21

71 9 5
                                    

"La verdad puede convertirse en un arma de doble filo"
"Necesito estar solo."
"Apagar la sonrisa más brillante."
"Parte I"

De regreso a casa San había dejado a Yeosang y espero a que entrara antes de irse, era algo que solía hacer como todo un caballero aunque ese caballero tuviera sus días buenos y también sus días malos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

De regreso a casa San había dejado a Yeosang y espero a que entrara antes de irse, era algo que solía hacer como todo un caballero aunque ese caballero tuviera sus días buenos y también sus días malos. Cuando Yeosang entro San se dió media vuelta y continuo su camino de regreso a casa, esa noche no había nadie aún, sus padres habían salido, como todas esas tantas veces, cuando salían solían demorar demasiado tiempo o incluso llegar al día siguiente.

Sus pensamientos estaban divagando, pensando en problemas pasados que debieron de haber tenido solución en su momento, arrepentimientos, frustraciones, o incluso, también ese pequeño problema de irá que solía tener cuando las pesadillas decidían seguir atormentando su cabeza.

Entre medio del camino con la cabeza hacia abajo pateaba piedrecilla tras piedrecilla, arrojandola a ciertos metros de distancia como si estuviera practicando fútbol, ambas manos se mantenian dentro de los bolsillos que contenían sus pantalones, como si hubiera cometido un crimen del cual estaba rotundamente arrepentido. Sin embargo, su suerte no podía verse más alterada cuando escucho unos pasos a la distancia aproximándose hacia su persona, al momento de levantar la mirada se encontró a sus dos mejores amigos; Hongjoong y Mingi caminando hacia el.

Por un instante se detuvo, los miro fijamente como si hubieran hecho algo malo, reincorporando su espalda un poco, a medida que quedará nuevamente erguido con su mirada amenazante en el rostro.

Lo que San no sabía era que a la distancia Yeosang lo estaba siguiendo, con un peluche entre sus brazos abrazado, mantenía este firmemente agarrado entre los brazos, con una despampanante sonrisa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Lo que San no sabía era que a la distancia Yeosang lo estaba siguiendo, con un peluche entre sus brazos abrazado, mantenía este firmemente agarrado entre los brazos, con una despampanante sonrisa. Los dos mejores amigos habían visto a la distancia que Yeosang se encontraba a unos pocos metros, se echaron una fugaz mirada cómplice, asintieron cuando se dieron cuenta que estaban pensando en lo mismo.

Al instante de acercarse hasta San en la misma posición, con ambas manos dentro de los bolsillos y esa mirada amenazante le sonrieron expectantes, como si estuvieran bastante felices de verlo, pero las cosas no eran así.

— Oye, San, ¿Recuerdas cuando atropeyaste a ese muchacho? Mi padre quiere hablar contigo al respecto, su padre perdido fue a reclamar al bar. — La voz de Mingi era un poco fuerte, lo suficiente como para escuchar a la distancia.

— Cierto, el padre de Mingi te está buscando desde hace una semana, necesita que vayas o podrían arrestarte. — Hongjoong hizo mención, agravando un poco más el asunto que era todo una mentira.

Yeosang casi se cae al suelo debido al rápido movimiento que hizo con sus piernas al detenerse, estaba a varios metros de distancia pero aún así pudo escuchar las palabras de los mejores amigos del mayor, cesando aquella sonrisa que había prevalecido en su rostro por varios minutos mientras caminaba. Los nervios comenzaron a invadirlo, y esa pequeña sensación se terror se fue haciendo presente cada vez más.

Aquel peluche que traía entre sus brazos fue brevemente apretado contra su pecho, utilizando toda la fuerza posible, frunciendo los labios debido a ese pequeño sollozo que quería salir por el nuevo descubrimiento que estaba viviendo.

— ¿Cuando lo atropeye? No me quieras hechar la culpa por tus estupideces, todo fue culpa tuya

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— ¿Cuando lo atropeye? No me quieras hechar la culpa por tus estupideces, todo fue culpa tuya. — San frunció el entrecejo, sintiéndose irritado por un minuto, sin embargo, no prevaleció mucho tiempo.

Recordar ese pequeño acontecimiento marcaba en la cabeza de San un pequeño silbido que iba haciéndose cada vez más grande al punto de sentirse demasiado pesado, doloroso, aterrador. Yeosang se sintió asustado cuando volvió a su realidad y se encontró con San arrodillándose mientras tomaba su cien con una de sus manos, su expresión reflejaba dolor, podía notar como sus ojos se presionaban demasiado llegando a formar una línea forzada, su cuerpo casi se tendía contra el suelo hasta que Yeosang se acercó y logro tomarlo por los hombros.

El movimiento efusivo que hizo Yeosang inmediatamente para acercarse al mayor y sujetarlo evitando que cayese les sorprendió a todos, Mingi y Hongjoong no esperaban que se acercará y mucho menos que permaneciera aún a su lado.

— ¿Eres acaso idiota? ¿Tanto te gusta un asesino?— Hongjoong comenzó a reír estruendosamente, era sorprendente que aún así quisiera a Choi San.

— Si que eres un estúpido Hongjoong, ¡Ya fue suficiente! — Yeosang sentía su sangre hervir por la rabia, San estaba sufriendo, era más doloroso que la cruel verdad, que esa cruda verdad. La impotencia en su voz hizo que cerrara sus ojos con fuerza, tanta fuerza que sus dientes castañearon y emitieron un crujido.

— Ya comprendo, debió haberte dado por el culo. Jajaja, ¡Hongjoong! ¡Le ha dado por el culo!— Mingi grito expectante, burlándose, aunque en realidad nada de eso era verdad.

La mirada de Yeosang mostraba que estaba enojado, demasiado enojado, sus labios formaron una especie de línea, lo suficientemente visible como para notarse que está misma la estaba frunciendo demasiado. Una de sus manos se formó en puño fuertemente causándole dolor debido a lo delicadas que eran las manos del menor.

Cuando Yeosang abrió sus ojos dejo de sentir la anatomía de San sujetada por sus manos, por un instante se sintió asustado, temeroso, pero cuando volteo al frente tras escuchar el sonido de un cuerpo caer contra el pavimento se dió cuenta de la realidad. San golpeó a Hongjoong en la cara provocando que ambos cayeran al suelo. Golpe tras golpe, sin que Mingi hiciera absolutamente nada, Hongjoong le devolvió el golpe en el labio inferior, golpe tras golpe.

Y golpe tras golpe...

Continuara....

Diamond "SanSang" [Parte I, II Y III]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora