Capítulo 38

56 36 25
                                    

Stormy

Desperté lentamente de un sueño profundo, sintiendo todo mi cuerpo pesado debajo de las sábanas, e hice un esfuerzo por separar mis párpados.

En el momento en que lo logré, descubrí que no estaba en mi habitación.

Me levanté de la cama poco a poco, observando absolutamente todo a mi alrededor con detenimiento, sin saber donde me encontraba ni tampoco como había llegado allí.

La cama se ubicaba al lado de unas ventanas dobles con alféizar interior, por las cuales entraba la luz del día y me lastimaba un poco los ojos, en frente estaba la puerta de la habitación y a la derecha había un placard de madera muy ancho. A mi izquierda había una puerta abierta, allí vi una tina y supe que era el baño. Al lado de dicha puerta se ubicaba un precioso tocador antiguo con espejo, tres cajones de cada lado y una silla con tapizado delante.

Quité la sábana y miré lo que llevaba puesto. Aún conservaba el conjunto de encaje debajo de una camiseta blanca y larga, la cual me cubría todo lo necesario para que no se viera la ropa interior verde.

Verde.

Comencé a recordar lo que había sucedido conmigo.

Había corrido por el bosque, huyendo de los motociclistas que llegaron a la casa de campo, me atraparon y me llevaron con ellos. Luego me vendieron, estuve con un grupo de chicas muy asustadas como para iniciar una conversación. Me drogaron, y lo último que recordaba era...

La subasta.

¡Fui vendida!

Recordaba que había sido vendida a un hombre de traje, quien estaba entre la multitud acompañado por una mujer y luego... disparos.

Después de que aquel subastador golpeó el martillo en el estrado, vendiéndome a ese hombre, comenzaron los disparos y me desmayé por lo que recorría mi sistema.

No recordaba mucho más.

Lo que me habían dado me dejó totalmente mal, no me podía mantener en pie erguida, tampoco podía enfocar bien la vista ni oír correctamente.

¿Qué había sucedido después?

Intenté hacer memoria mientras me sentaba en la cama, busqué dentro de mis recuerdos hasta que comenzó a dolerme la cabeza, y llevé mis manos a mi cráneo.

No pude recordar su nombre. El nombre de quien me compró.

¿Quién era él?

¿Mi hermano sabría lo que me sucedió?

Probablemente estaría furioso, mi boda no se había llevado a cabo.

Tenía un problema menos del que preocuparme.

Esperaba no tener problemas más grandes que un matrimonio arreglado.

No sabía quién era él, pero recordé vagamente un par de cosas.

En medio del tiroteo vino hacia mí, me levantó del suelo y me cargó en sus brazos, prometiéndome que todo estaría bien, luego volví a caer inconsciente.

Capture to Sparrow ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora