Capitulo 37

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Mi madre tuvo que coger a Deysi en brazos porque no paraba de lamer a Bruno. Ella también estaba muy contenta de que hubiera vuelto.
Cuando íbamos a ir dentro de casa la tierra empezó a temblar de nuevo. Mi madre y yo nos miramos asombradas.
Cogí a Bruno y nos quedamos en el jardín esperando a que parara lo antes posible.
- ¿Ya? - pregunté.
- Parece que sí. Esta vez ha sido más leve que antes. - dijo mi madre.
- Por desgracia va a haber más y serán peores que los de hoy. - explicaba Bruno.
- No nos digas eso. Tenemos que ponernos manos a la obra para evitar que eso pase. ¿Subimos ya a mi habitación? - les dije.
- Mejor esperemos aquí en el jardín. Verdad Bruno?
- Sí. Es lo más seguro.
Nos fuimos a sentar y a mi madre le llamaron por teléfono. Era mi papá que preguntaba como estábamos y que iba a ir a recoger a mi hermano antes de venir a casa.
- Has crecido mucho, Lucía. Estás muy guapa.
- Gracias Brunito.
- ¿Y ya vas al Instituto? ¿No?
- Sí.
- ¿Y cómo va por allí?
- Bien. Estoy con Ibet en la clase y he hecho más amigos. La semana pasada también vino un compañero nuevo y ahora sale con nosotros. Se llama Jonh.
- Muy bien. Me alegro que te esté yendo bien. Yo he conocido a una gnomo que no se ha podido resistir a mis encantos.
- Jajaja... ¿que dices?
- Es normal. Con esta carita y este tipin... - relataba mientras levantaba una ceja.
- Que guasón eres. ¿Y cómo se llama la afortunada?
- Rosa.
- Pobre Rosa tener que aguantarte cada día.- dije en tono irónico.
- Ella no dice lo mismo.
Los dos pegamos unas carcajadas. Estábamos tan felices de vernos y compartir esas conversaciones que tanto había echado de menos, que me puse sentimental.
- Me alegro por ti. Te mereces lo mejor.
- Lo sé....es broma. Tu también. Eres especial. Por eso el anillo te ha elegido a ti.
- Y cómo vamos a hacer para encontrar el otro.
- Lo encontraremos. Nora nos va a ayudar. Mientras tanto, iremos buscando las plantas que me pidió.
- De acuerdo. Yo te ayudo. El otro día pedí en la biblioteca un libro de plantas, porque el libro que nos dejó la señora Greta, habla de muchas de ellas que no conocemos.
- Luego me enseñas el libro.
- Sí. Lo tengo en mi habitación. ¿Y para que necesitas encontrar esas plantas?
- Me las ha pedido Nora, junto con los anillos y las personas elegidas por ellos. Cuando estés con ella lo entenderás. La madre naturaleza es sábía y creó el planeta sabiendo que la humanidad podía destruirlo, así que también tuvo que crear unas "plantas madre" y dos anillos que representan el frío y el calor. Ella nos dirá qué hacer en su debido momento.
- ¿Esas plantas son las que tenemos que encontrar?
- Eres lista Lucía.
- Lo sé... - dije levantando la ceja como Bruno.

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