Diamond "SanSang" [Parte I, II Y III]

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"Feliz cumpleaños al amor de mi vida"
"ojitos de amor"
"Parte I"

Temprano por la mañana San despertó durante la madrugada, era un día especial, demasiado especial, no solía ser un día cualquiera esa fecha, ya habían pasado casi dos años desde que Choi San y Yeosang tenían una relación, durante ese lapso de tiempo habían tenido muchos altibajos, entre el trabajo que San mantenía, del cual Yeosang ya estaba más que enterado, y, aunque al principio no podía aceptarlo, finalmente termino haciéndolo, con una sola condición, si seguían juntos hasta el punto de tener una familia dejaría todo eso.

Aunque San dudaba al respecto sobre dejar el negocio familiar, terminó aceptando, más que nada, por comodidad de ambos, desde ese momento ambos pudieron tener una vida agradable, habían vivido meses maravillosos juntos, ahora, se encontraban en un viaje de negocios en París.

Desde hace algunos meses atras cuando San le comento a Yeosang que irían a París quedó fascinado, estaba emocionado por ese viaje, como solía estarlo cuando viajaban, aunque Yeosang estaba por terminar su último año de universidad, Choi San ya había comenzado a trabajar, con ello, ambos ya podían vivir juntos, pero ese tema estaba en discusión. Últimamente la abuela de Yeosang estaba más enferma que nunca, después de que su condición fue empeorando le diagnosticaron Alzheimer, fue un duro golpe para la familia, por esa razón Yeosang estaba más cerca de su familia.

La madre de Yeosang había terminado casándose de nuevo, con un marino, no estaba mucho en casa pero se llevaba bien con Yeosang, aprobaba su relación actual con San, a pesar de no estar muy familiarizado con los modernos temas de la actualidad, aún así, si su esposa estaba feliz, él también lo estaba, todo lo contrario al ex marido que tenía antes.

Habían surgido demasiados cambios durante esos dos años, pero fueron suficientes para alegrarle la vida a Yeosang, sobre todo cada momento que pasaba junto a la persona que amaba con toda su alma. Choi San había sido una persona realmente hermosa con él, lo adoraba, y quería continuar a su lado por mucho tiempo más, si era posible, toda la vida.

Esa mañana Yeosang estaba cómodamente recostado en la cama, cubierto por las sábanas calidas que cubrian parte de los hombros propios, con una sonrisa dibujada en los labios debido a esos encantadores y pacíficos sueños que tenía después de una noche energica.

Yeosang poco a poco fue perdiendo ese miedo a mantener relaciones con alguien, San le ayudo con ello, aunque al principio había sido bastante complicado que sucediera, San fue paciente, a pesar de sus necesidades.

Sin percatarse del día, hora, o momento en que San abandono la cama dejándole solo, cuando despertó esa mañana pudo darse cuenta de ello con simpleza. Después de haberse removido en la cama un poco dando vueltas, una de sus manos se había encargado de buscar mediante pequeños movimientos tanteando a su lado, buscando la presencia de su ser amado, pero no estaba. No permanecía en ese momento junto a él, muy lentamente y con bastante flojera incluida el menor fue abriendo sus ojos, comenzando con uno, para enfocar mejor su costado, seguidamente continuo con el otro, entrecerrando sus ojos, tratando de encontrarse a su pareja, pero no estaba alli, sin rastro alguno que pudiera darle algún indicio de continuar en casa.