chapter twenty six.

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real life, social media.
capítulo veintiseis — kings league.

8 de noviembre, 2022.

10am.

SAMANTHA's pov.

— ¿Cuánto falta? — pregunté, como una pinche niña chiquita.

— Pendeja, ahí sale en la pantalla cuánto falta — me respondió Emi, algo harta y rodando sus ojos. Probablemente porque era la décima vez en todo el viaje que le preguntaba.

Decidí bufar y levantarme levemente con mi teléfono a fastidiar a Juan, que estaba durmiendo detrás mio.

— ¿Qué vas a hacer? — preguntó la castaña, casi susurrando.

Sonreí maliciosamente, y Ari, que estaba a la ventana del avión y grabando para una historia de Instagram también. Sacó su teléfono de la ventana y lo dirigió hacia mi.

Le pegué un manotazo en la frente, haciendo que se despertara.

— ¡Aaaaah! ¡Tu puta madre! — maldijo, gritando y ganándose una mala mirada de parte de algunas personas dentro del avión.

Yo carcajeé, igual que las demás.

— Oye, pero en serio, ¿cuánto falta? — le dije a Ari.






































12am.

Luego de 9, casi 10 pinches horas de un pinche viaje en avión (con la pinche Emilia al lado mio cantando Taylor Swift a lo bajo todo el bendito viaje) llegamos al puto hotel.

Los Sebari se fueron a su habitación, que quedaba a unos cuartos de distancia del mio con Emi.

En dos dias tenemos la presentación de la liga. Me habían ofrecido maquillista, peluquero y todo que pudiera necesitar para arreglarme.

Pero aún así preferí que Emi me arreglara. Sinceramente, confiaba más en ella que en mis aptitudes para maquillar.

Confiaba más en ella que en una pinche maquillista.

Porque ella era ella.

— Oye, te juro que si se te pierde la tarjeta, te mato — me apuntó con su dedo y sacándome de mis pensamientos.

— Pendeja, no se me va a perder — le guiñé el ojo, para luego entrar al cuarto.

Ambas entramos entre risas, pero nos paralizamos al ver algo.

— Ha-hay una cama — apuntó ella.

— Tú úsala — dijimos al unísono. — No, úsala tú.

— No, wey, úsala tú — dijo Emi de nuevo.

— No, la vas a usar tú, sin discusiones.

— Samantha...

— Ya, ¿sabes qué? La voy a usar yo. Tu duerme en el pinche sillón.

𝗔𝗟𝗚𝗢 𝗖𝗢𝗡𝗧𝗜𝗚𝗢;     rivers ggDonde viven las historias. Descúbrelo ahora