olvidarlo por siempre.
Pronto volvieron a verse las caras, tras hacerse todos las pruebas covid y dar negativo bajaron a desayunar, estaban todos los amigos, Ágata y Tomas en la misma mesa que comieron el día anterior, esa mesa había sido asignada para ellos hasta que todo acabase por estar en el mismo pasillo de habitaciones, está vez África estaba sentada enfrente de Robin y está no pudo evitar mirarla sonreír cuando alguien decía algo divertido, pero cada vez que lo hacía sentía esas ganas de llorar abrazando su pecho, para Robin la mañana fue dura.
La primera clase del día era Lengua y literatura, a las 9:00 en el aula 23 con Julio, África se sentó junto a Miguel al fondo como siempre, intentó prestar atención a la clase sobre la generación del 27 pero pronto lo dejó, las palabras de Robin no dejaban de volar en su cabeza, ¿Debía decirle que sí? O ¿Debía esperar a ver si Diego continuaba cumpliendo su promesa y entonces decidirse? Miguel pronto se dio cuenta del estado de incertidumbre de su amiga, le puso una mano en el hombro y le preguntó:
- ¿Todo bien?
- Si, bueno no, no lo sé, Robin se me ha declarado está mañana y le he dicho que necesito pensármelo, le he dicho también que existe otra persona, pero no quien es, supongo que pronto se dará cuenta, es muy lista a la par que guapa. El caso es que no se que hacer, por un lado, estoy deseando decirle que sí, pero por otro está Diego, está cambiando y está cumpliendo su promesa, anoche nos pasamos horas hablando en mi habitación, no hubo sexo, no hubo besos, solo nuestras palabras y fue maravilloso.
- Te entiendo pequeña, la verdad que si Diego no hubiese echo nada te diría que le mandes a la mierda, que solo quiere destrozarte follando y luego destrozarte el corazoncito pero lo ha hecho, y lo está haciendo muy bien por lo que cuentas y es difícil, lo mejor sería que te olvides, que veas como se sigue comportando Diego y si quieres sigue jugando a dos bandas, como hasta ahora, igual así consigues decidirte cuando menos te lo esperes.
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40Tena
Teen FictionMayo 2020 la pandemia del coronavirus comienza a estar más tranquila, a esté grupo de jóvenes de entre 15-16 años les dejan/hacen volver a clase. Lo que parece una vuelta al cole normal se convierte en un encierro en el cole ya que un nuevo brote de...