Fuego | MacaoChay

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Macau tiraba todo lo que se encontraba a su alcance. Si Vegas contará cada cosa que su hermano a roto por la ira en todo lo que va de su vida creería que sería más millonario de lo que era.

— ¿Puedes porfavor dejar de tirar cuánta cosa te encuentres?

— ¡No! ¡Porchay desapareció y no se ninguna maldita posiblidad en donde pueda estar.

— No puedo creer que te pongas así por un mocoso— decía Vegas harto de la actitud que tenía su hermano.

— ¿Es en serio? — no daba crédito a lo que escuchaba— ¿Que pensarías si las cosas fueran al revés? Que en vez de Porchay fuera Pete el que se fue sin ninguna explicación a quien sabe que lugar.

Vegas se quedó callado al escuchar a su hermano, si bien podía ser que estaba rebajando los sentimientos de Macau no podía evitar imaginarse esa escena haciendo que su corazón se encogiera.

— Agh — Vegas se tallaba la cara con fastidio — Bien ¿Que piensas hacer?

Macau lo miraba pensando algún plan mientras que Vegas esperaba a que su novio terminara de hablar con Porsche, por lo que podía escuchar este último estaba llorando por llamada haciendo que los ojos de Pete se empezarán a cristalizar.

— Otro chillón — Vegas estaba harto, pensaba que su día iba a tratar de estar en familia, había reservado un restaurante para almorzar todos juntos en un ambiente de paz y tranquilidad, ambiente que por supuesto se destruyó cuando Porsche llamo histérico diciendo que su hermanito menor había desaparecido haciendo que tanto su novio como su hermano se preocuparan por el menor. — Dios, te las estás cobrando todas conmigo ¿Cierto?

— ¿Dijiste algo cariño?— Pete aparecía detrás de el sacándose las últimas lágrimas que tenía en el rostro.

El cuerpo de Vegas se tenso al escuchar a su novio, si algo que le temia después de la muerta era ver a Pete enojado.

— No, nada cielo — decía mientras acariciaba la cabellera de su novio atrayendolo para abrazarlo— Ya, verás que aparecerá pronto.

— Lo sé pero en este momento me preocupa Macau.

Pete señaló al sofá donde el menor se encontraba sentado con la cabeza agachada, mirando al piso se podía notar que estaba sollozando ya que veía como su respiración subía y bajaba un poco agitado.

— Me preocupa como está, no se ha tomado bien está noticia.

— Me siento un poco culpable— decía Vegas mientras agarraba de la cintura a su novio.

— ¿Culpable? ¿Tú? Wow eso si que es nuevo — el tono de burla de Pete hacia que tomara un poco de gracia el asunto.

— Siento que yo fui el culpable, si no lo hubiera separado de él supongo que Porchay no habría tomado esa desición de irse.

— Es joven Vegas, cualquier adolescente a esa edad piensa en irse de casa y más si es en una donde toda su familia está involucrada en cosas no tan buenas, él tuvo sus motivos no creo que del todo sea porque lo separaste de Macau.

— Puede que tengas razón pero igual, me siento culpable al ver a mí hermano así no quiero que caiga nuevamente en depresión.

— No lo hará — Pete agarraba de la mano a su novio para que esté lo viera a los ojos— Ahora tiene a dos adultos responsables a su lado, ya no pasará lo mismo lo prometo.

— ¿Pueden porfavor dejar de restregarme su amor en mí cara?— la voz de Macau hizo que los dos salieran de su pequeña burbuja— Me irrita.

— Sí — decía Pete separándose de Vegas— Retiro lo dicho, esto no será para nada fácil.