MALDICIÓN II ✔️

C: 208 - HOY SERÁ EL PRINCIPIO

Narra William:

-Quizá la mayoría coincida en que el sentimiento de creer que sería un increíble día es verdad. Me sentía así cuando desperté esta mañana.

Todo era increíble. Había pasado las mejores semanas junto a mi nueva e increíble novia, y hoy creí que sería así.

Todo había iniciado bien, tomé una ducha, me puse un pantalón y camisa negra. Parecía que empezaba a ser costumbre en mi sentido de moda ese tipo de vestuarios. Me sentía realmente en paz. Por primera vez en años me sentía completo.

Había desayunado con mis amigos, Draco, Terence, Pansy, Blaise... incluso mi hermano, los pelirrojos y Hermione estaban conmigo. Todos estábamos demasiado en paz, todos estábamos bien.

Pero después del desayuno, todo cambio-

Harry: Debo irme, ayudaré al profesor Dumbledore en algo importante. -dijo mirando a sus amigos-

Ron: ¿A qué hora volverás?

Harry: No lo sé, Ron.

Hermione: Te cuidado, ¿si? -lo miró preocupada-

Harry: Descuida, Hermione.

William: Si, come librros. Mi herrmano es fuerrte y poderroso. -sonreí pasando mi brazo por los hombros de mi mellizo- Serrá miope y torrpe, perro es mi familia después de todo. Somos incrreíbles.

Harry: ¿Gracias?

-Hermione y Ginny rieron después de ver la confusión de Harry en mis palabras, pero aún así todos nos despedimos de mi hermano, quien de alguna rara manera tenía que salir de Hogwarts e ir con el viejo del profesor Dumbledore.

Después de eso Ginny se fue a buscar a Luna y a Longbottom, mientras que Ron nos sorprendió al dirigirse junto a Malfoy. Si, tuve que limpiar mis gafas tres veces para verificar que no estaba viendo mal-

Hermione: Bueno, ahora que estamos solos... ¿Te parece ir a tu sala común y después a... ya sabes... tu habitación. -sonrió acercándose a mi-

William: Eso me parrece la mejorr idea del mundo, Grrangerr. -sonreí-

-Le di un beso en la frente a la castaña y después de agarrar su mano, nos dirigimos de forma romántica hasta las mazmorras.

La mayoría ya se había percatado de que Hermione Granger y yo, William Snape... o Potter, habíamos iniciado una relación. Todos se sorprendieron cuando se enteraron, y ni hablar de la primera vez que nos vieron besándonos.

Fue agobiante empujar a todos los que me llegaban a preguntar sobre mi relación por las escaleras. Jamás creí que eso me iba a cansar.

Y mi papá, el fue el que más confusión me dio, primero festejo diciendo que al fin un Snape se había quedado con la chica, pero después me regaño diciendo que pasara lo que pasara no la tratara mal ni le dijera la palabra con S... si, sangre sucia.

Aún así me gusto que papá aceptará de buena forma a Hermione, todo había ido tan bien.

Y cuando mi novia y yo llegamos a mi habitación, por Salazar, por primera vez pude conocer lo que la pubertad había hecho que cambiará en mi.

Hermione había despertado ese gran instinto apenas llegamos a mi cama y nos encerró con seguro y hechizos en las cuatro paredes donde pasaba mis noches-

William: Crreí que íbamos a estudiarr. -susurré divertido-

Hermione: Podemos estudiar si quieres. -sonrió emocionada-