CAPÍTULO 10

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Mientras nos acercamos, observo que el padre de Camila, tiene su puño cerrado y lo aprieta con ira, su esposa se da cuenta y pasa su mano por la de él y se miran entre ellos. Trago saliva y me preparo mentalmente para lo que va a ocurrir, ni siquiera se cómo voy a empezar. 


- Hola, buenas tardes - digo finalmente frente a ellos. 

- ¿Qué haces acá? malditooo -grita el señor y su esposa lo ataja cuando se acerca bruscamente a mi. 

- ¿Cómo te atreves a venir? ¿Recién ahora? - dice la señora. 

- Mire señora Ell... - interrumpo a Lucas. 

- Dejame a mi Lucas... disculpen, tienen toda la razón de reaccionar así y permitame decirle señora, que no juzgue ni rete a su marido, tiene todo el derecho de reaccionar así - me interrumpe.

- Por supuesto que voy a reaccionar asiii, debería romperte la cara ahora mismooo - me empuja y Lucas, lo aparta de mi pero me meto. 

- No no, dejalo Lucas... señor, me gustaría que hablemos como personas cibilizadas por favor, vine acá para hacerme cargo de todo, para hacernos cargo con mis hermanos - me interrumpe nuevamente. 

- ¿A si? ¿Y dónde están tus hermanos? porque acá no los veo. 

- Déjeme decirle que si no están acá, no es porque no quieren sino porque tienen miedo, tenemos... por eso mismo no vinimos antes, teníamos miedo a sus reacciones, a que no nos escucharan, a que nos atacaran y tienen todo el derecho lo se pero no somos unos asesinos, no somos malas personas, por eso estoy acá. 

- No lo puedo creer, que caradures la tuya - ruge el señor. - vete ahora mismo de acá. 

- Por favor señor, sólo escúcheme, se lo pido por favor - digo angustiado, se miran entre ellos y se quedan en silencio unos minutos. 

- Bien, vamos a sentarnos - habla por fin la señora y nos sentamos en la sala, me siento frente a ellos. - ¿Bien? 

- Como les dije, quiero pedirles una enorme y mis más sinceras disculpas y por parte de mis hermanos también, quiero que sepan que nosotros vamos a estar con ustedes y con Camila, queremos acercarnos a ustedes y poder acompañarlos en este proceso tan doloroso - el señor a penas me puede sostener la mirada, se nota que no soporta mi presencia pero aún así me siguen escuchando. - Se que para ustedes es difícil tener en frente a la persona que ocasiono el accidente de su hija pero... créanme que no quisimos hacerlo, fue un accidente y no hay un sólo día en que no nos lamentemos por lo sucedido - me interrumpe. 

- ¿Se arrepienten? ¿Y qué paso cuando quisieron dejarla tirada a mi hija? ehhh - grita el señor, con todo su dolor. 

- No quisimos hacer eso, lo que se ve en las cámaras no es lo que piensan... no sabíamos cómo reaccionar, estábamos en shock por lo sucedido pero nunca quisimos dejarla tirada - digo convencido aún que, en el fondo se que es mentira pero por parte de Guido, él quiso huir en ese momento pero no voy a vender a mi hermano. - Así también puede ver como la recogimos y la trajimos al hospital. 

- Es lo que obviamente debieron hacer - dice la señora, seriamente. - ¿Te pensas que con esto esta solucionado todo? mi hija esta luchando por su vida y ustedes como si nada fuera. 

- No es así señora, nosotros la estamos pasando muy mal, se que no se compara y por eso mismo estoy acá... pero el accidente de Camila, nos tiene muy dolidos, como sabrá no podemos hacer nada, nuestra banda esta arruinada y la verdad que no merecemos eso - me interrumpe. 

- ¿ Y qué mierda queres? ¿Salir ileso de todo esto y continuar con sus vidas de roqueros? ¿Por eso viniste acá no? seguro nos vas a encajar dinero y con eso ustedes solucionan todo - dice el señor, muy molesto. 

- No es así señor, ¿Cómo es su nombre? 

- Encima eso - suelta una carcajada irónica. - Alberto. 

- Bueno Alberto, no es como dice... obviamente que en lo económico vamos a estar para lo que necesiten, acá mi manager trajo unos papeles para que ustedes firmen, allí dice que nosotros nos vamos a hacer cargo de todos los gastos médicos y futuras cosas que Camila, pueda necesitar y por el daño ocasionado - mi manager le da los papeles. - Pueden leerlo tranquilos y después lo firman, volviendo al tema, no queremos solucionar nada con dinero, no queremos desaparecer y hacer como si nada hubiera pasado... queremos estar acá presente con ustedes y Camila, se los pido por favor, no saben cuánto nos duele todo esto. 

- ¿Y a nosotros? arruinaron la vida de una chica de 23 años, con toda una vida por adelante, con toda la dulzura que tiene, con su alegrí..a - el señor quiebra en llanto, no puedo sentirme más mierda en este momento, me pongo de pie y me acerco a él, sin medir lo abrazo y sorprendentemente lo acepta. 

- Lo se... perdóneme, perdone a mis hermanos, no quisimos esto, por favor - quiebro en llanto. - No saben todo el dolor que siento, sueño a Camila, todas las noches, me duermo pensando en ella y me levanto pe...nsando en ella, la pienso todo el día, pienso en ese horrible accidente, quiero morirme - sentado en el suelo, enfrente de ellos llorando. - Me siento una mierda, se que soy yo quien debería estar ahí y no su hija, perdón.




CONTINUA...

AIRBAG Y SU PRINCESADonde viven las historias. Descúbrelo ahora