Vida Rota. (Aslan's Version)

quince

No podía creer que este día había llegado de nuevo, no quería, no tenia que. Esta mañana, mi madre había entrado a mi cuarto con un pequeño pastel para mí, me hizo feliz ese momento.

- ¿Qué es lo que quieres?

-No quiero que nos vayamos de aquí.

Ella no dijo nada.

-Solo, ¿no pueden dejar sus discusiones con la abuela?

-Aslan, sabes que eso no se puede.

-Sí, eso pensé. - me levanté de la cama. - Debo irme a entrenar, los veré mas tarde.

Ella salió de mi cuarto sin decir nada más. No quería irme, ¿Cómo le explicaría a Fara? Tal vez a esto se refería la abuela cuando dijo que me rompería el corazón o mas bien, hablaba de que yo se lo haría a ella.

Salí a toda prisa, se me hacia tarde, pero no podía olvidar el mensaje para Fara de todas las mañanas.

Mas tarde, no tenía su respuesta, que extraño. Eso significaba dos cosas, vio a su mejor amiga y esta con ella ahora mismo, o tal vez le había pasado algo y no quería responder, espero que sea la primera.

Regresé a casa y al poco tiempo me fui de vuelta, era un día extraño incluso mis amigos notaron que no era mi día favorito, pero sabia que las cosas mejorarían. Lo único que no quería era tener que partir un pastel más aquí en la escuela.

Cale volvió a salir porque Yasmín la esperaba, significaba que Fara entraría por la puerta en cualquier momento y asi fue, ella tenia algo en sus manos e incluso tenia un moño dorado en la cabeza, ¿Qué? Eso ultimo me hizo mucha gracia, en cuanto me vio, me dio un fuerte abrazo y me felicitó, no lo pensé dos veces y le di un beso. Ella parecía impactada, pero aun así sonrió.

- ¿Y ese moño que tienes en la cabeza? - dijo Asiel

-Oh, es verdad. - se dio la vuelta - Yasmín dijo que soy su regalo para ti.

-Pues qué bonito regalo- sonreí - gracias.

Pasado un rato, ella nos llevó a la zona arbolada y mis sospechas eran ciertas, tenia un pastel y unas velas, oh Fara... No podía decirle que no lo quería, estaba tan feliz, tan sonriente, que no podía arruinar esto. Ellos cantaron "cumpleaños feliz" y soplé las velas, Fara sonreía y con ello, volví a besarla.

Estuvimos un buen rato ahí y cuando fue la hora de la ultima clase, Fara me tomó de la mano para tomar una computadora cerca de nuestros amigos, teníamos un trabajo pendiente y ella solo estaba concentrada en la pantalla, se veía tan linda concentrada, la abrazaba de vez en cuando y le daba pequeños besos, metía mi mano debajo de su suéter, pero no decía nada, solo se tensó y salió al baño.

- ¿Todo bien con Fara? - dijo Asiel

-Claro que sí, ¿Por qué?

-Solo pregunto, salió al baño de forma extraña.

-Ella esta bien, solo le andaba del baño.

-Como tu digas.

Él se dio la vuelta y yo regresé a la pantalla, no entendía como Fara había avanzado tanto sin mi ayuda, no sabía como había hecho todo esto, simplemente no moví nada porque me daba miedo borrar algo. Pasaron diez minutos y finalmente ella volvió, se veía mas relajada, cuando se sentó, puse mi mano muy fría en su espalda y ella me dio un gran golpe en la pierna.

...

Íbamos de camino al transporte, ella se veía extraña, tenía algo que decir, pero no hablaba, ¡habla ya Fara! Ella se detuvo.

- ¿Qué?

-Date la vuelta, voy a poner algo en tu mochila. - sonrió.

Fue extraño, pero me di la vuelta, ella abría y cerraba la mochila, pero yo no entendía nada.

-Date la vuelta, pero ahora en mi dirección.

Como digas.

- ¿Qué me pusiste? - dije con curiosidad.

-Te estoy dando una parte de mí, solo cuídala.

Me había puesto un collar y era uno que ella usaba, pero ¿Por qué me lo dio?

Le agradecí y la besé.

Mas tarde en casa, mis padres me dieron un regalo y agradecía por ello, pero no era lo que le había pedido a mi madre en la mañana. Entré a mi cuarto y me paré frente al espejo, en efecto, era el collar en forma de mano de Fara, no sé porque me lo habrá dado, pero lo cuidaré como ella dijo.

Tengo miedo, no se como hacer para no herirla...