Treinta y ocho.

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Logan entró rápidamente y preocupado al hospital, sus pasos resonando en el pasillo mientras corría hacia la sala de espera donde Kika lo esperaba, a su lado estaban Madelaine Alison y Lily, mostraban preocupación y al parecer, Kika había estado pidiendo informes cada minuto acerca del estado de Catherine.

Logan estaba desesperado, preocupado, temía que la vida de su hijo y de su novia corriera riesgo, no quería imaginarse una vida sin ellos.

—Kika, ¿dónde está Catherine? ¿Cómo está?

Kika se levantó rápidamente y lo miró con ojos preocupados. El miedo se apoderó de él cuando le respondió.

—Logan, Catherine está en la sala de emergencias. Tuvo un accidente en la tienda, perdió el conocimiento. Los médicos están haciendo todo lo posible por estabilizarla.

El corazón de Logan latía con fuerza, y la preocupación se reflejaba en sus ojos. Sin perder tiempo, se dirigió hacia la sala de emergencias, su mente estaba llena de pensamientos angustiosos.

Al llegar, vio a Catherine tendida en una camilla, rodeada por médicos y enfermeras que trabajaban frenéticamente y con cuidado alrededor de ella. Se aferró a la esperanza de que todo estaría bien, pero la visión de Catherine inconsciente le causó una angustia profunda.

—¿Cómo está? ¿Puedo verla?

Uno de los médicos se acercó a Logan y trató de tranquilizarlo, era los que estaban a cargo de Catherine.

—Señor Sargeant, estamos haciendo todo lo posible. Necesitamos estabilizarla primero. Por favor, déjenos trabajar.

Y de pronto, mil pensamientos aterradores empezaron a apoderarse de él, se sentía atado de manos al saber que podía perderla y no haría nada.

(...)

Logan estaba sentado en una de las sillas a lado de la camilla de Catherine, estaba a su lado tomando su mano con fuerza, aún que intentaba parecer normal, le dolía saber que ella estaba así y no podía haberla cuidado como se debía. 

—Eres mi todo, sabes. Y ese pequeño ahí dentro también lo es. Estamos formando nuestra propia familia, Catherine. Y no importa lo que suceda, siempre estaré a tu lado para protegerte y amarte. Eres fuerte, mi amor. Más fuerte de lo que piensas.

Su mirada estaba apagada, estaba perdido hasta que un apretón en la mano del rubio se hizo presente, rápidamente el estadounidense de giró para mirarla y prestarle atención. Catherine sonrió débilmente, al escuchar las dulces palabras de Logan llegar a su corazón, incluso en sus sueños se sentía tan bien.

—Hey, dormilona —dijo Logan con una sonrisa, tomando suavemente la mano de Catherine.

Catherine yacía en la cama, sus ojos parpadeando lentamente al despertar. Logan estaba a su lado, observándola con alivio y amor, el despertar de ella era suficiente para estar tranquilo. Ella parpadeó, tratando de enfocar la mirada. La confusión cruzó su rostro antes de que los recuerdos regresaran a ella, como piezas de un rompecabezas que se ensamblaban lentamente.

—¿Logan? ¿Qué... qué pasó?

—Dios mío, al fin despiertas, tuve tanto miedo, Cath. Estabas inconsciente, y... —un nudo se formó en su garganta— Gracias a Dios estás bien.

Catherine frunció el ceño, tratando de recordar, Catherine asimiló cada recuerdo que llegaba a su cabeza de la nada, aunque una parte de ella dudaba de la realidad de lo que recordó.

—Debo haberme mareado o algo así. ¿Alison? No lo recuerdo...

Logan apretó suavemente la mano de Catherine.

—No te preocupes ahora. Lo importante es que estás a salvo. No quiero que te estreses.

Mientras Catherine seguía adormecida, Logan acarició con ternura su cabello, Logan continuaba sus dulces palabras, hasta que un médico entró en la habitación con un gesto serio, interrumpiendo a la pareja enamorada en sus gestos enamorados. Observó los monitores y la ficha médica de Catherine antes de dirigirse a la pareja.

— Buena tarde, señora...

— Sargeant, es señora Sargeant.— Interrumpió Logan, Catherine jaló con suavidad su mano, aún que no pudo evitar ponerse roja con sus palabras. El doctor les sonrió y continúo.

— Hemos revisado los resultados y, afortunadamente, tanto tú como el bebé están bien.

Logan y Catherine intercambiaron una mirada de alivio, pero el médico continuó con sus palabras.

—Sin embargo, una caída como la que tuviste puede ser peligrosa, especialmente en tu estado. Te recomendaría reposo y precauciones adicionales. Queremos asegurarnos de que el bebé y tú estén en las mejores condiciones posibles.

Catherine asintió sintiendo un nudo en la garganta. Logan apretó suavemente su mano, prometiendo estar allí para apoyarla.

—Vamos a programar algunas pruebas más para asegurarnos de que no haya complicaciones ocultas. Mientras tanto, descansa tanto como puedas.

Ambos aceptaron, el doctor se retiró de la habitación, dejando a Logan y Catherine en miles de pensamientos. La realidad de la fragilidad de su situación les pesaba, no querían verse envueltos en otra situación como la que recién habían pasado.

Logan acarició la mejilla de Catherine.

—Vamos a superar esto juntos, ¿de acuerdo?

Catherine asintió, no podía pedir más cuando tenía a la mejor mitad de ella a su lado, su familia.

(...)

Catherine estaba durmiendo pacíficamente, por lo cual Logan optó por dejarla un rato bajo el cuidado de Lily, él iría a la cafetería para tomar un café, sabía que sería un noche larga y tenía que estar consciente para cuidar de su novia y su hijo. 

Estaba tranquilo esperando su café hasta que sintió que alguien le llamo al hombro, al girarse notó que era Kika de quién se trataba.

—Logan, necesito hablar contigo.

Él la miró notando la inquietud en sus ojos.

—¿Qué pasa, Kika?

—He estado pensando en lo que sucedió con Catherine, y... —Kika dudó antes de continuar— Creo que Alison pudo haber tenido algo que ver.

Logan frunció el ceño sorprendido por la acusación, en su cabeza no cabía como alguien podía hacer eso.

—¿Alison? No, eso no tiene sentido. Ella estaba comprando cosas para el bebé.

Kika suspiró un tanto frustrada.

—Logan, no estoy segura de cómo explicarlo, pero algo no cuadra. Catherine está embarazada, y alguien como Alison podría ver eso como una amenaza. A ella le gustas, ¿no?

Logan sacudió la cabeza incrédulo de las palabras de Kika.

—Kika, no puedo creer que Alison estaría involucrada en algo así. Además, Catherine no mencionó nada.

Kika apretó los dientes molesta por la falta de comprensión y el desinterés de Logan.

—Solo ten cuidado, Logan. A veces, las cosas no son lo que parecen.

Logan la miró negando con su cabeza.

—Kika, entiendo que estás preocupada, pero no puedo acusar a alguien sin pruebas. Alison ha sido amiga de Catherine durante mucho tiempo, no hay de que preocuparse.

Kika se exaltó frustrada, se enfureció porque algo en su intuición decía que ella estaba en lo correcto, sin embargo, todos la tacharían de loca.

—¡Solo ten cuidado, Logan! A veces la verdad está frente a nosotros, pero no queremos verla.

Con esas palabras, Kika se alejó dejando a Logan confundido. Aunque la preocupación se apoderaba de él, no estaba listo para aceptar la posibilidad de que alguien cercano pudiera hacerle daño a Catherine y a su hijo.

Miss London & The American Boy. | Logan Sargeant.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora