MARCELIA

Capitulo 28

Martha aplico el contacto cero, no busco a Celia, tampoco le llamo, trata de olvidar su dolor, de refugiarse después de aquella imagen aun no se iba de su mente. Renata acedia desde la lejanía a Martha esperando el momento oportuno.
Martha se encuentra en una situación bastante deprimente, su trabajo, su hogar, no se le volvió a ver sonreír  o por lo menos tener el billo en sus ojos cuando estaba de pareja de Celia. Salvador se percató de una Martha triste y este le pregunta:

-¿Estás bien Martha? Ella lo mira y baja su cabeza diciendo que no lo esta ella se desahoga con salvador acerca de lo sucedió.

Salvador queda inquieto por lo sucedido con Laureano, por lo que dice:

-Martha, quizás cabe la posibilidad de que se haya aliado con tu expareja para esta tetra.

-Puede que sí chava, pero pues el hecho de que lo pruebe, no quita el hecho de la reacción de Celia.

-Bueno por lo que me dices, ella fue una víctima y el dejarse llevar por sus impulsos , quizás la llevaron a cometer este error. Si te decides levantar una denuncia formal y proceder, sabes que aquí estaré.

- Lo sé, gracias chava.

Martha salía de la Encantada, cuando llegaba al parque  vio a Celia, no pudo evitar suspirar a lo lejos por ella, Celia se da cuenta que Martha la observa, va tras ella pero Martha camina aligerando el paso. Renato intercepta al Martha.

- Hola Martha, ¿podemos hablar?

-¿Qué quieres? Quitate de mi camino.

-Martha por favor, deja de estar a la defensiva conmigo yo no te hecho nada.

-Yo fui muy clara contigo y te dije que estoy con Celia

-No lo creo, ¿Por que andas sola?

-Celia se fue con Piedad un tiempo

-¿De verdad?

-Ademas ella y yo estamos bien.

-por que será que no te creo Martha, tu no me engañas

-Mira  Renata me tiene sin cuidado lo que pienses.

-No te creo, deberías  fiarte en mi.

-Quítate  por favor que tengo prisa.

Celia observa con detenimiento lo que está ocurriendo y de inmediato va por Martha

-¡Mi amor, que bueno que te encuentro! Besándola delante de Renata.

-Ven, vamos a la casa, necesito darte una noticia estupenda.

=A ver niñita no ves que estoy hablando con Martha.

-Yo no soy ninguna niña, soy la mujer de Martha, sí, además la estas  importunando porque ella de lejos se nota que no quiere estar aquí contigo, eh.

Celia jaló a Martha y caminaron  rumbo a su casa, Martha no dijo nada de camino solo observaba a Celia. Esta abre la puerta y entran

-¿Con qué eres mi mujer? pregunta Martha en un tono desafiante.

- Sí, lo soy, además no te diste cuenta que estaba de coqueta contigo.

-Lo verdad me estaba gustando, interrumpiste porque te dió la gana.

- ¿Qué te pasa Martha? Llevamos días de no hablar, ni siquiera un hola cuando sales para la Encantada.

-Debes  irte no? Te espera piedado o de seguro Néstor, sonríe fríamente.

- Estás insoportable, de verdad que sí. Celia se dirigía a la puerta, pero Martha la agarró del brazo y la llevo junto a su cuerpo con toda su fuerza la beso una y otra vez y Le dijo, eres mi mujer ¿no? Y con todo su ser Martha se llevo a Celia hasta el cuarto y la volvió hacer suya sin decir una palabra, ella solo se encargó de satisfacer  su ansias con Celia, Celia trataba de no dejarse llevar pero Martha ya la habia superado en fuerza. Martha despojo rapidamente a Celia de su ropa y ella de la suya, la tumbo en la cama y se encargó de hacer su trabajo, ella prestaba atención a lo que Celia le decia de que tuviera cuidado y que la dejará, pero Martha no hizo caso y se encargo de hacerla venir una y otra vez, de arquear el cuerpo de Celia una y otra ver, hastal hacerla gritar con todas sus fuerzas. Fue entonces cuando Martha sintió y entendió que Celia siempre fue de ella.
Martha procedió a vestirse y de paso cubrió a una exhousta Celia y se quedó sentada un instante en la cama reflexionando que se habia portado como un hombre, Celia medio podía levantarse y medio dormida le pregunta a Martha

-¿Que pasó?

-Nada, Estás desnuda esi que te cubri. Por favor vistete. Le decie Martha fríamente, se para de la cama y sale de la habitación.

Celia quedo en shock por la actitud de Martha, ella lloró pero de igual sabe perfectamente que ambas se aman, pero Celia tendria que hacer todo lo posible para poder recuperar la confianza de Martha.
Celia estaba feliz y triste porque practicamente Martha tuvo sexo con ella y la frialdad con la que la trato. Celia se dirigió hasta donde Martha para tratar de hablar.

-Martha, ¿Estas bien?

- Sí, si lo estoy, ¿Estás lista?

-Martha, por favor hablemos.

- No me interesa, dijiste que eras mi mujer, así que hice lo pertinente, tomé lo que se me dió en el momento, por lo pronto regresa a tu casa y con tu novio.

-Martha no digas eso porfavor, esta bien yo cometi la estupidez más grande y en serio me arrepiento mucho, de verdad.

- Mira Celia ya te hice mi mujer, ya complací a tu cuerpo así que debes estar bien  así que ya, date por bien servida. Hasta pronto. Martha se dingió a abrirle la puerta a Celia para que se marchará.
Celia llorando sale  sin antes decirle a Martha lo arrepentida que esta y que la ama mucho.