Capítulo 14: Sentimiento que crece más

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Una castaña de mirada pensativa, se encontraba sentada en su escritorio mirando unas hojas de papel, mientras daba de golpecito con el bolígrafo que tenía en una de sus manos a las hojas, al tiempo que un recuerdo de una plática sostenida con su mejor amiga vino a su mente.

-.Recuerdo.-

Una joven de coletas escuchaba atentamente lo que su amiga castaña le decía, mientras almorzaban juntas.

Y fue por ello mi retraso, decía con cierta molestia la castaña.

¿Sigues teniendo sentimientos por él?, pregunto intrigada la otra joven.

Claro que no, respondió la castaña.

¿Cómo puedes estar segura de ello?, sé que no es la primera vez que te pregunto esto, pero tus respuestas anteriores no han terminado de convencerme, agrego Yukari.

No sentí nada al conectar miradas, ni siquiera rabia, eso significa que lo superé ¿no?, contesto Sanae.

Sí, en efecto, ello es un indicador de que tu ex, ya no tiene espacio en tu corazón, dijo la otra joven, haciendo una breve pausa para agregar: ¿En verdad no hay alguien que te guste ahora?

Yukari, ya te he dicho que no, contesto la castaña.

Sabes, yo creo que, si existe alguien, replico la otra joven.

Yuka....

Bien, bien, no seguiré insistiendo, contesto Yukari.

-.Fin del recuerdo: Tiempo actual.-

Si hay alguien que me gusta, pues es inevitable no poder sentir admiración por él, pero es ello admiración, no amor, ¿no?, pensaba la castaña, cuando sintió a alguien tras de ella.

Un vacío de ideas, escucho.

¿Qué?, dijo la castaña, sintiendo un frio recorrer su cuerpo, ante la voz.

No te estreses, suele pasar, respira un poco, sal de la oficina por un vaso de agua, un té, lo que guste, y verás que las ideas vuelven, pronunciaba Tsubasa, al tiempo que la castaña giro su rostro y conecto miradas sin querer con su joven jefe, haciendo que ambos sientan los latidos de su corazón acelerarse.

Si, ¡gracias por el consejo! contesto la castaña, poniéndose de pie, para salir fuera de la oficina, mientras pensaba: Es un gran jefe, amigo de sus empleados, empático, y amable, todo ello he podido notarlo desde que me di la oportunidad de tratarlo más.

La castaña salió de la oficina, seguido por la mirada de su joven jefe, quién al igual que ella meditaba sobre su relación con ella.

Es una chica hermosa, no puedo negarlo, además es tan talentosa y responsable, pero ello no significa que me esté enamorando de ella, claro que no, solo es cariño, si cariño de amigo, pensaba Tsubasa.

Minutos después:

Una castaña bebía un vaso de agua, cuando de repente llego frente a ella otra joven.

Sanae, hace días que no te veo a pesar de trabajar en la misma empresa, decía una linda joven.

Sí, es cierto Azumi, contesto la castaña.

¿Relajándote un poco?, agrego la nombrada.

Sí, respondió la castaña.

¿Cómo vas con tu jefe?, añadió Azumi.

¿No entiendo tu pregunta?, dijo Sanae con la mayor calma que pudo.

¿Aún nada?, contesto la joven.

¿Cómo vas con el jefe Misaki?, respondió Sanae.

DOS CORAZONES UN MISMO DESTINODonde viven las historias. Descúbrelo ahora