Un joven e cabello desordenado recibía una bolsa de papel, tras haber cancelado un respectivo monto, por un recuerdo que le había comprado a la castaña y que pensaba darle el último día de la capacitación.
¡Gracias joven! decía una mujer.
Tsubasa solo asintió y salió del lugar, al hacerlo su mirada se posó en el hermoso puente que estaba sobre un rio, sin pensarlo mucho decidió caminar hacia el mismo, tras varios minutos de caminata ya estando sobre el puente pudo ver candaditos en las rendijas del puente.
¿Colocará su candado con su pareja?, escucho.
¿Qué?, dijo Tsubasa.
¿Vino solo?, pronuncio una mujer mayor.
Sí, contesto el joven.
Entonces no es cliente, dijo la mujer continuando su camino.
Tsubasa iba a preguntarle algo a la mujer, pero no pudo hacerlo, pues su celular empezó a timbrar. El joven contesto inmediatamente la llamada.
Salí a dar una vuelta, pero ya voy para allá, decía Tsubasa.
¿Por qué no me dijiste que saldrías tan temprano?, te hubiera acompañado, escucho.
Sakí, ya voy para allá, mejor ve desayunando, yo ya lo hice por aquí, pronunció el joven.
¿Estás con tu amiguita?, escucho.
Claro que no, dijo Tsubasa.
Te creeré, escucho.
Aunque sea el último día, y nos den las grabaciones, no podemos llegar tarde, agregó el joven de cabello desordenado.
Claro que no, escucho.
En tanto:
En una habitación de hotel, una castaña terminaba de alistarse, mientras pensaba con nostalgia: El último día, de aquí no sé si nos volvamos a ver, si tú piensas volver algún día a Nankatsu o no, como me gustaría saber ello.
La joven tras colocarse unos pendientes, respiro profundamente, tomo su bolso, camino hacia la salida de la habitación y salió del lugar.
Minutos después:
Tres jóvenes se encontraban en su último de día de registro para la capacitación.
Voy a firmar, dijo la castaña, mientras Tsubasa asentía.
Una vez que la castaña se alejó lo suficiente, Sakí, poso su mirada en el joven de cabello desordenado para decir: ¿A dónde fuiste?
A caminar, contesto Tsubasa.
Debiste de decírmelo, a mí me encanta caminar....
Ve a firmar tu registro de asistencia, yo voy a llenar el mío, contesto el joven, sin responder a lo que la pelinegra le dijo.
¿Por qué eres así Tsubasa?, además para quién es esa bolsa que trajiste contigo, ¿acaso es para ella?, expreso, con cierta molestia Sakí, mientras veía alejarse al apuesto joven.
Japón: "Tokio"
Que puedo decirte, si ya hasta reemplazo te buscaste, solo ve, dijo sonriendo el señor Wakabayashi.
¡Gracias papá! pronunció Genzo, luego de ello salió de la oficina. Ahora si a empacar, que en unas horas parto a Nankatsu, pensó.
El joven salió de la oficina de su padre y fue al lugar donde vivía para empacar una pequeña maleta, minutos después abordo su auto para ir a Nankatsu.
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DOS CORAZONES UN MISMO DESTINO
RandomDos jóvenes con algo en común, una fuerte desilusión de amor, pero sus destinos se cruzarán naciendo una química inmediata entre los dos, una química que ambos se niegan a aceptar debido a su temor al amor, sin embargo, el destino se empeñara en man...