Miss London & The American Boy. | Logan Sargeant.

Treinta y dos.

Catherine miró la caja y luego a Logan, y por un momento, su corazón dio un vuelco. ¿Será que Logan estaba a punto de pedirle matrimonio?

Logan notó la expresión en el rostro de Catherine y rió suavemente.

— No te emociones demasiado, aún no es eso. Pero es algo especial.

Ella se rió, no sabía como él la había logrado entender tan rápido sin decir ni una sola palabra. Logan abrió la caja revelando un pequeño collar con un colgante en forma de corazón.

— Es para ti. Quiero que lo lleves como un recordatorio de mi amor por ti. Cada vez que lo veas, recuerda que estoy aquí para ti, en cada paso de nuestro viaje juntos.

Cuando Catherine se dio cuenta de lo que pasaba ella no pudo evitar sentirse sorprendida y realmente apreciada por el regalo que Logan tenía hacía ella, nunca nadie se había preocupado de la forma en que Logan lo hacía por ella.

— Es hermoso, Logan. No puedo esperar para llevarlo.

Logan la interrumpió tomando el collar entre sus dedos, listo para colocarlo a el cuello de Catherine.

— Pero también con este collar.. quiero pedirte que seas mí novia, Cath.

Cuando escucho sus palabras se quedó callada, paralizada y atónita, ¿había escuchado bien? ¿Logan estaba pidiéndole ser su novia? 

 — Quisiera que fuera más que un regalo, quisiera que lo llevaras como mi novia. ¿Aceptarías ser mi novia, Catherine?

Un silencio tenso llenó el aire. Catherine miró fijamente el collar, y por un momento, Logan temió haber malinterpretado las señales. Un nudo se formó en su estómago mientras esperaba la respuesta de Catherine, estaba tan nervioso, ni siquiera estaba así en las carreras. Catherine era mucho más que eso para él.

Finalmente, ella levantó la mirada, y sus ojos se encontraron con los de Logan. Una sonrisa radiante y llena de brillo se formó en sus labios.

— Sí, Logan, con todo mi corazón. — dijo ella, rompiendo el silencio con un tono lleno de emoción y felicidad.

Logan exhaló aliviado y feliz, y procedió a colocar el collar suavemente alrededor del cuello de Catherine. En ese momento, todo lo demás desapareció, sólo existían ellos dos y el amor que existía entre ambos jóvenes, el sol se despedía en el bello cielo que los iluminaba, y su historia de amor aún continuaba, su amor no sería pasajero. 

(...)

La cita entre ambos había terminado, aún era difícil de procesar la noticia, pero en un tiempo se acostumbrarían. Para Catherine era difícil ver a Logan como su novio, se pellizcó varias veces, se pregunto si era real o si era una mentira que sólo duraría algún tiempo antes de que se terminará yendo como los demás. 

Llegaron de nuevo a casa de los padres de Logan, querían gritarle a todo el mundo la noticia, primero serían sus padres y después, Alex y Lily, aún que Cath no lo sabía pero ellos siempre habían estado detrás de toda la sorpresa.

Entraron a la casa, no había nadie, pero en el jardín se escuchaban risas y la voz de Kathy charlando con Emily. Dejaron sus cosas en la sala y fueron de enseguida con ellos, no aguantaban más la emoción de contarles la gran noticia.

— ¡Tenemos algo emocionante que contarles! — exclamó Logan, tomando la mano de Catherine. Fue lo primero que dijo Logan al estar en el jardín con Cath y su familia.

Kathy levantó la mirada un tanto curiosa, mientras Richard dejaba de leer su libro y los miraba con atención, se preocupó algunos instantes.

— ¿Qué pasa, chicos? — preguntó Kathy, con una sonrisa.— ¿Está todo bien?

Logan miró a Catherine con amor antes de revelar la noticia, Catherine apretó su mano y le sonrió, estaban por el camino correcto.

— Catherine y yo hemos decidido oficializar nuestra relación. Somos novios. — anunció con alegría.

La noticia iluminó los rostros de Kathy y Richard, quienes se levantaron emocionados para abrazar a la feliz pareja. No podían reaccionar mal cuando se trataba de ver a su hijo feliz y ahora a su nuera, quién les daría un nieto.

— ¡Felicidades, chicos! — exclamó Kathy, emocionada. — Esto es maravilloso, ya sabía que ustedes serían novios. 

Richard también expresó sus felicitaciones, poniéndose de pie de su asiento para abrazar a su hijo y seguido a Catherine.

— ¿Cómo se sienten? — preguntó Emily detrás de ellos, se dirigió también para abrazarlos.

Catherine y Logan se miraron entre sí, tenían sonrisas gigantes en su rostro y una felicidad que era contagiable. 

— Felices y emocionados. — respondió Catherine, mientras Logan asentía con una sonrisa.

— ¡Es genial tenerte oficialmente como parte de la familia, Cath! — comentó Richard.

— Estamos muy contentos por ustedes, de verdad. — agregó Kathy.

Continuaron charlando, Kathy con curiosidad le preguntó a Catherine como había sido la propuesta, ella contó todo a detalle sin omitir ni una sola palabra. 

Por primera vez, Catherine era feliz y no por aparentar, realmente había encontrado una buena familia y era querida por alguien, por Logan.

(...)

Habían tenido una cena totalmente agradable, pero aún faltaba algo más. Mientras Logan charlaba por teléfono con Alex y le contaba como se habían dado las cosas, Catherine trató de buscar un lugar más privado para hablar con Madelaine, pues su mejor amiga merecía saber lo que estaba pasando en su vida.

—¡Hola, Maddy! ¿Cómo estás? —saludó Catherine con alegría.

—¡Hey, Cathy! Estoy bien, ¿y tú? ¿Cómo va todo por allá? —respondió Madelaine.

Catherine sonrió, incapaz de ocultar la felicidad en su voz.

—Estoy genial, Maddy. No sabes lo que me sucedió con Logan.

—Te escuchas emocionada, ¿qué paso?  —preguntó Madelaine.

—Bueno, la noticia es que... ¡somos novios! Logan y yo estamos saliendo oficialmente —exclamó Catherine emocionada.

Hubo un breve silencio al otro lado de la línea. Catherine podía imaginar la expresión de sorpresa en el rostro de Madelaine.

Sin embargo, había algo más que Catherine no podía notar. Madelaine apretó la mandíbula, se contuvo y trató de tomar aire, tranquilizarse.

—¡¿En serio?! ¡Eso es increíble, Cathy! Estoy tan feliz por ti. Cuéntame todo, necesito detalles —dijo Madelaine, tratando de ocultar cualquier rastro de envidia en su voz.

Catherine comenzó a contarle la historia de cómo Logan le había dado el collar como regalo y cómo había acabado pidiéndole que fuera su novia. Madelaine la escuchaba atentamente, pero algo en el tono de voz de Madelaine la desconcertaba, Catherine no sabía que pasaba.

—Wow, eso suena mágico, Cathy. Estoy realmente feliz por ti —comentó Madelaine, tratando de sonar genuina.

— Mad, ¿estás bien? — Cuestionó Catherine.

— Oh, sí, Cath.. Sólo estoy cansada, ¿podemos hablar más adelante? Otro día. 

Catherine respondió afirmativamente, colgaron la llamada y siguieron su curso. Pero Madelaine no podía sacarse eso de la cabeza, algo se desató dentro suyo.