Apenas era mi cuarta semana trabajando y sentía que habían pasado meses, la semana pasada había hablado con mi cliente y había aceptado el proyecto, tanto la arquitecta como yo teníamos menos trabajo y podíamos descansar más.
Ahora estaba en el estacionamiento esperando a la arquitecta con dos cafés en la mano, uno para ella y uno para mi. Una jeep negra con vidrios polarizados se detiene frente a mi, de ella baja una mujer con lentes oscuros, pantalón de mezclilla, botas de trabajo y camisa blanca.- Buenos días - Saluda cuando llega frente a mi.
- Buenos días arqui ¿Como amaneció? - Pregunto amable entregándole su café.
- Bien, gracias ¿Nos vamos?
- Claro.
Me acerco para abrir la puerta de asiento del copiloto pero una mano se me adelanta a abrir.
- Suba - Dice al ver que no me muevo.
-...Si - Subo al auto y miro como la arquitecta lo rodea hasta llegar a su asiento.
Después de unos minutos de camino la voz de la arquitecta interrumpe el silencio.
- ¿Como le fue con el cliente?
- Muy bien - Digo alegre mientras volteo a verla - Le encanto el proyecto y se supone que ya terminaron la demolición e iba a iniciar la construcción.
La arquitecta se ve imponente desde cualquier faceta, ahora que la miro manejar esa gran camioneta, con lentes oscuros y su ropa de trabajo reitero que es una mujer digna de admirar y muy guapa, se ve muy bien.
- Le dije que lo haría bien ¿Por qué duda tanto de sus capacidades?
- No lo se.... Tal vez es por la falta de experiencia - Ladeo un poco la cabeza pensando.
- Pues entonces me encargaré de que se le quite esa falta de experiencia - Afirma.
Vuelvo a mirar por la ventana y me doy cuenta de que ya llegamos, comienzo a ver los avances que hay y la emoción se apodera de mi.
- Déjame estacionar - Dice con tono algo divertido, eso es nuevo.
- ¿Por qué lo dice? - Pregunto confundida.
- Parecía que iba a saltar de la camioneta en cuánto vio a los trabajadores - Vuelve a su tono monótono - Listo, puede....
No dejo que termine la frase cuando ya salí del auto, comienzo a acercarme y puedo ver las calles ya pavimentadas y los cimientos de algunas casas, me detengo justo en el inicio de la construcción para admirar el paisaje que hace una semana estaba lleno de hierva y tierra. Cuando estoy a punto de volver a caminar una mano me detiene tomando mi brazo.
- Su casco Díaz - Me regaña mientras quedó frente a frente con ella.
La repentina cercania con la arquitecta me tomo por sorpresa, pero lo que más me sorprendió fue lo que hizo a continuación, acomodo el casco que tenía entre sus manos sobre mi cabeza con mucha delicadeza, se acercó un poco más agachado su cabeza hacia el lado izquierdo de la mía comenzando a ajustar el casco, debido a su cercanía me llego un olor floral de su perfume, era muy agradable y suave.
- Listo, ya puede continuar.
Mi mente sale del shock y recuerda donde estaba.
- Gracias - Digo con una sonrisa.
Comienzo a caminar y siento la presencia de la arquitecta detrás de mi, a diferencia de la vez anterior que vine hoy no siento la mirada de ningún trabajador, todo están en sus asuntos.
- Don Roberto - La arquitecta lo llama con voz firme.
Veo como aquel hombre sale de una de las excavaciones y se acerca a nosotras.
![](https://img.wattpad.com/cover/346783813-288-k418441.jpg)
ESTÁS LEYENDO
SABOR A MI
RomanceAle solo buscaba un trabajo para saldar sus deudas y poder ayudar a su madre. Fer solo buscaba un arquitecto innovador que la ayudara a obtener la presidencia de la empresa. Y sin saberlo ambas se encontraron.