En cada universo. | BaiLian/JunLian| - 26

Su Alteza y el Emperador van a casarse. Escapando a Dinamarca.

Su aventura en el viejo oeste terminó bastante bien, aunque es en la que más sufrió las consecuencias de jugar a ser dios, ya no está muy seguro de querer seguir interviniendo; sin embargo, su pasada intervención acaba de anular su propio futuro, ese donde murió de cáncer debido a su adicción a la bebida. Esto compensa en cierta manera sus errores y se siente motivado a seguir adelante.

—En esta vida ellos tienen un accidente la noche donde toman el vuelo hacia Holanda. En ese caso sólo debo advertirle a mi otro yo que lleguen temprano al aeropuerto, o que compren un boleto para otra hora u otra fecha. Pero...hay otro problema...— aprieta a Zhu Xin con enojo.

Sí, el otro problema es su madre, quien le arrebata su dinero para huir con su amante. Desde esa dimensión gris y solitaria, Bai WuXiang persuade a su yo adolescente para que no caiga en los engaños de la mujer.

Jun Wu todavía era un poco inocente y abandonó la escuela para trabajar. No es tan malo, Bai WuXiang todavía lo ayuda mostrándole en sueños a las personas correctas a las que debe acercarse, los lugares a los que debe presentarse, incluso le da la hora.

A Jun Wu le iba bastante bien con su anticipada carrera de modelaje y su trabajo como conductor de un programa de televisión; sin embargo, no dejaba de tener esos sueños respecto al engaño de su madre, en ellos ella le mentía con el cuento de su mano rota y se daba lujos con su trabajo. Él no lo creía, hasta que su madre empezó a exigirle sumas mayores de dinero sin justificar para qué lo necesitaba y porque siempre que hablaban era sobre dinero, esto lo obligó a mandarle un monto fijo, aunque menor. La estocada final se dio una mañana en una estación de buses, conoció a Xie Lian.

—Si continúo manteniendo a mi madre jamás podré vivir mi propia vida.

Jun Wu dejó de mandarle dinero y se entregó por completo a este joven. Su propuesta matrimonial fue prematura, en menos de tres meses, siendo otra diferencia en su relación respecto a lo que Bai WuXiang vio. Xie Lian se desmayó primero y aceptó la propuesta después, aunque la propuesta no tuvo ningún anillo; de todos modos le dejó claro a Jun Wu que quería llegar virgen al matrimonio. Para Jun Wu no cambió en absoluto su deseo de casarse, había encontrado al amor de su vida, no podía estar equivocado, debía ser él y quería estar a su lado.

En consecuencia, su madre le llamó incontables veces para rogarle por dinero sin decir directamente que necesitaba dinero. Su hijo lo lamentó mucho al mismo tiempo que abría los ojos, su madre ya no era la misma, lo único que quería de él era su dinero.

...

Bai WuXiang ya cumplió con la primera parte del plan, ahora sigue el accidente. Es muy específico en la fecha y hora del accidente. Jun Wu soñó repetidas veces con ese fatídico accidente y su estadía en el hospital, dado que llevaba noches repitiéndose...

—No puede ser casualidad— pensaba a mitad de la noche.

Especialmente porque la premonición de su madre no fue del todo errónea, esto debía advertirle sobre algo.

A la mañana siguiente lo habló con Xie Lian a través de una llamada telefónica.

—De acuerdo, si tú lo dices así debe ser— contestó Xie Lian—. Puedo esperar un día más, una semana o un mes, siempre te esperaré.

... ... ...

Jun Wu se preparaba para salir, le gustaba estar unas horas antes para familiarizarse con los alrededores y su gente. En ese momento recibió una visita. Bai WuXiang, desde el más allá, siente su estómago revolverse al ver a esta visita, es su madre.

Jun Wu tampoco estaba muy contento, hace bastante había cortado lazos con ella y todo por...

—Tengo que ir a trabajar— argumentó el hombre.