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«Aprende a jugar con lobos y cuervos, a no ser que ellos te devoren a no poder más».
Emine Sultán.

── Nos merecemos todo el mundo, ¿No? ── dijo Cihangir mientras miraba el atardecer con Aysel, los niños se habían quedado con Bellinay ──

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── Nos merecemos todo el mundo, ¿No? ── dijo Cihangir mientras miraba el atardecer con Aysel, los niños se habían quedado con Bellinay ──. Ya extrañaba estar a solas.

── Asi es, yo igual extrañaba esto ── murmura Aysel ──. Por cierto, ¿Porque tu prima no vivió aquí en Tokapki por cuatro años?

── Ella se quedó en el Palacio Ölüm en Anatolia, era de mi tia Aysun, un regalo de mi padre cuando ella cumplio 21 años ── dijo Cihangir ──. Ella actualmente tendría 44 años ── murmura.

── Si, ya me contó tu madre la historia de ella, que era una mujer sumamente hermosa ── aseguro Aysel ──. Conocida por su habilidad con la espada, y que rompió las reglas de la mujer.

── Muy talentosa y habilidosa, acompañó a mi padre en algunas campañas y reuniones del divan ── asegura el Şehzade  ──. Te amo, Benim ayım.

─ Yo igual te amo  ── Aysel sonrió.

•••


── Esmahan, ¿Que mierda haces aquí?  ── exclama Emine preocupada  ──. Esmahan

── Vengo huyendo, mi madre me golpeo a no poder mas, Adalet me saco y me trajeron hasta acá  ── susurra Esmahan  ──. Me golpearon porque me gustan las mujeres  ── la joven de 25 años lloraba a no poder más.

── Esmahan  ── Süleyman se alarmó al ver a la joven  ──. ¿Que te paso por Allah?  ── susurra.

── Mi madre me golpeo...por mis gustos  ── susurra Esmahan y fue llevada a los aposentos del sultán  ──. Tio, me gustan las mujeres, me golpearon por eso... ── confesó asustada llorando aún más.

Suleiman ya sospechaba de eso, pero igualmente lo acepto, le daba igual. Su corazon se rompió en pedazos.

── Esmahan escúchame, no te asustes, no te haré daño. Entiendo eso de que te gusten los mujeres, Lale es igual a ti porque te gustan las mujeres  ── dijo Suleiman  ──. Te voy a proteger, te dare unos aposentos y traeré a tus hijos, si quieres busco a Maheniever para que te calmes.

── Tranquila, vas a estar segura  ── Emine la abrazo  ──. Respeto eso de tus preferencias, no es un pecado que ames a una mujer, Lale lo hace igual, ella ama a las mujeres. Eso no es pecado, no importa  ──murmura

── Gracias  ── le abrazo fuertemente  ──. Gracias por todo.

── De nada, ahora cálmate  ── Emine se levantó.

Águila del Imperio| El Sultán Donde viven las historias. Descúbrelo ahora