Sospecha

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Narra Bill:

Estaba la Elionor en una tienda de ropa, estaba viendo un vestido muy lindo para Víctoria, ya habíamos tardado como hora y media aquí así que quería comprarle algo para compensar que ella  apareciera en nuestro momento.

-¿Te gusta?.- me preguntó mirando el vestido que tenía en las manos.

-Si, me gusta para alguien.- le dije sonriendo por inercia al recordar a Victoria.

-Me debe quedar muy bien, siendo sincera tiene un muy buen gusto.- me dijo quitándome el vestido.

-Oye no, no era para ti, es para otra persona así que deja eso, busca otro.- le dije jalando en vestido.

-No Bill suéltalo.- lo seguíamos jalando hasta que ella rompió el vestido.

-Ya lo rompiste, maldición.- le dije molesto.

-Ire a pagarlo.- dijo y se fue comencé a pensar que hacía Victoria y en eso siento que algo en mi pecho se comprime y lo primero que pienso es en ella.

-Date prisa tonta, quiero llegar, me llamaron que me necesitan.- le menti para que se apurara.

La jale y nos subimos al auto, le pedí al chófer que se apurara ya que algo en mi pecho me decía que ella no estaba bien.

Baje corriendo y vi a Liliana.

-Oye ¿sabes dónde está Victoria?.- le pregunté apurado.

-De hecho la estoy buscando, debe estar en el bar vamos.

Fuimos y el chico nos dijo que si estaba ahí pero que se había ido por el pasillo que daba a la alberca, nos dijo que estaba muy ebria, fuimos corriendo y al entrar veo a Victoria boca abajo en la piscina.

-Victoria.- dijo su amiga al verla.

Comencé a quitarme los zapatos y la camisa y salte y fui por ella, la saqué de agua y comenzamos hablarle pero no daba señal ninguna.

-Haz algo Bill, Victoria no se puede morir.- me dijo Liliana.

Comencé a oprimir su pecho una y otra vez hasta que porfin comenzó a escupir agua.

-Victoria ¿me escuchas?.- le dije quitando sus cabellos de su rostro.

-Amiga, holaaa.- le decía Liliana.

-¿Qué? ¿Qué paso?.- preguntó.

-Te ahogaste.- le dije.

-Pero se nadar.- dijo sentandose mientras tosia un poco.

-Victoria por qué te metiste al agua si estabas ebria.- le dijo Liliana.

-Estaba buscando algo pero no recuerdo que, solo recuerdo que lo saqué y comenzó a darme un calambre y me desmaye.- dijo apurada como siempre suele hablar.

-Me alegra saber que estás bien.- le dije y le di un beso en la frente.

-Por que me dejaste sola.- dijo la voz de Elionor llegando a dónde estábamos.

-¿Victoria que te paso?.

-Me dió un calambre y me desmaye en la piscina.

-Le pediré que alguien te lleve a tu habitación.- dijo y en eso hablé

-No, la voy a llevar yo así que hazte a un lado.- le dije a Elionor para cargar a Victoria.

Salí con Victoria y Liliana de la alberca y Liliana fue avisarle a los chicos mientras yo llevaba a Victoria a la habitación.

-Gracias por salvarme Bill, aún que por mi culpa hice que te mojaras.- me dijo apenada.

-Eso se seca, era más importante salvarte a ti, al rato quien me va hacer feliz.- le dije y ella sonrió.

La dejé en su habitación y pasamos un rato los chicos y sus amigas con ella.

Narra Victoria:

Después de que todos se fueran me toque el cuello y no tenía el collar que me había regalado Bill, me levanté rápido y fui a la piscina para buscarlo, pero cuando llegue ví a Bill parado en afuera de la piscina me iba acercar pero se escuchó la voz de Elionor así que me regresé a mi lugar y me puse a ver qué hacían.

-Billy.- le dijo ella.

-Ya te eh dicho que no me digas así.- respondió Bill molesto.

-¿Por qué no puedes amarme como yo lo hago?.- le pregunto.

-No lo se, simplemente no puedo, no se cómo explicarlo.

-Solo quiero que me ames.- le dijo ella y se le acercó y lo beso, cabe recalcar que ella es una chica alta y refinada así que puede besarlo sin que Bill se agache, pero verlos besarse hizo de el estómago se me revolviera así que me fui.

Narra Bill:

-Por que demonios hiciste eso, ya te dije que no puedo amarte.- le dije empujandola.

-¿Hay alguien más?.- me preguntó.

-Si.- le dije serio.

-¿No vas a preguntar su nombre?.

-No quiero oírte, y jamás lo voy a oír.- me dijo y salió corriendo como loca yo no sé qué diablos le pasa, espero que así se aleje aún que sea un poco....

Del odio al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora