- He pensado mucho en lo que me has propuesto antes y creo que sí, que no quiero que cambie nada entre nosotras, me jode que no pueda ser todo como quiero, pero si está es la manera de que nada acabe sí, sí quiero.
- Me alegro mucho y prometo que tome la decisión que tome intentaré hacerte el menor daño posible.
Las dos amigas se fundieron en un dulce beso antes de volver a correr como posesas por todo el campo de tenis. La última clase era Historia, África fue a saludar a Diego como todos los días.
- Necesito que hablemos al acabar la clase. – Le pidió Diego con los ojos llorosos y sin dejarla hablar.
- Está bien. – Contestó ella extrañada.
- ¿No me jodas que ya te ha despreciado? – Preguntó Miguel indignado cuando se sentaron en sus asientos.
- No, estaba como raro, tenía los ojos llorosos, solo quiere que hablemos al acabar la clase.
- Bueno al menos no ha vuelto a ser el gilipollas con la cara más partible del mundo de siempre.
- Tranquilo, contén tu furia y no le partas nada, que está cambiando.
- Eso espero.
- Por cierto, no te he contado que Robin ha aceptado.
- Se veía venir, está loquita por ti.
- Me da miedo hacerle daño. - Dijo África con un hilillo de voz.
- Te conozco, eres incapaz de hacerle daño a una piedra, será difícil que se lo hagas a Robin.
- Bueno, si al final le digo que no...
- Ella sabe q esto puede acabar así y se a arriesgado, ¿sufrirá si le dices que no? Sí pero tú lo harás con el mayor tacto posible y ella sabe que es un riesgo que puede correr al aceptar. - Dijo Miguel mientras rodeaba a su amiga con el brazo.
La clase fue calmada, se dedicaron a ver un documental sobre las pandemias a lo largo de la historia de la humanidad.
- Exactamente ¿por qué Rudolf ha decidido que hoy todas las clases serán sobre el covid? – Preguntó África desconcertada.
- Es verdad en educación física hemos hablado de los beneficios del deporte cuando te contagias.
- Creo que está intentando meternos miedo a todos.
- ¿Tú crees?
- Hombre, si no todo esto ¿a qué viene? Aquí algo pasa.
- ¿Y si vas luego a hablar con él?
- ¿Dirás vamos? Porque yo no pienso ir sola.
- Está bien. - Aceptó Miguel a regañadientes. - A las 17:00 es la hora de tutorías con el director, nos vemos allí a esa hora.
- Genial. – África y Miguel se chocaron los puños.
La campana de final de clase comenzó a sonar indicando que ese día las clases ya habían terminado, todos salieron del aula como si nada, ya no se veían las ganas de llegar a casa en los rostros de todos los alumnos porque ya no había una casa a la que llegar, todos estaban alicaídos, nadie corría, nadie sonreía, la tristeza podía palparse en el ambiente.
África se quedó dentro del aula con la puerta cerrada para poder hablar con Diego.
- Bueno ¿me vas a decir ya lo que pasa? – Preguntó ella enfadada, pero intentando controlar su tono.
- ¿Por qué juegas conmigo?
- ¿Qué? Yo no juego contigo, ¿a qué viene esto? – Contestó África desconcertada.
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40Tena
Teen FictionMayo 2020 la pandemia del coronavirus comienza a estar más tranquila, a esté grupo de jóvenes de entre 15-16 años les dejan/hacen volver a clase. Lo que parece una vuelta al cole normal se convierte en un encierro en el cole ya que un nuevo brote de...