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Un castaño de dirigía al pueblo que no se encontraba muy lejos de Hogwarts, iba tranquilo pero con su cabeza llena de pensamientos que le confundían.

No debía sentirse así, no debería sentir que su corazón se estrujaba cada que veía a Sayre sonreírle de aquella manera al Malfoy, aquella manera que algunas veces el mismo Slytherin le sonreía así y su corazón latía queriendo correr a él. No debía sentir que su cuerpo se desvanecía cada que oía que su hermano hablaba de aquellos dos como si de una pareja se tratara, no debía sentir celos cada que veía que Malfoy veía a Dominic con amor, no debió sentir aquel nudo en la garganta al oír que Malfoy y Sayre habían tenido algo. No debía preocuparse por Dominic Sayre.

Suspiró y entró en aquel bar para pronto ver a su padre saludándole con la mano acompañado de una gran sonrisa.

- Hola. - saludó James mientras se quitaba su abrigo y seguido de eso se sentaba justo frente de su padre. - ¿Cómo estás?

- Un poco agobiado con tanto trabajo pero la verdad es que bien. ¿Qué tal tú? - preguntó mientras hacia una seña para que les atendieran.

- Seguro que sí, pero debe ser más calmado ahora que ya no vas tras de Nott o que le intentes sacar información. - dijo mientras jugaba con sus manos que se encontraban en una posición de flecha. - No tengo mucho que contar, lo mismo de siempre, bien.

- Me alegra que así sea, no he recibido ninguna queja de algún profesor o de la directora, te felicito por ello. - sonrió, y es que a Harry le sorprendía aquello, ya que hasta a la directora le extrañaba que James Potter se mantuviera tranquilo el último año, la madre del chico insistía que solo se trataba de madurez mientras que Harry le decía que no lo creía y que sentía que había algo. - Pues eso es cierto, buscar a Nott nos mantuvo muy ocupados pero ahora que ya es libre sin duda ya nada se compara con él.

- Gracias. - sonrió y justo en aquel momento llegaba un joven para atenderlos. - Una cerveza de mantequilla, por favor. - el chico asintió y miró a Harry en espera.

- Un whisky de fuego, por favor. - el joven se fue con un asentamiento y dejando a los dos Potter solos.

- ¿Y que es ahora de Theodore Nott? - preguntó recargandose en su silla.

- No lo sé, seguro debió irse con su esposa del país o andar por ahí, quizá quien sabe bien sobre él debe ser Amaris. - se encogió de hombros pues realmente aquel hombre nunca había sido cercano a él y no se conocían mutuamente de no ser por la Snape.

- ¿Es familia de ella? - preguntó y Harry negó de inmediato.

- Para nada, al menos no que lo diga su apellido o su sangre, pero antes cualquiera que los conociera sabían perfectamente que eran como hermanos.

- Supongo entonces que así como tú tenías tu grupito de tres con mis tíos, ella debió tener el suyo con Nott y con el señor Malfoy. - opinó en forma dudosa para obtener en respuesta un asentamiento de parte de su padre.

- Algo así, Malfoy y Nott se llevaban pero no eran los más íntimos amigos, solo tenían amistad, sin embargo cada uno por su parte eran como familia para Amaris. Cuando ella desapareció se logró notar más eso, pues nunca hubo comunicación entre ellos dos, agregando que Nott se apartó de todos, incluso de su esposa y es por ello que me sorprende que sigan casados.

- ¿Fue cuando comenzó la locura de Nott? Por eso se alejó, ¿No? - preguntó muy interesado. - De alguna manera fue mejor para su esposa, seguro que prefería tenerlo lejos que a tenerlo cerca en esa condición.

- No, Nott jamás estuvo loco. - respondió ganando que su hijo le mirara confundido con el entrecejo fruncido.
Por
- Pero eso fue lo que todos decían. - dijo justo cuando llegaban con sus bebidas y en cuanto estuvieron solos de nuevo volvió a hablar. - Que era un loco y un mortifago.

𝓐𝓮𝓽𝓮𝓻𝓷𝓾𝓶 [𝚆𝚑𝚊𝚝 𝚑𝚊𝚙𝚙𝚎𝚗𝚎𝚍?]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora