OBSERVA LAS MARIPOSAS - BY NATH 🥀

36.

Capítulo 36.

NIALL.

Después de muchas semanas, hemos finalizado nuestro evento de la ciencia y el medio ambiente. Las recaudaciones tras las ventas superaron mis expectativas, haciéndome sentir más que feliz y satisfecho. El resto también se siente de la misma manera, ya que no sólo estamos contribuyendo con uno de los departamentos de ciencias, también tendremos excelentes evaluaciones en nuestros exámenes finales.

Ha sido un día positivo... bueno, hemos tenido algunos altos y bajos. Observo a Heather, quién ha estado muy distraída estas últimas horas. Tuvo un intercambio de palabras con Charlotte y desde entonces no la he visto sonreír.
No hemos podido hablarlo a profundidad debido a todo el ajetreo, pero ahora mientras guardamos las últimas mesas en las bodegas, me acerco a ella.

—¿Lista para marcharnos? —Pregunto, recibiendo después de tantas horas una pequeña sonrisa de su parte.

—Sí, ¿No debemos quedarnos para entregar la recaudación?

—No, lo haré mañana.

—Genial —La escucho suspirar mientras envuelvo mis brazos alrededor de su cuello. Ella solo se limita a apoyar su frente en mi pecho —Estoy muy cansada.

—Lo sé, puedo verlo. ¿Quieres ir a casa, o primero te llevo a comer?

Tarda varios segundos en responder. Y no soy ajeno al hecho de que sus brazos no están rodeándome como lo hacen siempre.

—Si me llevas a casa, no tendremos tanto tiempo para estar a solas, así que la segunda opción me parece bien.

—Buena elección —Beso su cabello —Vamos con el resto, nos están esperando.

Nos separamos e intento tomar su mano, pero Heather la esconde rápidamente dentro de su chaqueta, dejándome con la mano extendida y con el ceño fruncido mientras la observo avanzar rápidamente ¡Ah, no chiquitita!
La alcanzo en un segundo y situándome a su lado, caminamos en silencio.
Sé lo que está haciendo, no tiene que decírmelo. Y para ser sincero, me molesta que le importe demasiado lo que el resto pueda decir sobre nuestra relación.

Esta mañana se veía tan segura de sí misma, no sembramos la semilla de la duda en nadie con respecto a nuestra relación, nos mostramos abiertamente como una pareja que está en su mejor momento.
Pero apareció Charlotte y la hizo cambiar completamente, como si sus palabras tuvieran peso sobre ella, como si las miradas negativas de otras chicas lo tuvieran también.

Sé que Heather está pasando por una etapa en que no se acepta así misma, donde ve todo negativo y las malas palabras siempre tomarán la delantera ante los halagos. Porque así es como suelen percibirse. Pero aquí estoy yo, dispuesto a mejorar su manera de verse así misma. Y comenzaré en este mismo instante, así que, deslizo mi mano dentro de su propio bolsillo y tomo su mano, entrelazando nuestros dedos y sacándola de aquél escondite.
La observo cuando noto sus ojos en mí.

—No dejaré que lo hagas —Le hago saber.

—¿Hacer qué?

—Tú sabes qué, Heather.

No me responde, y tampoco intenta alejarse de mí mientras continuamos avanzando. Cuando entramos en el salón, todos están reunidos aquí, nadie nos presta atención, como debería ser.
Nos situamos al final del pasillo, donde unas cuantas sillas están disponibles. Arlene y Charlie están acurrucados no tan lejos, al vernos, nos observan sabiendo que algo ocurrió. Definitivamente nuestros rostros hablan por sí nosotros.

—¿Qué se supone que no debería hacer? —Insiste, apenas en un murmullo, ya que nuestros profesores están dándonos sus eternas felicitaciones por esta labor.