- ¿Como te sientes? - Pregunta entusiasmado.
- Agobiada - Digo seca.
- Vamos Fer! Hoy es tu día, disfrútalo - Me anima.
- Es imposible Max, hoy todo tiene que ser perfecto y demasiadas cosas pueden salir mal.
- Todo va a esta bien - Me tranquiliza.
- Prométeme que te quedaras conmigo - Digo en pánico.
- Te lo prometo - Dice divertido.
- Gracias.
- Ahora vamos que ya hay gente afuera.
Salimos del baño en el que me había ocultado y tomo su brazo para recibir a los invitados. El lugar era un salón que solemos utilizar para distintos fines, desde exposiciones de proyectos hasta este tipo de fiestas, aunque no era demasiado grande si cabía bastante gente y eso me agobiaba de sobremanera. Personas que no recordaba se me acercaban a saludarme con familiaridad y tomarse algunas fotos, era incómodo, otros cuantos eran presentados por mi padre que me decía sus nombres pero los olvidaba al minuto siguiente. Max me hacia el proceso más sencillo, pues el es más sociable y sabe tratar con gente de todo tipo. Esta situación me estaba alterando, en un momento me alejé de Max y fui hasta la barra para pedir un trago el cual bebi en dos segundos esperando que me ayude a sobrellevar la situación.
Mientras platicaba con una pareja (Y por platica me refiero a escuchar a Max hablar con ellos) revisaba constantemente la puerta del elevador, toda la noche había estado atenta a la llegada de una sola persona, Alejandra, después de la discusión que tuvimos ayer no volvió a la oficina y cuando le envié el mensaje no obtuve respuesta, así que no estaba segura si vendría. En uno de mis tantos vistazos divisé como la puerta de abría, ahí estaba, una bella mujer que hoy vestía un elegante pantalón de vestir negro, un top blanco y un saco negro, su maquillaje era discreto, hacia resaltar sus ojos y su cabello caía suavemente sobre sus hombros. Menos mal Max sostenía mi brazo, esa mujer me estaba robando mi estabilidad y autocontrol.- ¿No es verdad Fer? - Escuchó a Max preguntar.
- ¿Como? - Digo volviendo a mi realidad perdiendo de vista los bellos ojos verdes.
- Les decía que desde niños nos apasionó la arquitecta - Dice Max intentando que participe en la conversación.
- Ah si, Veíamos los planos de mi padre sobre su escritorio y era fascinante, aunque no entendíamos nada - Digo simpática provocando unas ligeras risas en nuestros acompañantes.
- Buenas noches - Escuchó detrás de mi haciendo que todos volteen.
- Ale! Llegaste - Max me suelta para saludarla con un abrazo.
- Hola Max - Le regresa el saludo con una sonrisa.
- Te ves muy bien - Dice mirándola de arriba a abajo.
¿Le estaba coqueteando o solo era un cumplido?
- Gracias, tu también te ves muy guapo - Lo elogia.
- Muchas gra...
- Max - La voz de mi padre lo interrumpe - Ven un momento.
- Enseguida vuelvo - Dice antes de dejarnos a solas.
- Díaz, me alegra que haya podido venir - Digo sin saber que más hacer.
Mi mente se debatía entre mirarla o no, hoy lucia algo... Peligrosa y eso no era bueno.
- Era imposible que me lo perdiera. Muchas felicidades, se lo merece - Dice con una sonrisa.
¿Por qué tienes que ser tan linda siempre?
![](https://img.wattpad.com/cover/346783813-288-k418441.jpg)
ESTÁS LEYENDO
SABOR A MI
Lãng mạnAle solo buscaba un trabajo para saldar sus deudas y poder ayudar a su madre. Fer solo buscaba un arquitecto innovador que la ayudara a obtener la presidencia de la empresa. Y sin saberlo ambas se encontraron.