TREINTA Y SEIS

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Adaptarse a esa nueva forma de vivir fue fácil. El día siguiente a que la marca fuera hecha no pudieron separarse, incluso para ir al baño tenían que ir juntos, uno esperaba al otro en la puerta o sino sus lobos lloriqueaban. Necesitaban estar juntos después de un proceso tan íntimo.

La tarde siguiente fueron un rato al lago aunque esta ocasión únicamente sumergieron sus pies en el agua. Luego volvieron a su cabaña donde tuvieron una pijamada viendo los árboles moverse con tranquilidad. Ya en la noche quemaron bombones y bebieron chocolate caliente en lo que Changbin llegaba por ellos.

-Oh, así que realmente lo hicieron.- Changbin comentó una vez ingresaron a su auto.- Me refiero a la marca... aunque también lo hicieron o no tendrían marca. ¡Pero no quiero detalles!

-No te los íbamos a dar de todos modos.- Contestó bufando Jisung mientras Minho reía. Le gustaba la relación de esos dos, a veces se preguntaba que tipo de hermano hubiera sido él.

-Bueno, igual para las preguntas incómodas se harán cargo todos los demás en cuanto lleguemos. Los están esperando desde que salí de la casa.

Y tal como dijo, en cuanto llegaron a la casa se encontraron con todos sus amigos en la sala que en cuanto vieron su reciente marca corrieron a la pareja para abrazarla. Chan lloró un poco y Minho se mantuvo sonrojado todo el día.
Claro que hubo bromas pero todas soportables y graciosas, ninguno se sintió incómodo.

De aquello ya había pasado medio año. Su rutina no cambió mucho, a excepción de que si antes Jisung pasaba poco tiempo en su casa, ahora su presencia era casi nula. Y aunque le ponía un poco triste no convivir con sus hermanos como antes la verdad es que se sentía cómodo con Minho a su alrededor.

Por lo que una tarde le comentó sobre si deberían mudarse juntos, temeroso de recibir una respuesta negativa pero lo único que escuchó fue un ¡Estaba por preguntarlo yo!

Quisieron buscar un lugar a donde irse juntos, sin embargo, después de mucho platicarlo decidieron que lo mejor era vivir un tiempo en la casa de Minho para ahorrarse la renta y mejor crear una cuenta de ahorros entre los dos para que así, cuando los ahorros fueran lo suficientemente buenos buscarían un buen lugar. Así que habían iniciado todo el proceso de mudanza a la casa del alfa desde hace semanas pero esa tarde finalmente estaba sucediendo. Finalmente iban a vivir juntos.

No era como si Jisung tuviera muchas cosas, a decir verdad era más ropa que nada. Los hermanos Seo habían ayudado arduamente en el traslado de algunos muebles como el tocador simple de Jisung y su mesita de noche. Todo lo demás lo llevaron a un albergue donde podrían darles un uso.

En ese momento se encontraban en su habitación. Habían cambiado de posición casi todo, de modo que se sintiera cómodo para ambos y ahora tenían un montón de cajas abiertas acomodando las cosas en los cajones hasta que una llamada entró al telefono de Jisung que, por estar perdido entre tanto, no pudo ser contestada y se perdió.

-Si es urgente llamarán de nuevo.- dijo Minho unos metros a su lado, tratando de calmarlo sin embargo, el ringtone volvió a sonar alarmando a los novios quienes comenzaron a lanzar todo desesperados tratando de hallar el dispositivo.- ¡Aquí está!

El alfa se puso de pie rápidamente para esquivar todas las cosas en el suelo y dárselo al omega quien contestó al instante.

-¿Hyunjin? ¿qué..? ¿enserio? ¡Si, vamos para allá! ¡Si!

-¿Qué pasa?- Preguntó pegado a su lado queriendo escuchar algo de la conversación sin éxito.

-¡Es Innie! ¡Rápido, ponte unos zapatos y vámonos!

-¿Pero qué pasa?- Aún así corrió a buscar sus tenis.

-¡Innie entró en labor de parto!- Gritó desperado, bajando por las escaleras.

MAKTUB × Minsung OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora