¡Toma La Responsabilidad!

Capitulo 22

Ahora sí que estaba arrepentido, sabía que guardar tal folder no era bueno, no solo Susan lo había hurtado para ver, si no también uno de los científicos nerd.

Y la regañadiza que se llevó fue bastante fatal que no espero que le dieran con los papeles en la cabeza, acto seguido le mencionaron a Paul que se encargaría de traer aquella persona al laboratorio.

¡Genial!, ¿Que más podía pedir? Ahora sí que necesitaba la ayuda de Patryck, solo esperaba no molestarlo en su trabajo.

¡Y si! Técnicamente lo hizo, ya que actualmente no está en la oficina...

Estaba con una furgoneta de color azul marino muy oscuro frente a la casa de Tord y sus amigos.

Y Patryck se hallaba con el...

-¿No podemos tan solo visitarlo y hablarle?
-¿Para que?, ¡Sabemos cómo va a reaccionar! -El de coleta baja negó con la cabeza.
-¿Vas a secuestrar a tu amigo?, ¿Quien dió la cara por ti bastantes veces?

Ok eso hizo sentir mal al de cejas pobladas, suspiro nervioso.

-Estoy algo estresado, me regañaron en el trabajo, literalmente me golpearon en la cabeza con los papeles.
-Debiste ocultarlo mejor, ahora sí que estamos en un lío.

Paul torció la boca, no quería hacer esto para nada, pero también tenía miedo de la actitud de su amigo el cuernudo.

Es cierto que ahora tenía una panza, pero quién sabe y era inesperado que cogiera un arma y...

-Disculpen, ¿Puedo ayudarlos? -Un acento gallego sobresalto, haciendo que el dúo diera un salto de miedo.
-¡A-Ah! -Patryck estaba intentando articular algo.- ¡Estamos buscando a Tord Larksson!

El de cejas pobladas miro mal al de mechones, vale, ahora sí estaba arruinado el plan.

-¿El de rojito? Se fue desde esta mañana en auto junto con su amigo ese el de azul.
-¡Ni si quiera estaba en la casa! -Pat regaño a Paul, quien se sentía pequeño.
-E-Esta bien, podemos esperar.
-¿Si? Aunque también si quieren hablan con su amigo insoportable, Edd.

Eduardo señaló con la mirada la casa, el dúo de adultos se miro, curiosos.

-¿Sera que...?

El doctor chequeaba con sorpresa al noruego, se vio bastante sorprendido al notar que su paciente llevaba el vientre más hinchado que de costumbre.

Parecía que estaba llegando a la verdadera panza de una embarazada, ya incluso su sudadera parecía hacer un poco de presión en su estómago.

-Esto es... impresionante. -Murmuro mientras miraba las fotos de la reciente radiografía, el cuernudo permanecia echado en la camilla mientras bostezaba de a poco.

Tom por otro lado se encontraba jugando con sus propios dedos.

-¿Y bien...?
-Su ciclo de gestación está bastante animado, quiero decir, ¿Que es esto? Me sorprende lo que puede hacer está anomalia.

El adulto de pelo canoso se mantenía pensativo ante la fotografía.

-¿Bastante animado? -Tom cabeceo.
-Es probable que muy pronto pueda llegar a tener al bebé.

Oh vaya, eso lo corto, Thomas se quedó bastante quieto al oír eso.

¿Las responsabilidades serían más duras ahora?

Después de la incomoda sesión con el doctor, Tom se encargaba de mirar con preocupación al noruego quien analizaba la foto de la radiografía con detalle.

En esta se ponía casi la forma completa de un pequeño bebe, así que lo que se encontraba ahora mismo ahí era un feto bastante desarrollado.

Sería mentira si no dijera que le daba miedo.

-Asi que pronto... seremos padres. -Tord murmuro nuevamente, la noticia de su embarazo lo tenía dando vuelta.
-Eso era obvio, pero, ¿Que te preocupa?
-La verdad yo tampoco lo sé. -Pauso mirando levemente por la ventana del auto.- Creo que ya nos hemos acostumbrado al tema.

El cuernudo mordía el interior de sus labios, buscaba decir alguna cosa.

-Tom, quiero que sepas que...

Tin-tin tin.

Ah vaya ahora el era el interrumpido, Tom se giró con pleno susto a su lado del auto, mayor fue su susto al presenciar a quien menos quería ver está mañana golpeando el vidrio del asiento piloto.

No después de la reflexión que había tenido en la noche sobre el tema de Susan.

-¡Tom!, ¡Que casualidad verte aquí! -Y ahí nuevamente estaba, la fémina de pelo corto. El nombrado titubeó antes de tirar alguna palabra.- ¿Puedes bajar el vidrio?

Ahora sí que estaba en un aprieto, echo mirada a su lado, buscando... ¿Alguna respuesta del noruego?, ¡Y justo era quien menos conocía del tema!

-¿Que...? -Tord alzó una de sus cejas, mirándolo con confusión.- Uh, ¿Supongo bajala...?

Más líos aún.

-¡Ah!, Vi que salias del hospital así que me acerque a hablarte un momento, estoy de camino al trabajo. -Susan sonrió tranquilamente mientras miraba al de sudadera azul quien mantenía forzosa la expresión de tranquilidad.

No era más que un tieso cuerpo de los nervios.

-¿Vienes solo?
-N-No... vine con Tord. -La de ojos zafiro asintió con rostro confundido, no había notado al noruego hasta echar vista detrás de Thomas.
-¡Tord!, ¿Me recuerdas?, ¡Estábamos en la secundaria juntos! -Ladeo la mano, buscando que el cuernudo le saludara.

Pero este solo entrecerro uno de sus ojos, ah vaya, por fin pudo deducir quien era.

No estaba tan de humor para fingir agradable emoción.

-Uh, ¿Si?, supongo. -Desvio la mirada.
-¿Como se encuentra tu embarazo? -Las palabras repentinas hicieron un "click" en ambos chicos, ahora abriendo sus ojos de la sorpresa.

Aunque Tord tuvo una sobrereaccion al marearse un poco.

-¡¿Susan?! -La nombrada cambio su sonrisa por una línea recta por el grito de Tom.- ¡¿Cómo demonios sabes eso?!

La cago.

Soltó el agarre de sus manos en la ventana, abriendo los párpados y dando la impresión de que sus pupilas se habían achicado del miedo.

-¡Ja, ja ja,!, ¡Ah miren la hora, si no me presento allá me despedirán, nos vemooos!
-¡Espérate, Susan! -Tom le gritó a la distancia, descubriendo la mitad de su cuerpo por la ventana.

Pero la joven adulta ya estaba bastante lejos.

-¿Tord?, ¿Estás bien? -Noto que el noruego hipeaba en su mano, ya que está misma la tenía en su boca y la otra arriba de su vientre.

Ese fue el susto de su vida, así que técnicamente lo había afectado.

-A casa... -Murmuro entre su mano, el británico sin esperar echo a marchar agresivamente aquel vehículo.

Y eso solo fue la punta del día.