By Tom.
Éramos seis borrachos dando la escena de nuestras vidas, Georg se había orinado en los pantalones al no haber alcanzado a sacar la polla para mear en la nieve... Gustav se había quedado dormido en el interior de mi coche y Diana molestaba a Geo al verlo con los pantalones abajo y el bóxer orinado, aunque lo que traía, eran unas ganas enormes de chuparsela, estaba seguro de eso.
Bill por otro lado estaba en su coche con Anna, y por los vidrios empañados estaba seguro de que estaban follando.
Yo de puro gilipollas me había quedado parado afuera de la cabaña para vigilar a Charlotte, el tipo ese, el tal Gordon seguía a su lado muy acaramelado hablando hasta por los codos, mientras que mi madre la muy descarada le celebraba cada palabra como una estúpida.
Se había atrevido a invitarlo a pasar a la cabaña y se habían acomodado al lado de la chimenea para conversar y beber vino muy campantes, acababa de conocerlo y no me iba a fiar de él tan fácilmente, así que me quedé en la terraza para vigilarlos muy de cerca...
Encendí un cigarrillo y me apoye en la barandilla de la terraza, tenía media botella de agua ardiente en la mano y le daba uno qué otro sorbo de vez en cuando, me quemaba la garganta al pasar el líquido y bufaba cada vez que terminaba de tragar.
Diana había endendido la radio del coche de Georg y estaba bailando como una loca mientras que Geo la manoseaba y se aprovechaba de su borrachera, pero Georg estaba igual o peor de borracho que ella así que ambos actuaban como idiotas... Le di otro sorbo a la botella y comencé a caminar hasta las escaleras de la terreza para bajar, miré los escalones y enfoque la visión, pero se me movían las escenas en mi cabeza y veía doble, el piso se tambaleaba y me era difícil descifrar cual de los dos escalones que veía era el original...- Mierda... Quédate quieta puta escalera...
Dije en un balbuceo carrasposo como si fuese normal intentar dialogar con la madera...
Bajé mi pie derecho lentamente mientras me afirmaba con la mano que sostenía también el cigarrillo... Esperé a sentir el escalón en mi pie y cuando me di cuenta que había acertado me sentí feliz...- Así... Muy bien Tom... Sigue así...
Me daba ánimos a mi mismo, pero es que en realidad estaba haciendo un muy buen trabajo teniendo en cuenta lo borracho que estaba...
Volví a pararme firme y comencé a bajar el otro pie lentamente para continuar de la misma manera... Pero esta vez no me fue tan bien... Apoye el pie solo con el talón y con lo resbaloza qué estaba la madera mi pie se deslizó al instante y resbalé... El culo me pegó en el segundo escalón y lo demás fue historia... bajé todos los escalones con el culo hasta llegar a la nieve, la botella de agua ardiente seguía pegada a mi mano, me había aferrado a ella como si la vida dependiera de ello...- Oohhhuuu.... Maldición...
Me quejé un momento pero a nadie le importó, aunque creo que la verdad fue que nadie se dio cuenta de mi caída... Intenté ponerme de pie apoyando mi mano sobre la nieve y soltando el cigarrillo... Me tambalee un momento pero me detuve, cuando me sentí capaz de continuar eleve mi cuerpo hasta lograr pararme con las piernas bien abiertas... Me quedé quieto, según yo... Pero la verdad el cuerpo se me movía solo, espere unos segundos hasta sentir que era capaz de continuar y empecé a avanzar por la nieve... Tenía el pantalón y la chaqueta mojada con la reciente caída, pero eso no me importaba, seguía caminado como imbécil sin dirección y sin destino alguno... Pase por el lado de Diana y Geo y me di cuenta de que estaban follando... mierda... Era yo el único gilipollas que no estaba metiendo el pene, bueno Gustav tampoco, pero como estaba dormido no contaba...
Me detuve y los observé un momento, yo estaba apenas a unos pasos de distancia de ellos, pero no se daban cuenta de mi presencia... Diana estaba apoyada en el capo del coche de Geo mientras él muy descarado se lo metía como un desquiciado, sus movimientos eran descoordinados y al estar de espaldas desde donde yo los veía, podía verle el culo, blanco y redondo como el de una chica...
Me reí solo, me causó tanta gracia verlo así, se veía tan estúpido que sentí ganas de ir a joderlo...
Caminé casi arrastrando los pies para acercarme otro poco, ellos seguían sin percatarse de mi presencia así que me aproveche de la situación, cuando llegué detrás de Geo, estiré la mano y le agarré una de las nalgas y la apreté un par de veces... Me reí de mi propia estupidez pero Geo se volteo exaltado y me dio un manotazo en el pecho, con la poca coordinación que ambos teníamos, los dos nos tambaleamos apunto de caernos y provoque de inmediato que la penetracion entre ellos se rompiera... Diana me observó molesta y comenzó a mandarme a la mierda...
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Me enamoré de los Dos.
Ficção GeralTe imaginas toparte en tú vida con dos hombres jodidamente guapos y que ambos sean tus pretendientes?... Te imaginas qué esos dos Hombres guapos y sensuales se enamoren de ti y qué tú también te enamores de ellos?... Y si esos dos hombres fueran her...