Tiempo Vital

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Pasión, así comienza toda historia de amor; no puede existir amor allí dónde no haya lugar para la pasión. En vano la humanidad ha tratado de alcanzar la excelencia con estrategias orientadas a mejorar aspectos de la conducta, cambiar hábitos, corregir errores, organizar y planificar de manera productiva... cuando se obvia la esencia que produce la más alta eficiencia, esto es, evidentemente, la pasión. Es, por tal motivo, que el amor (como en todas aquellas áreas de la vida inherentes a la pasión) ha alcanzado el logro más difícil de todos: satisfacer la voluntad de querer... aunque solo sea de manera subconsciente, pues alguien enamorado encuentra en su pareja la realización de sus sueños.

Únicamente a través de la pasión se pueden alcanzar las etapas superiores de excelencia y productividad superando eso que parece imposible, bailando con la perfección y la casi omnipotencia. Al concentrarnos con pasión en algo lo convertimos en el objetivo más importante (una meta que realiza nuestros sueños y necesidades...), por lo tanto, activamos también toda nuestra motivación y damos el máximo de nosotros mismos.

​Esta historia como toda obra maestra que pretende haber alcanzado la cumbre entre todas las historias de amor inmolándose por encima de Werther, Romeo y Julieta, Orgullo y Prejuicio, Tristán e Isolda, Rojo y Negro, Madame Bovary y otras muchas más... todas estas obras mencionadas son dignas de elogios y méritos sin escatimar ninguna adulación, las cuales recomiendo sus lecturas si aún no lo hacen, pues inmenso provecho hallarán quienes deseen entrar a navegar en las mareas del romance mediante las olas que han dejado los más grandes genios de la literatura -los clásicos- que a diferencia de las petulantes novelas contemporáneas de moda olvidadas con el paso de pocos años, de las últimas, rara vez, alguna supera los 10 años y, con tramas tan predecibles, tienden a perder todo interés de novedad. La mayoría de estos textos contemporáneos con escasa exigencia intelectual deberían venir con fecha de caducidad de 10 años, el tiempo que, en general, consiguen entretener a sus lectores. De esa manera, le ahorrarían un dineral considerable a las imprentas y librerías que suelen invertir por la emoción del momento, pero jamás lográn terminar de vender las reservas que se pierden olvidadas en los depósitos cuando la moda concluye, ¡Excesivas impresiones inútiles!, además, de la explotación innecesaria de recursos naturales que contribuye al deterioro del planeta, calentamiento global y desaparición de hermosas especies en peligro de extinción ¿Extinción? ¡Esas obras de momento son las que deberían extinguirse!, en cambio, las obrás clásicas, escritas siglos atrás, jamás pierden su innovación, su riqueza, su belleza y siempre permanecen vigentes para las nuevas generaciones con el acaecer de los años. En lugar de envejecer se conservan y adaptan a los paladares más vanguardistas, terroríficos, fantásticos, amantes del romance, intelectuales en busca de saber, psicológicos, bohemios y cultos de gustos exquisitos... recordándonos que cuando el tiempo debiera causar su olvido, por el contrario, es su más grande bendición y cada instante que pasa les aumenta su valor -es, por ello, se llaman clásicos.

En suma, nuestra actual obra auto-proclamada como la más grande nunca antes escrita entre las maravillosas obras maestras de todos los tiempos, pues dejará su eco en la historia de la humanidad como solo ein große Geister de intelecto superior es capaz de prevenir. Creación producto de la bondad de un alma magnánima ofreciendo un regalo al mundo: la mejor parte de sí mismo, de las experiencias adquiridas con los años, en resumen y rimbombantes palabras de manera que las futuras generaciones se sirvan en sabiduría las décadas demoradas en escribirse. Sin esperar nada a cambio, este obsequio que el tiempo eterno será capaz de valorar, su recompensa no es otra a la felicidad generada al ser sembrador de una semilla en la rojiza tierra de la humanidad, que, con dolor y desesperación, anhela un riego de caluroso amor para lo cual el presente escrito desea convertirse en esa lluvia esparciendo vida a los robles sedientos del mañana... En concreto, nuestra creación tuvo su inicio en el camino de cuatro almas, por supuesto, llenas de pasión -como toda obra maestra surgida de la excelencia.

AMOR & RIQUEZASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora