The King Weakness - KookV

Capítulo 25

Jeon Tae-hyung tenía una razón para hacer lo que hizo: hacerle saber el lugar al que pertenece Lee Ji-eun.

Aquello lo decidió luego de visitarla, y es que cuando fue a verla con la intención de invitarla a tomar el té juntos no pudo evitar detener a Jin-ri cuando estuvo a punto de golpear la puerta. La risa de Ji-eun le instigó a que se quedará un poco más y las palabras después de ese sonido le saco una irónica sonrisa. 

«Majestad me trata como su esposa».

«Es muy amable conmigo, incluso más que con su alteza»

«Si se divorcia me escogerá como su consorte»

«Reina consorte Jeon Ji-eun»

Taehyung con un simple movimiento de mano dió la indicación de irse, de forma inmediata empezó a hacer su camino de vuelta a su habitación con su servidumbre siguiéndolo por detrás. De varios lugares a los que podría ir decidió volver a su habitación, pudo salir y dar un paseo pero prefirió regresar al lugar que consideró su prisión sólo para empezar a idear un plan.

Después de haber llevado a su esposo al refugio de niños abandonados y que este tuviera una remota charla con los encargados del lugar le pidió volver al palacio para un cambio de ropa a algo más cómodo, sabiendo que su esposo tardaría en escoger que ponerse  hablo con Hueningkai. Luego llevó a Jungkook a los campos de durazno, donde tenía preparada una pequeña manta bajo un árbol y duraznos en una canasta. Los ojos de Jungkook se iluminaron y como si él hubiera preparado la sorpresa tomó su mano y lo guío para que se sentará en el lugar con más sombra.

Hablaron por un rato de momentos divertidos que tuvieron juntos mientras comían duraznos, recordando entre risas diferentes puntos de vista de anécdotas que vivieron juntos. Aquello no duró tanto ya que desde la distancia Taehyung pudo ver cómo Ji-eun se acercaba de forma alegre.

Fue entonces que puso en marcha su plan.

Por primera vez se había atrevido a pedirle un beso a Jungkook, el alfa sorprendido no se negó y así fue como unos besos cortos se transformaron en un beso realmente intenso, aquello Taehyung no lo había planeado del todo y es que el sabor de los duraznos se habían impregnado tanto en los labios de su alfa que no pudo evitar ponerse sensible en poco tiempo y sin haberlo premeditado se encontró a horcajadas sobre su esposo.

Se separó un poco para recuperar el aliento y aprovecho para ver el rostro de Jungkook, no sabría cómo describirlo de forma exacta y es que el alfa se veía malditamente hermoso  con la luz del atardecer acunando su rostro. Lo volvió a besar. 

No pasó mucho cuando sintió como las manos del alfa quitaban los primero botones de su vestido y sabiendo lo que pasaría, el alfa empezó a deslizar un poco de este mismo para dejar al descubierto su hombro. Jungkook beso su cuello y su hombro, Taehyung se dejó hacer y estaba a punto de mandar al diablo su plan cuando se dió cuenta de la presencia de Ji-eun detrás de un árbol. 

Sonrió satisfecho.

Una de sus manos se dirigió hacia la cabellera de Jungkook y sin importarle arrugar su manga tomó un poco de las hebras azabache del alfa y tiró de ellas para hacer su pregunta.

«Que es Ji-eun para ti»

Taehyung preguntó aquello y luego miró a la omega que se asomó detrás del árbol. Taehyung pudo notar lo cegado que estaba Jungkook por el placer, lo estaba al punto de que no pudo confundirse con su pregunta y si no fuera por el segundo tirón de su cabello y la repetición de la pregunta jamás hubiera respondido.

«Es un juguete»

Entonces sonrió complacido, no necesito levantar la mirada para saber que Ji-eun había decidido irse pero hubiera deseado que fuera un poco más silenciosa, ya que cuando se iba piso una rama que causó que Jungkook mirara hacia otro lado y de no ser por su rápido actuar para hacer que lo mirara de vuelta estaba seguro de que hubiera sido descubierto. Cuando Ji-eun se fue y Taehyung volvió a tener la atención de Jungkook en una milésima de segundo con sus palabras, no dudó en terminar lo que había empezado.